13 de octubre de 2024

S.L.B.: LA GENEROSIDAD DEL F.M.I. ES REALMENTE CONMOVEDORA CON MENOS USURA – VIEJOS DECRETOS, AL RINCÓN DE LOS OLVIDOS - ¿NADIE PUEDE CONTROLAR A LOS “NARANJITAS”? – ES MÁS BARATO MORIR QUE GASTAR EN REMEDIOS – LA JUSTICIA CORDOBESA Y UN EXAMEN QUE VENCIÓ A LOS TIEMPOS – DESORIENTACIÓN DE MILEÍSTAS, RADICALES Y ¿PERONISTAS? – COMERCIANTES NO SE HAN ENTERADO DE LA BAJA EN LA INFLACIÓN – DESPEDIDA CON OSCAR WILDE, ETC.

Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” edición nº 852 del domingo 13/10/24 emitida por la AM580 Radio Universidad Nacional de Córdoba.

Un beneficio para países en crisis
CONMUEVE LA GENEROSIDAD DEL F.M.I. SI
ES CIERTO  QUE  NOS REBAJAN SU USURA

    El Fondo Monetario Internacional decidió un par de días atrás reducir las sobretasas, que impone a los países prestatarios muy endeudados, como los casos de nuestro país o Ucrania, una medida que "reduce sustancialmente el costo de los préstamos, salvaguardando al mismo tiempo la capacidad financiera del FMI para apoyar a los países que lo necesitan", comentó Kristalina Georgieva, directora gerente del Fondo, en un comunicado.
   Estas medidas aprobadas por la organización financiera, según se anunció, "reducirán los costos de endeudamiento del FMI para los miembros en un 36 por ciento, unos 1.200 millones de dólares anuales", agregó Georgieva.
   El número previsto de países sujetos a sobretasas en el ejercicio 2026 se reducirá de 20 a 13, añadió y para conseguirlo el organismo financiero cambió el umbral a partir del cual se cobran y el margen de interés en determinados casos, y aplicará ahora el 2 por ciento de sobretasa cuando la deuda del país supere el 300 por ciento de la cuota asignada en lugar del 187,5 por ciento como antes supo ser.
   Y si la deuda pendiente excede ese límite por más de 36 meses el país pagará un 0,75 por ciento adicional, en vez del 1 por ciento hasta ahora. Lo bueno es que Georgieva explicó que "en un entorno mundial desafiante y en un momento de altas tasas de interés, nuestros miembros han llegado a un consenso sobre un paquete integral que reduce sustancialmente el costo de los préstamos, salvaguardando al mismo tiempo la capacidad financiera del FMI para apoyar a los países que lo necesitan".
   Uno de los países más beneficiados es el nuestro, que ha contraído una deuda con el organismo de 44.000 millones de dólares y ahora se logró "una reducción de casi el 30 por ciento del pago de cargos y sobrecargos para la totalidad del préstamo actual", fue lo que explicó nuestro Ministro de Economía en un comunicado sobre la medida adoptada por el Fondo.
   Durante los próximos tres años fiscales "la reducción será de aproximadamente 1.100 millones de dólares", añadió, y las medidas, que entrarán en vigor el próximo 1 de noviembre, benefician a una veintena de países, incluidos Ecuador, Costa Rica, Pakistán, Sri Lanka, Kenia, Angola, Egipto y Jordania, entre otros.
   Según el Centro de Investigación Económica y Política entre 2004 y 2023 Argentina pagó un total de 4.386 millones de dólares en sobrecargos. Ecuador abonó 320 millones entre 2020 y 2023 y Costa Rica 10,7 millones entre 2022 y 2023.
El gobierno del presidente Joe Biden apoya el recorte para aliviar la carga de Ucrania, en guerra con Rusia desde que tropas rusas invadieron su territorio en febrero de 2022 y Georgieva tiene la certeza que la reforma contribuye a garantizar que el FMI pueda servir a sus miembros "en un mundo cambiante" aunque defiende que las sobretasas "siguen siendo una parte esencial del marco cooperativo de préstamo y gestión de riesgos" del FMI, "en el que todos los miembros contribuyen y todos pueden beneficiarse del apoyo cuando lo necesitan".
   El Fondo considera los sobrecargos como incentivos para que los miembros -escuche bien y no lo olvide- limiten el volumen de los créditos, diversifiquen las fuentes de financiación y paguen a tiempo aunque numerosos expertos discrepen, protestando con el argumento que cada uno de los dólares de sobretasas "es un dólar que no se gasta en sanidad, educación y transición hacia energías limpias".
   Roguemos ahora que los cráneos que manejan la economía argentina, no se endulcen con la medida y aprovechen para incrementar la abultada deuda que tenemos, contraída por nuestros gobernantes de todos los colores políticos, y paralelamente negada por algunos que siguen insistiendo con aquella fantasía del desendeudamiento.
 
¿Un viaje hacia nuestra historia?
VETUSTOS DECRETOS PASAN A ENGROSAR
NUESTRO  VASTO  RINCÓN DE LOS OLVIDOS


   El Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, que encabeza Federico Sturzenegger, confirmó que el Gobierno envió al Congreso la que llamó “Ley Hojarasca” por la cual se propone “derogar normativas obsoletas que representaron un obstáculo a las libertades y afectaron el derecho a la propiedad, entre otros abusos del Estado, muchas de ellas sancionadas durante los gobiernos militares del siglo pasado.
    Con tal medida se derogarán unas 70 leyes, entre otras, de los períodos presidenciales de Isabel, Lanusse, Perón, Onganía, Videla, Kirchner, Alfonsín, Illía, Bignone, Frondizi, Cristina exElla, Justo, Farrell, el “Tío” Cámpora, Uriburu y Lastiri”, se indicó en un comunicado ministerial.
   El proyecto enviado al Congreso, ya está en poder de la bancada radical en el Congreso y probablemente también en conocimiento de las demás bancadas de oposición, Stuzenegger citó ese viejo adagio: “cuanto más leyes menos justicia”, respecto del cual, agregó, el jurista norteamericano Grant Gilmore escribió: “Cuantas más leyes peor será una sociedad. En el infierno ¡no hay otra cosa que la ley!”
   Y desde la cartera desreguladora adelantaron que “realizó un análisis detallado de las leyes argentinas y encontró seis motivos para la derogación de diferentes normas, a saber: Leyes que limitan la libertad individual y restringen el derecho de propiedad, las que eliminan trámites inútiles y sin sentido, aquellas que fueron superadas, actualizadas y mejoradas por otras leyes posteriores, otras que en la actualidad son obsoletas por los cambios tecnológicos, leyes que dejaron de tener sentido porque definían obligaciones para instituciones que dejaron de existir, leyes que crean organismos con financiamiento público cuando deberían solventarse a sí mismos y algunas otras más.
   En definitiva, dice el texto, redactado según se comenta por el propio ministro, a quien el presidente Milei suele llamar “Coloso”, el proyecto “busca lograr un cuerpo jurídico más pequeño, más ordenado y, por ende, más justo y una Argentina con mayor libertad” y la iniciativa busca avanzar en la senda desreguladora, de reducción del estado y de desburocratización que se había iniciado con el DNU 70, que entre otras cosas derogó la ley de alquileres sancionada en 2020, dio grandes márgenes de libertad a las partes en la redacción de los contratos, incluidos aspectos claves como el plazo, la frecuencia y los criterios de actualización.
   La otra gran pieza legislativa surgida (aunque no exclusivamente) de Sturzenegger fue la llamada “Ley Bases” que tras un primer traspié legislativo fue reelaborada en una versión reducida que tras una larga negociación fue aprobada por ambas cámaras del Congreso de la Nación.
   De todos modos, Milei había señalado anteriormente que las reformas y derogaciones serían varias veces más grandes que las propuestas hasta ahora. Por el tamaño de la ahora bautizada “Ley Hojarasca”, daría la impresión de que el gobierno tiene varias reformas más para aplicar.
   Si el objetivo de tamaño desguace es aportar agilidad administrativa, bueno sería que muchas otros instrumentos legales oportunamente impuestos, fueran también revisados y lo que es más importante, actualizados en función de las nuevas dinámicas imperantes en cualquier país del mundo que tenga como objetivos el crecimiento como tal y el respeto y bienestar hacia sus habitantes.
 
Alguien debe imponer orden…
“NARANJITAS” INCONTROLABLES Y NUEVO
MOTIVO PARA PONERLOS  BAJO  CONTROL
 
   Es probable que un comentario acerca de cualquier tema que para muchos puede llegar a ser intrascendente, no repercuta en las autoridades para quienes todas las cuestiones relacionadas con la vida corriente y en armonía son importantes y dignas de evaluación y si cabe, de soluciones perdurables y no de parches o remiendos.
   El tema es la actividad de los “naranjitas” en sus dos salientes categorías: los que cumplieron con la ordenanza de registrarse como tales aportando entre otros requisitos -tengo entendido- un certificado de buena conducta, es decir no contar con antecedentes delictuales y se supone que algunos otros que certifiquen la decencia de quien quiere asumir esa tarea.
   La otra “categoría” por así llamarla es la de los prepotentes apretadores de automovilistas, que suelen aparecer en las cercanías de espectáculos deportivos de alta convocatoria, en lugares de concentración de gente e incluso en los barrios, donde pretenden cobrar su servicio por anticipado aplicando tarifas exageradas, aunque muchos de esos “naranjitas” truchos una vez que embolsan unos mangos se mandan a mudar.
   Lo peor de todo es que al coexistir ambos modelos de cobradores de sitios públicos, las refriegas entre ellos son corrientes y muchas veces adquieren  elevada gravedad, con heridos de consideración o daños a los vehículos estacionados porque sus conductores se niegan a pagar los abusos que les exigen.
   Es tan simple la solución, aunque el método seguramente será descartado con el argumento que no alcanza el personal, que no cuentan con vehículos para desplazarse o simplemente porque no les corresponde, pese a ser una cuestión delicada por las consecuencias que su descuido suele alcanzar.
   Con destacar un par de policías para que recorran los sitios peligrosos, bastaría y sobraría, y se alcanzaría el objetivo de paz y tranquilidad que merecen los vecinos, sobre todos aquellos que poseen cocheras y las encuentran bloqueadas durante horas por vehículos que los “naranjitas” han permitido que allí estacionen.
   La solución es tan simple, que alcanza sólo con aplicar la ley…
 
Se necesitan soluciones, no culpables…
LO TERRIBLE  DE COMPROBAR QUE ES MÁS
BARATO MORIR QUE GASTAR EN REMEDIOS
 
   “El ser humano es más ancho que sus esperanzas. Decimos no resistiré más; si llega una gota más de dolor, estallaré. Y luego llega, no una gota sino un chorro de espanto. Y resistimos. Seguimos resistiendo. También seguimos diciendo que ya no podemos más, que estamos en las últimas. Pero sabiendo que la goma del corazón aún se estirará más sin romperse”.
   Estos conceptos, dolorosos pero certeros y más comunes de lo que podemos imaginar, son de Martín Descalzo cuando se refiere al dolor.
   Los argentinos, del tema dolor podemos dar cátedra a muchas nacionalidades, lejanas o no, por eso de aceptar el sufrimiento, incorporarlo a la habitualidad y tener no obstante la íntima certeza que los malos tiempos pasarán y los días de gloria, salud y bienestar aún están por venir.
   Actualmente y a esta cuestión viene el comentario, el peligro de enfermarnos tiene dos punzantes aristas: lo que podemos padecer por el mal que nos aqueje, o la impotencia que rodea a cualquiera de nosotros cuando advertimos, mal que nos pese, que en muchos casos resulta más barato morirse que curarse.
   En este aspecto y dejando de lado la trascendencia que tiene el desarrollo de la ciencia, lo que no todos terminamos de reconocer y agradecer, están otros factores que se suman a la desgracia de una enfermedad que requiere tratamiento.
   Y que ese tratamiento, aunque esté su costo cubierto por los sistemas de salud, se enfrenta a un detalle al que no le encuentro una vinculación positiva que ayude a la recuperación de un paciente, y es lo inalcanzables que son muchos de los remedios necesarios para una correcta terapia.
   Son tan descomunales y deshumanizados los laboratorios, que los precios de los medicamentos en muchos casos los trasforman en inalcanzables, lo que equivale a un sufrimiento mayor por los previsibles resultados y desenlaces.
   Y vamos con un ejemplo, en el que es de suponer que algo tienen que ver las otras etapas de la comercialización de fármacos hasta que llegan al paciente y es que por ejemplo en Chile, un medicamento elaborado en Argentina y se supone que pagando aranceles aduaneros elevarían su valor, cuestan poco más de la mitad de lo que ahora pagamos por la misma mercadería en nuestro país.
   No vamos a descubrir la pólvora ni el agujero del mate, pero es para considerar que ya es hora de controlar esas cuestiones con rigidez social más que con visión exportadora.
   La salud de la población, que se me ocurre es uno de los aspectos más atendidos por el gobierno, pero no alcanza al entrar al tema de los medicamentos como si los laboratorios fueran intocables, y alentados por una impunidad que los hace alejados de la sociedad, por esa angurria que por lo general lucen las empresas de capitales extranjeros enraizadas en nuestro territorio.
   Nuestros valores de respeto por la vida son vulnerados por esa perniciosa angurria, seguramente pensando hacia adentro que nosotros, quienes mucho sabemos de sufrir, que posiblemente si algo valemos para ellos, es por nuestros sufrimientos.
 
Megacausa Registro de la Propiedad
LA JUSTICIA CORDOBESA Y UN EXAMEN QUE
SIN RESPUESTAS YA VENCIÓ A LOS TIEMPOS
 
   El Grupo de Trabajo de las Naciones Unidas sobre la Detención Arbitraria es un organismo creado para investigar casos de detenciones impuestas arbitrariamente, e incompatibles con las normas internacionales aceptadas por los Estados interesados. 
   En respuesta a una denuncia recibida sobre la causa Registro de la Propiedad de Córdoba, dicho organismo emitió un dictamen en el que consideró como arbitrarias distintas acciones por parte del Poder Judicial, como el encierro en prisión preventiva durante el proceso, la falta de medidas alternativas, la duración de la privación de la libertad y la falta de juicio en un plazo razonable.
   Como consecuencia, recomendó al gobierno de la República Argentina disponer la inmediata libertad y reparar el daño material y moral causado por la medida. La palabra ‘reparar’ tiene un profundo significado y según la Real Academia Española que siempre en estos casos consultamos, implica arreglar algo que está roto o estropeado, enmendar, corregir, remediar, desagraviar, satisfacer al ofendido, oponer una defensa contra el golpe, restablecer las fuerzas, dar aliento o vigor, atender, considerar, reflexionar, entre muchas otras acepciones.
   En la causa citada hubo imputados absueltos después de años de prisión y otros fallecidos en encierro sin haber sido juzgados. Es difícil imaginar de qué manera cumplirá el Estado con la recomendación del Organismo Internacional.   
   Es cuando en cualquier mente lúcida se amontonan las preguntas que necesitan respuestas claras y no dilatorias: ¿Se podrá arreglar la libertad quebrada o enmendar el honor roto y estropeado? ¿Se podrá corregir la prisión injusta? ¿Se podrá remediar el tiempo, trabajo, dinero y momentos familiares perdidos? ¿Cómo se desagravia o satisface al ofendido? ¿Alguien opone una defensa o se encarga de prevenir el daño de las acciones judiciales arbitrarias? ¿Cómo se restablecen fuerzas, se alienta, se atiende o se considera a los damnificados? 
   Respecto a las consecuencias de tantos reiterados caprichos jurídicos, la más lacerante de las preguntas: ¿Y los muertos nunca juzgados?  
   Un examen todavía pendiente para la Justicia cordobesa. 
 
Un curioso aspecto que los iguala…
MILEÍSTAS, RADICALES Y PERONISTAS Y 
LA COINCIDENCIA DE ESTAR  DESORIENTADOS

   Realmente no era mi intención abordar intimidades que se materializan y anidan en el seno de las principales fuerzas políticas de nuestro firmamento nacional, porque son tan complejas como blindadas en sus detalles, como para poder evaluar la realidad de cada corriente.
   Y como paralelamente advierto que tanto mileístas como radicales, peronistas y kirchneristas no resignados coinciden en mostrar una desorientación que es inútil disimular, me quiero permitir apelar a grandes pensadores, invitando a los interesados en el tema para que abreven en esos mismos caudales del conocimiento.
   Chésterton con su particular y graciosa manera de pensar y decir sostenía “No me siento capitalista ni socialista, porque si no es bueno un sistema controlado por un grupo de financistas, tampoco lo es el controlado por un grupo de funcionarios.
   Léstor Thurow en cambio pontificaba que “La historia nos enseña que el capitalismo es un sistema intrínsecamente inestable, y que de tanto en tanto hay que salvarlo de sí mismo. Es como un auto de carrera que a menudo necesita muchas reparaciones regulares así como revisiones y reglajes”.
   Demasiado técnico para mi gusto…
   Alvin Toffler tenía una visión cercana a lo romántico pero con reservas: “La corrupción y el capitalismo amiguista traban el crecimiento económico. Se los considera enfermedades de los países pobres no occidentales. Si esos países quieren crecer, deben atraer capitales extranjeros y para ello deben ser menos reservados, más transparentes y, por tanto, menos corruptos”. Un tipo que dio en el clavo... 
   Y a la hora de optar después de leer transpirando hasta los párpados, me encontré con un discurso valioso: “El capitalismo es el sistema más perfecto surgido hasta ahora en la historia para la creación de riqueza. Enraizado en un instinto poderoso, la ambición de poseer moviliza la energía y la inventiva humanas en la creación de bienes y servicios de una manera ilimitada, y por eso ha sido la locomotora del progreso tecnológico y científico, el instrumento de la civilización moderna que ha derrotado a sus competidores. Este es un sistema frío, amoral, que premia la eficacia y castiga la ineficacia sin contemplaciones. Se humaniza gracias a la democracia, con un Estado de derecho, donde haya jueces independientes ante los que puedan acudir los ciudadanos cuando son atropellados, leyes que garanticen el respeto de los contratos, la igualdad de oportunidades para todos e impidan los monopolios y los privilegios”.
   A estas definiciones las dijo no un político, financista, estudioso de las economías y títulos que se le parezcan.
   Las dijo Mario Vargas Llosa, y pensar que muy cerca de nosotros, hay opas que sostienen -y supieron practicar- que todo es cuestión de darle a la maquinita de imprimir dinero, o endeudarnos hasta la coronilla sabiendo que no podremos afrontar esos compromisos.
   A esa actitud muchos le llaman, o mejor dicho le llamamos, lisa y llana estupidez
 
¿Será por capricho o especulación?
INFLACIÓN EN BAJA: LOS COMERCIANTES Y
SU INDIFERENCIA  FRENTE A ESA REALIDAD
 

   Escaso es el tiempo que nos queda, como para abordar un tema que sin dudas nos preocupa a todos los argentinos, en estos complicados tiempos que transita nuestra castigada economía: antes que nada, debo reconocer que considero serias las cifras de la inflación medida en el pasado mes de septiembre.
   Escuché que estuvo un poquito encima del 3 por ciento, lo que para el poder significa seguir trepando la empinada cuesta hacia el logro de la ansiada y merecida estabilidad, pero para tal objetivo, bueno sería que todos, todas y todes si así lo prefieren, tiremos para el mismo lado.
   Si es real eso de tan baja inflación, es inentendible la reacción de muchos comerciantes, especialmente los del último tramo antes de llegar al consumidor, que es como si no se hubieran enterado de la grata nueva, y siguen empecinados en la tarea de encarecer los precios, cuando al menos debieran estabilizarlos.
   Una actitud tan peligrosa como mezquina, porque ese sector de la comercialización es fundamental para la actividad corriente de cualquier hogar, empresa o conglomerado ciudadano.
   Quedarse y emperrarse en seguir encareciendo mercadería en lugar de ajustarse a una realidad como esa baja aunque mínima de la inflación, debiera ser un deber, más que comercial, con sentido patriótico y solidario.
   No hacerlo, es ubicarse en la vereda de enfrente, donde están los avivados de siempre…
 
LA DESPEDIDA CON PALABRAS
DEL  INEFABLE  OSCAR  WILDE
 



                

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