30 de octubre de 2022

S.L.B.: ASUMIR MÁS DEUDA, “PATEARLA HACIA ADELANTE” Y QUE LA BANQUEN LOS QUE VENGAN DESPUÉS – CON LA CAJA DE JUBILACIONES EN MANOS DEL “CORDOBESISMO” ¿SE FACILITARÁ SINCERAR EL 82%? – EL CERRO CHAMPAQUÍ, BELLO ESCENARIO DE TRAGEDIAS – LA MEGACAUSA DEL REGISTRO, AÑEJO TEMA – PARECE QUE A LAS FILMACIONES DE ROBOS Y ASALTOS SOLO LAS APROVECHAN LA T.V. Y LOS MEDIOS GRÁFICOS – LA “MUNI” ACUMULA DEUDAS QUE VIENEN DE GESTIONES ANTERIORES – SALUDABLE CALMA POLÍTICA ¿SERÁ LA QUE PRECEDE A LA TEMPESTAD? , ETC.

Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” edición nº 750 del 30/10/22 emitido en dúplex por la AM580 y la 88.5FM ambas dependientes de Radio Universidad Nacional der Córdoba.
 
Un “regalo” poco simpático…
ASUMIR MÁS DEUDA, PATEARLA HACIA ADELANTE
Y QUE LA BANQUEN  LOS  QUE  VENGAN  DESPUÉS
 
   Son muchas las sentencias que se conocen refiriéndose a los regalos y Ovidio supo pensar en voz alta cuando comentó “siempre son los mejores recibidos aquellos regalos que toman todo su valor de quien los hace”, lo que hilando fino se traduce en una especie de antiguo piropo hacia la personalidad del obsequioso.
   Y de obsequios hablando, mucho hace pensar esa especie de acidez conceptual que adornaba a Eurípides, quien no vaciló al sostener, y escuche y analice bien, porque es muy breve: “Dícese que los regalos persuaden aún a los dioses” equivalente pensamiento y posición, que en alguna medida descalifica a personajes del más elevado nivel dentro de la sociedad o que influyen en ella.
   En suma e intentando resumir, es para sospechar que existen regalos que suelen llegar a sus destinatarios sin que el supuesto beneficiario siquiera los hubiera pensado, porque si de eso dependiera, seguramente hubiera optado por no recibirlo, o hacerlo por cortesía para luego devolverlo sin dejar pasar los años.
   Tal el panorama que se avizora o peor aún que los maliciosos imaginan -mejor debo gallardamente confesar que imaginamos- que es como recibir como ofrenda, dádiva o presente una bomba de efecto retardado, preparada prolijamente para estallar en un determinado tiempo, cuando el obsequioso se vio obligado a retirarse, o lo expulsaron de su posición dominante.
   Desde la cúpula del poder nacional se concretó una importante operación, tengo entendido que con el Club de París, que le posibilita recibir un par de miles de millones de dólares o una cifra parecida, con lo que nuestro país pagaría parte de los intereses adeudados por compromisos contraídos y no amortizados en el tiempo que se le concediera, dejando abierto el camino para pasar facturas de marcada antiguedad.
   La verdad, no es momento ni estamos los argentinos en situación de cuestionar los usurarios intereses que se supone aplican los prestamistas internacionales, porque nuestra bien lograda fama de deudores seriales nos ha colocado en la tapa de los informes que se divulgan mundialmente, elaborados por aquellos organismos de elevada notoriedad, encargados de escrachar a los desmemoriados o incumplidores, los que mediante cualquier artimaña distractiva o asumiendo el papel de víctimas de conjuras ideológicas que nos perjudican, buscan y negociando siempre la ampliación de pagos, para que sean otros los que carguen con el muerto.
   Tal nuestra realidad burdamente evaluada a la luz de la información que el poder prolijamente filtra, para que no aparezcan interferencias que malogren lo que desde su seno consideran un exitoso logro de la gestión,  y angustia existencial entre quienes piensan que con poquitos años, pueden ser los destinatarios de esa gratificación como si se tratara de una gigantesca propina por el aguante.
   Habrá que esperar el paso del tiempo para salir de dudas si lo negociado ahora, a plazos que exceden un mandato cuya renovación aparece dudosa, fue una patriótica cortesía o la simple aplicación de eso tan remanido “que lo pague el que viene”…
 
Nuestra Caja de Jubilaciones
CON EL CONTROL  DEL  “CORDOBESISMO” ES PARA
SUPONER QUE HABRÁ UN SINCERAMIENTO DEL 82%
 
   Es un acto de justicia que no pocos pese a todo cuestionan, recalcar que las jubilaciones que paga la provincia del “cordobesismo” son la envidia del nivel nacional en cuanto a los montos -un término que por allí uno se niega a utilizar- al igual que de muchas otras provincias de nuestro territorio nacional, aunque es cierto que perdemos como en la guerra cuando esas comparaciones se hacen transformando los pesos en dólares y haciendo viajar la situación a otros años en que lucíamos una moneda estable y no tan decrépita como en la actualidad, sumando el detalle que con nuestro billete de mayor valor -mil pesos- escasamente alcanzamos a comprar 2 dólares con 55 centavos, a la cotización del accesible billete “blue”, en cualquier cueva del país.
   Pero volvamos a la realidad de los jubilados y en tal sentido, en esta semana se me ocurrió ponderar la firmeza del “Gringo” Schiaretti en su tozuda postura de conservar la autonomía de nuestra Caja de Jubilaciones, Pensiones y Retiros, que desde hace tiempo viene siendo manoseada desde el poder central pretendiendo que pase a la órbita nacional.
   Me atacaron de mil maneras, me denostaron, se acordaron de mi Mamá y en las redes sociales una señora llegó a calificarme como maldito, persona desagradable y otros piropos que rozaron lo gracioso pese al odio que destilaron, actitudes que evaluándolas comprendí que mi mensaje no había sido entendido, a lo mejor porque iba dirigido a seres inteligentes.
   Considero humildemente que si Córdoba conserva el manejo de su Caja de Jubilaciones, mantiene el dominio al menos territorial de la situación, porque todo lo que hay que protestarle a la Caja, las quejas, la curiosa alquimia matemática que pretende instaurar la idea que está pagando el 82 por ciento de ley cuando es una mentira más grande que el Panal de donde salió, se podrá hacer en el íntimo marco de una provincia distinta al resto, sin interferencia tan directa ni interesada del poder central, que es el angurriento padre de familia que vive buscando dónde rascar recaudaciones, habiendo llegado al caso de imponer y mantener vigentes, escuche bien y a lo mejor me quedo corto, alrededor de 165 impuestos, contando el más reciente y no quiero calificarlo como el último, de gravar en 250 pesos -menos de lo que vale un café- todo pasaje aéreo tengo entendido tanto de cabotaje como internacional, para destinarlo al sostenimiento de la Policía Aeroportuaria, como si no tuviera cómo mantenerse…
   Resumiendo, Schiaretti que de números la conoce lunga, seguramente aprovechará esta oportunidad histórica de erigirse en el justiciero de una situación lamentable en cuanto al engaño a los viejos, los más vulnerables y no es un cuestionamiento a los haberes que reciben, sino a la falacia de bolsiquearles una parte.
   Y esa acción reivindicativa que puede ser el fruto y consecuencia de airados como inútiles hasta ahora reclamos, tendrá que concretarse teniendo la manija de la Caja aquí, en Córdoba, sin que deba decidir por nosotros una cabeza a la que no le inspiramos ninguna simpatía y hasta me animo a decir que nos tratan con irrespetuosidad.
   Con su postura firme, es posible que Schiaretti pueda sorprendernos sincerando los números, esos números que como les acabo de comentar, el “Gringo” domina mejor que muchos… y muchas.
 
¿Es incontrolable el cerro Champaquí?
LAS  IMPRUDENCIAS E IMPROVISACIONES GENERAN
ALTOS COSTOS POR LOS OPERATIVOS DE RESCATE
 
   Es como si mucha gente tomara como exageraciones los permanentes llamados a la prudencia que se imparten de mil maneras, cuando se habla de excursiones grupales con fines turísticos a sitios potencialmente peligrosos, especialmente cuando no acompañan las previsiones meteorológicas lo que más se agrava en la época invernal.
   Es como si cada excursionista se considerara dotado de poderes especiales contra cualquier adversidad, de las tantas y variadas que pueden presentarse, lo que se agrava cuando los excursionistas no cuentan con experiencias en montaña y devalúan el necesario respeto que hay que tenerle al frío y al viento, lo que se potencia muchas veces por la displicencia de meterse en una aventura con ropa y calzado inadecuados.
   Todo el resto de lo negativo hay que echárselo en cara a la fatalidad, y es cuando se cae en cuenta que las improvisaciones no son aconsejables, y menos eso de aventurarse en territorios desconocidos y agrestes.
  Cada desgracia que ocurre en las tantas excursiones hacia esa belleza serrana que es la cumbre del cerro Champaquí, con una visión maravillosa de los valles que lo circundan, es atribuible más a imprudencias que a descuido de quienes debieran ser más exigentes con quienes se aventuran a esos paseos que suelen terminar en fatalidades algunas veces, aunque la acción de bomberos y rescatistas es lo que posibilita que no haya tantas víctimas como las que se generan cuando el descontrol es absoluto.
   Dejemos de lado los enormes costos de movilizar a decenas de bomberos, que dejan de atender sus cuarteles y los llamados que pudieran registrarse, por buscar, encontrar y rescatar a inconscientes que se creen reyes de la aventura.
   Creo que hay una disposición que calcula el costo de cada operativo y sus protagonistas deben solventar pecuniariamente por los gastos demandados, calculando lo que cuesta una hora de helicóptero y todo lo demás que integra una situación como la enunciada.
  Debieran hacerse controles más estrictos, aunque algunos delirantes consideren que es vulnerar libertades individuales y someterlos a un riesgoso desempeño de lo que no tienen ni la más mínima idea.
   La obligación de realizar las caminatas llevando un guía experimentado, equipos de comunicaciones, abrigos adecuados y botiquines de primeros auxilios, serían la garantía que si sucediera algo anormal, estarían adoptados los recaudos pertinentes.
   De lo contrario, es una especie de macabro juego hacia tragedias que bien pudieran evitarse.
 
Megacausa del Registro
A  LA  HORA  DE  LAS  REPARACIONES, ARDUA
ES LA TAREA QUE LE AGUARDA A LA JUSTICIA
 
   Dice nuestro diccionario y espero no cansar a nadie porque cada domingo debo apelar a ese libraco, que reparar es arreglar algo que está roto o estropeado, enmendar, corregir, remediar, desagraviar, satisfacer al ofendido, oponer una defensa contra el golpe, precaver un daño o perjuicio, restablecer las fuerzas, dar aliento o vigor, atender, considerar, reflexionar, entre otras, porque tiene sinónimos para elegir.
   Hace unos años un fallo de la Organización de las Naciones Unidas en la causa del Registro de la Propiedad de Córdoba, recomendó al Estado Argentino disponer la inmediata libertad de un imputado y reparar el daño material y moral causado.
   Semejante Dictamen se cumplió recién tres meses después con la libertad del imputado, que meses más adelante fue absuelto, habiendo pasado casi tres años en prisión pero lamentable e inexplicablemente de la parte de reparar, nada se sabe aún. 
   Me intriga saber, un sentimiento que quiero transferirle a la sociedad, de qué manera cumplirá el Estado con la recomendación de tan calificado organismo internacional. 
   ¿Se podrá arreglar la libertad quebrada o enmendar el honor roto y estropeado? ¿Se podrá corregir la prisión injusta? ¿Se podrá remediar el tiempo, trabajo, dinero y momentos familiares perdidos? ¿Cómo se desagravia o satisface al ofendido? ¿Alguien opone una defensa o se encarga de prevenir el daño de las acciones judiciales arbitrarias? ¿De qué manera se restablecen fuerzas, se alienta, se atiende o se considera a los damnificados? 
   Además y es el costado más penoso de esta interminable instancia judicial, hubo quienes murieron en prisión sin haber sido juzgados y es cuando nos invade la indignación de preguntar ¿Quién responde por esos muertos?
   Hay muchos más interrogantes que encierran planteos como para dudar del respeto por los derechos humanos: ¿Existirá algún espacio de reflexión sobre el tema en el Poder Judicial de Córdoba?
 
Incomprensible desaprovechamiento
¿PARA QUÉ  FILMAR  ROBOS Y ASALTOS SI LUEGO
LAS IMÁGENES SÓLO SIRVEN A LOS NOTICIARIOS?
 
   Cada vez con más alarmante frecuencia, la televisión y los medios gráficos nos atiborran con filmaciones y fotografías de robos y asaltos perpetrados en nuestra ciudad y en otras poblaciones de esta Córdoba sorprendente, muchos de tales hechos cometidos por delincuentes que poco se preocupan en resguardar su identidad.
   Lo curioso de estos casos, es que sería bueno que alguna vez, la autoridad policial y la Justicia informaran qué cantidad de casos fueron resueltos en cuanto a su autoría, por el aprovechamiento de ese caudal de imágenes donde muchos hasta se florean por lo que están perpetrando.
   De lo contrario, sería como más o menos ocurre con las infracciones de tránsito, ya que los cientos de cámaras instaladas según se dijo, en estratégicos lugares, más se utilizan de acuerdo con lo que se sabe, para pescar a infractores de las disposiciones de tránsito como lo son el cruce de esquinas con semáforos en rojo o el estacionamiento en sitios vedados, como lo son las rampas para discapacitados y en ese caso particular, las multas superan los 30 mil pesos. Puede que se entienda este tema de las cámaras de tránsito, por la necesidad de recaudar que muestra la comuna no tan sólo en ese aspecto.
   Pero sorprende el otro enfoque: el de las cámaras en lugares privados que seguramente sus imágenes son aportadas a la autoridad para facilitarles la identificación, captura y castigo de los delincuentes que aparecen como posando para un reálity de la TV.
   Para estos casos, es imperioso que se conozcan estadísticas serias como para que quienes instalan cámaras en defensa de sus vidas y bienes, sepan que el costoso sistema bien lo vale.
   Los únicos agradecidos, noticiarios de TV y los diarios…
 
Obras y compras ¿todo es al fiado?
“LA MUNI” SIGUE SUMANDO LO QUE DEBE COMO CONSECUENCIA DE MOROSIDADES ANTERIORES
 
   Cuando uno se entera de la cuantiosa deuda que viene afectando -aunque no se note- a la Municipalidad de Córdoba, queda obligado a pensar, sostener y mascullar que todo lo que se está haciendo, el maquillaje urbano, la compra de bondis, los inoportunos como onerosos arreglos en las plazas que podían esperar más otras erogaciones, se realizan para ser ubicadas en el rubro deudas, por los compromisos contraídos en préstamos y otras operaciones, lo que sería más grave si esas obligaciones se hubieran cerrado en dólares.
   Pero ahora ha surgido el tema de la aplicación de otros dineros, pero para achicar deudas pendientes de anteriores administraciones, y se supone que esto se decidió para que no incluyeran a la Municipalidad de Córdoba en la nómina de organismos estatales incumplidores o duros para pagar.
   Si así son las cosas, es para que podamos por obligación plantearnos ciertas dudas, como por ejemplo de qué manera impune, aquellas administraciones municipales que ocuparon el Palacio 6 de Julio y las decenas de otras dependencias, manejaron dineros que no eran propios y eludieron las obligaciones suscriptas, con lo que incrementaron el nivel de riesgo que sufren aquellos que pasado el tiempo y los gobiernos, no alcanzan a cobrar.
   Leyendo a Chésterton y su fina ironía debemos coincidir con su postura que “solo desde la perspectiva del después es posible verlo todo como pasado, y es entonces cuando se distingue entre lo que es importante y lo que no es más que una futilidad; entre lo que tiene valor y lo que carece de él; se vislumbra la grandeza de las cosas pequeñas y la pequeñez de las grandes”.
   Contundente el gordito porque es como si nos hubiera estudiado actitudes nuestras de siempre, en eso que los beneficios son propios y las deudas son de otros.
   Lo que pasa es que como para refirmar los conceptos anteriores, a un pensador llamado Luis Coloma se le ocurrió decir no hace mucho que “por la calle del después se llega a la vereda del nunca”.
   Roguemos que tal modelo no se ajuste a lo que viene ocurriendo con la deuda de arrastre que ha declarado la administración del ya candidato a gobernador de esta Córdoba maravillosa por el justicialismo.
 
 
Saludable “calma política” nacional…
AGOREROS SOSPECHAN QUE ES EL ESTADO
IDEAL QUE  SE  ADELANTA A LA TEMPESTAD
 
   ¿Por qué será que los argentinos, aun en tiempos de calma chicha, en una amplia mayoría de todos los niveles intelectuales, pensamos que eso no nos puede estar sucediendo porque lo consideramos antinatural por aquello que Dios es argentino?
   Seguramente se debe al largo rosario de padecimientos que cíclicamente sufrimos por la regular, mala, desacertada, equivocada o deficiente línea política que a su turno nos gobierna, o porque ya estamos en una especie de resignación por hartazgo, a que todo tiene que salir mal, incluyendo vaya pavadas, a los gobiernos, el fútbol, las inclemencias del tiempo u otros factores que son determinantes de nuestra felicidad o del reinado de la tristeza.
   Y como tal actitud es para estudios especializados en materia sicológica y en casos más severos para la intervención de siquiatras, por ser individualistas cada quien se encarga de hacer su propio enfoque de una situación determinada, prescindiendo de los gurúes que creen saberlo todo, aunque no puedan explicarnos por qué no son millonarios acertando todos los días la quiniela y cada semana un quini seis.
   Por eso, nada mejor que el enfoque personal y se los voy a comentar: demasiado tranquilos están al menos visiblemente el Sr. Presidente de la Nación y la Sra. Vice porque no se conocen recientes enfrentamientos, desencuentros, descalificaciones, comentarios burlones ni sacadas de lengua, que permitan suponer que la enemistad ha pasado a formar parte de lo formal entre ellos.
   Hay buenas migas, ahora y al parecer, entre Massa con sus desplazamientos en el exterior y entre nosotros, para asegurarse combustible verde que le permita no detener el motor del país porque después no arrancaría ni pechándolo, aunque los derrotistas de siempre estimen que vamos en bajada sin tener en cuenta que así arranca cualquier autito…
   Cómo estarán de calmas las aguas, que hasta se permiten pelear con sordina el heredero de las utilidades políticas y de las otras como lo es Máximo, a quien me comentaron no lo aceptan como afiliado a ningún sindicato de trabajadores y lo rotulan como máximo… exponente en el ahorro de antitranspirantes.
   Los chicos de La Cámpora hacen la propia procurando unir lo que se ha deshilachado y parchar, aunque sea con remiendos momentáneos, algunos daños registrados en el ropaje de un kirchnerismo que aunque muestra una especie de sosiego, sigue en la pelea sin dejar de lado el acercamiento a la CGT que con las demandas satisfechas a Moyano y sus huestes, más que columna vertebral del movimiento justicialista, es una clara reivindicación a su condición de dirigente gremial desplazado del fútbol pero fortalecido en sus inversiones con inmejorable futuro.
   Si el panorama es de estas características, es para ilusionarnos compartiendo dichos del Cardenal Ratzinger, de cuando se le ocurrió sostener que “En esta época de americanización de la vida pública, todos nosotros estamos poseídos por un singular desasosiego, que tras toda forma de quietud sospecha una pérdida de tiempo, olvidando con ello el auténtico misterio de la temporalidad, el auténtico misterio del crecer y del obrar, a saber, la calma”.
   No faltan los agoreros con sus visiones apocalípticas, que exageran sosteniendo que la calma que por fortuna vivimos en estos días, es la que precede a la tempestad.
   Hoy, por ser domingo y esperando el partido de Talleres que le abra el camino a una inédita conquista continental, tenemos suficiente tiempo como para pensarlo…

 

23 de octubre de 2022

S.L.B.: NADA JUSTIFICA, EN SEQUÍA, EL DERROCHE IRRACIONAL DEL AGUA – EL MÁRKETING DE LA TV PORTEÑA CAYÓ A UN BURDO Y PELIGROSO ABISMO DE IRRESPETUOSIDAD – EL INTERIOR, CONDENADO A SEGUIR COMO REHÉN PARA CAPRICHOS Y DEMANDAS GREMIALES – MEGACAUSA: AUNQUE NO SE RESPETEN, EXISTEN PROTOCOLOS EN LA JUSTICIA CORDOBESA – ¿“SINCERICIDIO” POLICIAL U OBEDIENCIA DEBIDA? - ¿POR QUÉ NO DECLINA LA LUCHA INTERNA EN LA CIMA DEL PODER?, ETC.

Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” nº 749 emitido el 23/10/22 en dúplex por AM580 y FM88.5 ambas dependientes de Radio Universidad Nacional de Córdoba.

 
Otro insulto a las prioridades urbanas
ANTE LA SEQUÍA, NADA JUSTIFICA EL DERROCHE
IRRACIONAL Y EVITABLE QUE SE HACE DEL AGUA
 
  En los últimos años a la altura de estos meses de cada calendario, nos angustia la sequía que afecta a  nuestros diques, el escaso caudal de los ríos, todo como consecuencia de los cambios climáticos observados y tan estudiados, que han alterado el ritmo de las precipitaciones como en tiempos anteriores, que con algunas excepciones los embalses eran de una casi permanente imagen de saciedad, lo que ayudaba en muchos aspectos de la economía provincial como el turismo, una de las principales actividades recreativas, generadoras de fuentes de trabajo y movilizadora de la economía en general.
   Y en los tiempos de notable baja del agua acumulada, se recomendaba hasta el cansancio la obligación de cuidarla, de no derrocharla, de utilizar solo lo necesario dejando de lado algunas enraizadas costumbres como regar el jardín todos los días, lavar el auto con idéntica frecuencia, no consumir más de lo necesario tanto en la cocina hogareña como en el baño y otras limitaciones que contribuían a suavizar en parte la escasez del agua que llegaba a domicilio desde los embalses cordobeses, previo tratamiento en las plantas especializadas.
   Ahora estamos viviendo momentos de escasez, lo que afecta en muchos aspectos de la vida cotidiana y en los últimos tiempos, se ha sumado una nueva preocupación con la reiteración de los frecuentes incendios forestales, casuales o provocados por la hijaputez de algunos piromaníacos muchos de los cuales han sido oportunamente identificados y puestos a disposición de la Justicia.
   Es por todo esto que desorienta al ciudadano, que se sacrifica limitando el uso del agua, advertir que quienes debieran ser ejemplo de mesura en el consumo, la derrochan como si todas las fuentes de donde nos sirven estuvieran pletóricas en abundancia, cuando la realidad gráfica nos muestra lo deplorable de un espectáculo triste como es el de la sequía, y en el caso puntual del embalse del dique San Roque, todo un símbolo, ver aparecer lo que queda del viejo paredón de contención, tan perfecto en su tiempo que hasta fue imposible abatirlo cuando se construyó su reemplazante a mayor nivel.
   La Municipalidad de Córdoba, cuyo intendente se desvive por hacer cosas en muchos casos sin tomar en cuenta las reales prioridades ciudadanas, es un empedernido derrochón de agua, porque es parte de su campaña hermosear las plazas, a las que en forma casi permanente les activan los mecanismos de difusión del vital líquido no sólo para alimentar las fuentes sino para lavar sus veredones para que esos jardines no pierdan su verdor y las flores encuentren la humedad que requiere su obligación proselitista de hacerlas lucir hermosas, como espectáculo visual y placentero.
   No es tampoco el asunto dejarlas morir, pero bastaría con que se limitara al mínimo ese derroche, para que la ciudad fuera destinataria de dos elementos básicos de la convivencia: tener la certeza que no será tan angustiante la sequía y que el ejemplo cundirá en cuanto al ahorro hogareño del agua.
   La mejor campaña tan apresuradamente iniciada, tendrá así un costo menor de todo lo que ahora está formando parte de la deuda que tendremos que pagar vía tributaria, y podremos decir con orgullo que pese a la sequía, las plazas y los parques lucen su mejor estampa.
   Pero claro, a eso hay que decidirlo y aplicarlo, sin pensar en las urnas…
 
Ataque a la investidura presidencial
EL MÁRKETING  DE  LA  T.V. ARGENTINA  CAYÓ  A  UN
PELIGROSO Y BURDO ABISMO DE IRRESPETUOSIDAD
 
   “Todo ser humano posee una dignidad que, aunque la persona exista siempre en un contexto social e histórico concreto, jamás podrá ser disminuida, herida o destruida sino que, por el contrario, deberá ser respetada y protegida si verdaderamente se quiere contribuir a la paz”.
   Aunque tales conceptos tengan la contundencia merecida no me pertenecen, sino que fueron pronunciados por el pontífice Juan Pablo II en una ocasión que no viene al caso mencionar, por lo certeros y aplicables al momento que vivimos los argentinos, en una especie de malsano festival de las descalificaciones y las formulaciones de cargos al voleo y sin que sus autores midan las consecuencias de sus afirmaciones.
   Un programa de la TV porteña inició un nuevo ciclo de un programa no original sino tomado de un modelo extranjero, donde la convivencia de poersonajes de la variada fauna humana muestran sus debilidades, gustos, placeres e intimidades que es a donde se asoma una audiencia numéricamente variable.
   El producto en sus primeras manifestaciones de años anteriores tuvo una aceptación que ahora parece decrecer, porque a veces la realidad que vivimos supera a cualquier ficción, por más que se la genere y se la maquille, razón por la cual pasa a ser un espectáculo pasatista aunque con dwerivaciones muchas veces provocadas por la necesidad de aumentar el número de televidentes que siguen su desarrollo.
   En ese marco un tal Alfa, personaje mediático así llamado por su fanatismo hacia la marca Alfa Romeo uno de cuyos modelos antiguo luce con orgullo, faltó el respeto a la investidura presidencial del Dr. Fernández, nuestro presidente surgido de una consulta popular a través del sufragio, o sea que nadie puede discutir la legitimidad de su llegada al máximo poder nacional.
   Y como al Dr. Fernández lo tenemos como conocido en general, abramos entonces un breve paréntesis para pintar la figura del tal “Alfa”, sesentón, quien entre otras actitudes un 24 de marzo posteó recordando que él era pequeño, residía en el barrio militar de Palermo y, vivió un momento "horroroso" asegurando que los "montoneros hijos de remil" habían estallado una bomba y reivindicó la tarea de los "militares heroicos".
   Se lanzó al aire la nueva edición de Gran hermano” y con la presentación de los 18 integrantes llegaron las repercusiones. Mientras el programa iba transcurriendo, la red Twitter estallaba con comentarios sobre cada personaje.
   Uno de los que más llamó la atención fue Walter Santiago, conocido como "Alfa", de 60 años quien se presentó como alguien que siempre fue "líder, muy calentón y muy rencoroso", aseguró tener "mucha memoria" y alardeó sobre sus grandes dotes culinarias y dio detalles de su ideología vistiendo una campera con letras grandes que decían "USA" y despertó la curiosidad de los espectadores que no tardaron en compartir información sobre él.
   En 2014, Alfa estuvo en Masterchef aunque su paso por el certamen fue breve: los chef lo retaron por pasar el dedo por la comida y desestimaron su plato cuando los jurados encontraron un pelo en el solomillo que había preparado. "Es del cerdo ese pelo. Yo no tengo pelo", se defendió en aquel momento el participante.   
   Asimismo una ciudadana compartió chats donde Alfa la acosaba y amenazaba.
   Ahora volvamos a lo nuestro: tengamos en cuenta que el Dr. Fernández expresó conceptos que un presidente no debiera divulgar, sobre todo porque están prohibidos por la Constitución y quien está a cargo del gobierno no debe hablar públicamente de casos judiciales en curso, no debe expresarse como para que se infiera de sus dichos que está al tanto de un expediente judicial determinado, ya que existe una división de poderes que veda al Poder Ejecutivo toda interferencia sobre el Poder Judicial, y viceversa.
   El Dr. Alberto Fernández es el presidente de la República con la obligación de respetar lo que marca la Constitución y que tanto o más que el Derecho Penal –temática de la que es docente– tiene la obligación de conocer y practicar el Derecho Constitucional y entre otros detalles no puede comentar que el alegato de un fiscal es “un disparate” de “una debilidad jurídica asombrosa”, por lo cual él ansía “que la Justicia encauce esta situación” refiriéndose al Dr. Diego Luciani quien en la causa Vialidad pidió una importante pena para la vicepresidenta Cristina Kirchner.
   Y peor aun es que un presidente no puede faltar a la verdad o tergiversar los hechos, y Fernández, y para agravar más la situación lo hizo:dijo que Nisman “se suicidó, hasta acá no se probó otra cosa”. Pero no es cierto: con base en un peritaje de Gendarmería Nacional, sumado a otras pruebas, el fallo del juez Julián Ercolini sostiene que Nisman fue asesinado, ratificándolo la Cámara Federal y en la década pasada, cuando estaba distanciado de Cristina Kirchner, Fernández sostuvo que Nisman no se había suicidado y todo esto daña la propia investidura presidencial.
   Este tipo, el apodado “Alfa” aseguró públicamente durante una charla con otra concursante en el primer día del programa, que Alberto Fernández lo había coimeado un montón de veces,
   Y desde allí el culebrón que sólo sirve para alimentar el tenue fuego de una audiencia que no acompañó como pensaban que sería, los dueños del producto. Intervino también la vocera presidencial y expresó entre otras cosas
“Hay discursos de odio penados por la ley, como los discursos homofóbicos. No podemos dejar pasar estas cosas. No es ingenuo lo que sucedió”, añadió Cerruti, mientras que la oposición cuestionó a Cerrutti por sus criticas contra Alfa preguntando: ¿El Presidente está preocupado por Gran Hermano?” 
  El escandalete mediático quedó armado y algunos productores televisivos porteños se restregan las manos pensando con el bolsillo.
   Recordemos el triste papel de ese vendedor de humo que es Marcelo Tinelli y no olvidemos la ridiculización que en un programa que conducía, en vivo, hizo de Fernando de la Rúa.
   A todo esto, los argentinos debemos tener la convicción del respeto porque es uno de los valores que muestran una más acentuada decadencia, y no permitir que nadie, piense como piense y esgrima como disculpa o como justificación el ejercicio de la libertad, tiene derecho ni debe violentar la investidura presidencial, esté quien esté en el sillón de Rivadavia o viviendo en la residencia de Olivos.
 
Subsidios: histórico privilegio portuario
EL  INTERIOR  CONDENADO A SEGUIR  SIENDO  LOS
REHENES DE CAPRICHOS Y DEMANDAS GREMIALES
 
   Puede considerarse como mas viejo que la espalda, o que el agujero del mate, o como la condición líquida del mercurio, aquella costumbre histórica del puerto en ser privilegiado, más allá de los cacareados federalismos y de otras mentirosas actitudes acerca de la existencia de igualdad entre todos los argentinos en cualquier aspecto.
   Pero aquel mentiroso federalismo, el de antes y el actual, encubre las actitudes más lamentablemente unitarias que vaya paradoja, nos desunen a los del interior con los capitalinos en todo aspecto y ni siquiera vale enumerarlos por ser tan conocidos, soportados y causantes de una acendrada y creciente indignación que de nada sirve para modificar esos enojosos parámetros.
   Más allá de otras implicancias de tal actitud sobradora y autoritaria que nos relega a los del interior a un segundo plano, o tercero, pero siempre distante de las ventajas portuarias, está el perjuicio que nos ocasiona en todas las actividades que desplegamos aquí, pero con raíces de alguna manera consolidadas en la gran capital, como por ejemplo la prepotencia sindical que nace allá, donde los dirigentes son más ricos que los empresarios y viven de la práctica del menor esfuerzo.
   Son aquellos representantes de la casta actual que en su momento fuera la columna vertebral del justicialismo, cuando la justicia social se aplicaba sin privilegios salvo por un tiempo hacia los niños, que solían ser “los únicos privilegiados”, distinción de la que ahora los alejaron los que han hecho del sindicalismo un medio más que de vida, de enriquecimiento con pocas y honrosas excepciones.
   Aquí pagamos todo más caro porque a los porteños se les antoja que así sea, para que a ellos la vida les resulte más barata y no es un ataque de chauvinismo, sino el reflejo de una dolorsa realidad.
   Muchas veces, la complicidad o la adhesión local a esos mandatos nos perjudica de tal manera, que aquí pagamos las consecuencias y ellos resultan triunfantes y airosos.
   Llegará el día en que se haga justicia y los porteños paguen por lo que realmente cuestan la electricidad, el agua, el gas, el transporte, los combustibles y todo lo que consumimos o contamos como servicios en el interior.
   Ese día, si llega, seguramente les servirá a ellos para que, tardíamente, pretendan que les ayudemos para que hagan tronar el escarmiento, aunque  muchas veces lo hicimos y de nada sirvió, salvo para ellos que consolidaron las privilegiadas posiciones alcanzadas.
   Y nosotros, olvidados desde allá, salvo cuando nos necesitan que sigamos siendo rehenes de sus caprichos y demandas…
 
Megacausa del Registro de la Propiedad
ES COMO SI PARA LA JUSTICIA CORDOBESA NO
EXISTIERAN PROTOCOLOS QUE SON LAS LEYES
 
   El término “protocolo”, hace referencia a un conjunto de normas o pautas ordenadas que deben seguirse para cumplir con una determinada acción. Es una palabra muy útil que guía el camino. En la salud, por ejemplo, los protocolos permiten tomar decisiones basadas en evidencia científica o  en “pruebas”, con la finalidad de evitar errores.
   Si la aplicamos a la causa del Registro de la Propiedad que se ventila desde más de una década atrás en la Justicia de Córdoba, podría decirse que  en los tribunales mediterráneos también existe un “protocolo” por el cual los fiscales tienen un plazo de cuatro meses para completar una  investigación a partir de la detención o declaración del imputado, que existe un mecanismo de sorteo para elegir jueces y que esos magistrados tienen también plazos razonables para resolver las causas.
   También es de “protocolo” que un juez no puede repetirse juzgando a la misma persona por lo mismo y que para decidir condena debe existir prueba objetiva. 
   Y finalmente, como guía para no errarle, un vigente conjunto de normas ordenadas llamadas Constitución de la Nación Argentina, constituye un extenso “protocolo” que explica con meridiana claridad cómo debe manejarse la libertad de los ciudadanos y cómo proceder ante las diferencias de poder.
   Aunque esto esté tan clarito, nadie explica aún por qué, en la causa mencionada, las investigaciones y juicios eternos, la comisión especialmente designada para juzgar, las condenas por íntima convicción, las prisiones preventivas sistemáticas y la impunidad de los poderosos, ignoraron todos los protocolos, pese a que en el Poder Judicial todos esos “protocolos” ¿cómo es que se llaman?
   Se llaman Leyes…
 
“Sincericidio” tardío, inútil y sospechoso
DOS AÑOS DESPUÉS DEL DRAMA DUELE SABER
QUE  SIGUE  VIGENTE “LA OBEDIENCIA  DEBIDA”
 
   En realidad cuando se plantea una situación confusa, extemporánea, inoportuna y obligadamente vinculada con la política, los políticos y su irrefrenable vocación por eternizarse en el poder, sin ninguna mácula que los enturbie ante la gente, es que aparecen tantas dudas como preguntas sin respuestas que el ciudadano ávido de verdades espera que sean coherentes, veraces, posibles y respetables.
   Al auscultar a muchos cordobeses de disímiles orientaciones ideológicas y partidarias, el resultado fue acumular interrogantes que cualquiera se plantea y ante ese desamparo de información, busca sin conseguirlo, a quienes puedan aportar creíbles interpretaciones que cuando en su momento son expuestas, en aquellas personas acosadas por esas dudas para ellos insalvables, quedan más desconcertadas que con las incertidumbres alimentadas por tantos prolongados silencios que suelen ser los causantes de la instauración de sospechas y conjeturas, padres putativos y ocasionales del recelo y de la aprensión.
   Por eso uno desde el llano y sin pretensiones comienza a ordenar mentalmente una serie de preguntas intentando armar un complicado rompecabezas, que se destaca porque nunca faltan los pícaros que esconden piezas, agregan otras que nada tienen que ver, o se roban las más imprescindibles.
   Vamos entonces por partes:
   ¿Por qué a todo lo que la Sra. Jefa de Policía al presentarse en Tribunales declaró, detalló, reveló y conmocionó lo tuvo tanto tiempo guardado?
   ¿Por qué no recordó, entre otros detalles, que era la responsable de Recursos Humanos cuando el autor del disparo letal andaba en la calle, armado y fuera de protocolo porque había cometido un delito y la obligación era tenerlo separado de la fuerza azul?      
   ¿Por qué se empecinó en un cerrado silencio cuando tenía la obligación cívica y humana de dar la cara, hablar con los familiares de la víctima, contenerlos y ayudarlos en todos los trámites emergentes de un hecho gravísimo que se pretendió desfigurar?
   ¿Ella sabía o sus hombres de la plana mayor que ya estaban al tanto, que un efectivo policial había “plantado” un arma trucha para desviar los primeros pasos de la investigación?
   Hay tantas otras cosas turbias para que nos preguntemos, pero lo mejor es dejar que la Justicia, si es en verdad independiente como tanto se proclama aunque muchos hechos lo transformen en dudas, cumpla con su cometido dejando de lado detalles que el común de la gente no asocia con el momento que vivimos, de lanzada, intensa y onerosa campaña precomicial con desusada anticipación.
   El Intendente que quiere ser gobernador acompaña falderamente -por así decirlo- al gobernador que aspira a ser Presidente aunque no lo reconozca, a la par que en sociedad siguen engrosando la fabulosa deuda que tiene el cordobesismo en su mayoría contraída en moneda extranjera, que con la devaluación diaria y constante de nuestra adelgazada moneda crece y crece sin encontrar un muro de contención, hasta que se transforme, si aún no lo es, en impagable y quienes glorifican por su gestión a los dos gobernantes fganáticos del autobombo que pagamos y pagaremos todos nosotros, no sabrían de qué disfrazarse.
   Pido disculpas por haberme desviado del tema central porque era necesario hacer algunas asociaciones ajenas al caso del crimen de Blas, como para que la situación quede clara con sus fundamentos y consecuencias o daños colaterales, que les dicen…
   Y una duda final, para que la realidad del tiempo o la conciencia actual de quienes manejan o manipulan esta situación y el proceso en marcha, preguntar si finalmente la Sra. Jefa de Policía es o no responsable o víctima y consecuencia de eso que le llaman “obediencia debida”, porque no es momento de enturbiar el panorama de políticos que antes de la muerte evitable de Blas, soñaban con la eternidad de sostenerse en y con el poder que consagrarían en las elecciones del año próximo.
   Y la Sra. vendría a oficiar de dique de contención en el ascenso de las cargas de culpas en la pirámide del poder, para que allí, en ella, se detenga la severidad de las responsabilidades funcionales y humanas.
   Al alejarse quien fuera Ministro de Seguridad -o mejor dicho de inseguridad, porque es lo que hay- la Sra. Jefa de Policía quedó huérfana de protección política con el riesgo cierto que las cargas salpicaran hacia arriba.
   En fin, roguemos que la intensiva marcha de la campaña no enturbie el panorama que ya de por sí, deja más sombras que claridades.     
   Ah!! Y una última pregunta antes de olvidarme, que a lo mejor sea una pavada pero tiene su importancia formal: ¿por qué la señora Jefa de Policía y en su condición de tal, asistió a testificar en Tribunales vestida de civil en lugar de lucir su uniforme?
   Ella no había sido convocada como vecina o ciudadana, sino como responsable de la fuerza azul que todavía no puso en claro por qué el asesino de Blas estaba en funciones, y con un arma en su poder y a su criminal disposición…  
   Tal como dolorosamente lo mostró una realidad que con prevención y sin autoritarismo ni abuso de armas como en tantas otras situaciones, se pudo haber evitado.
   Y en todas direcciones, pero más desde arriba hacia abajo, pero nadie lo pudo evitar por la sencilla razón que tampoco, desde la autoridad, nadie obró como para que se evitara.
 
Hay actitudes suicidas e incomprensibles
SI  LA  SALIDA ES  UN CESE  DE  HOSTILIDADES ¿POR
QUÉ
NO DECLINA LA LUCHA EN LA CIMA DEL PODER?
 
   Son más las situaciones en que no alcanzamos a comprender las actitudes de los políticos, que las ocasiones en que analizándolos, podemos llegar a formarnos una idea cabal de sus problemas, las intenciones por superarlos y la consecuencia positiva que sería gozar cada victoria sobre la adversidad, patrióticamente entre todos los argentinos.
   Acerca de estas consideraciones me viene a la mente una frase que a Mario Moreno, el recordado actor “Cantinflas” mexicano, le saliera desde el alma cuando con la seriedad de su inocente humor aseguró que “la Argentina está compuesta por millones de habitantes que quieren hundirla, pero no lo logran”, lo que coincide con nuestra certeza de habitar un país tan inmensamente rico que ni siquiera los peores políticos que nos han gobernado consiguieron fundirlo.
   ¿Por qué entonces y que alguien me lo explique sin discursos altisonantes ni sanatas de las acostumbradas por el abuso de la demagogia tan generalizada, los políticos mediocres y los que se autotitulan inteligentes, se empeñan en pelearse incluso dentro de su mismo rebaño?
   ¿Son tantas las apetencias que los animan a llegar a odiarse, ignorarse, distanciarse y no cruzar palabra aunque la responsabilidad de sus cargos los obliguen a un diálogo permanente?
   Si cabe algún calificativo para esa actitud disociante con el ejercicio de la auténtica democracia, es la miserabilidad que desnuda en personas que por mandato están obligadas a convivir, dialogar pese a las divergencias que puedan plantearse y resolver cuestiones que beneficien a la comunidad que gobiernan.  
   Quedó al margen la obligación de generar trabajo genuino y no que sea sólo el Estado quien abrigue a los desocupados que son política e ideológicamente fieles, y es una imposición de circunstancias dejar de lado la dádiva, el ejercicio de la vagancia profesionalizada y cualquier otra expresión de asistencialismo, porque es una derrota a la dignidad humana del trabajo y del esfuerzo.
   Recuerden a Martín Fierro y su sentencia: “Debe trabajar el hombre para ganarse el pan, pues la miseria en su afán de perseguir de mil modos, llama a las puertas de todos y entra en la del haragán”.
   Entonces que el Dr. Fernández, la arquitecta egipcia, su hijo mimado, el polifacético Massita se dejen de pelear como lo vienen haciendo por espacios de poder y se acuerden que más de 45 millones de argentinos esperan -esperamos- las soluciones que viven prometiendo.
  Y tampoco que olviden la contundencia de Carlyle: “La miseria de cualquier género no es la causa, sino el efecto de la inmoralidad”.

16 de octubre de 2022

S.L.B.: ELLA, LA QUE TODO NOS PERDONA Y DARÍA SU VIDA POR NOSOTROS – ARCHIVAR ACCIONES JUDICIALES POR CORRUPCIÓN, UNA BURLA A LA LEY – VERDOSO “FESTIVAL” DE TANTOS DÓLARES DISTINTOS – MEGACAUSA DEL REGISTRO Y LA LIBRE INTERPRETACIÓN – URGE PREPARARSE PARA LA INVASIÓN DE TURISTAS EN LA CERCANA TEMPORADA – DESORIENTACIÓN O FALLAS EN LA COMUNICACIÓN DENTRO DEL PODER NACIONAL – LA LEALTAD NO ES INVENTO DE NADIE NI ES HIMNO O BANDERA DE NINGÚN POLÍTICO, ETC.

Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” edición nº 748 del domingo 16/10/22 emitido en dúplex por AM580 y FM88.5 ambas dependientes de Radio Universidad Nacional de Córdoba.

El día de la Mamá
ELLA ES QUIEN TODO NOS PERDONA Y DARÍA  SU
VIDA SI  TUVIERA  QUE  HACERLO POR SUS HIJOS
 
   Debo reconocer, por coherencia en mi manera de pensar con la forma de actuar, que es medio como improcedente limitar a un día, el reconocimiento eterno y permanente que merecen las mamás.
   Pero así son las reglas del juego y del consumo, lo que no impide que en materia de homenajes, lo concentremos, si, en un día al año.
   Y quiero comenzarlo, memoria de por medio, recordando el final de unos hermosos versos de Isidoro Blastein.
   “Adiós Mamá.
   Hasta pronto.
   Trázame un sendero con tu voz
   y una estela luminosa con tu gesto;
   resérvame una gruta de ternura
   y guárdame un lugar en tu regazo.
   Yo llegaré hasta ti de cuando en cuando
   a conversar contigo sentado en las estrellas.”
   ¿Por qué será que teniendo tanto para decir de ella las palabras nunca alcanzan?
   ¿Por qué será que el cariño, la admiración, la ternura, el respeto, la lucha, el refugio o el amparo sirvan para sintetizarla?
   ¿Por qué una caricia, una lágrima, una mirada o un recuerdo basten para que tengamos la certeza casi absoluta y milagrosa de su presencia?
   Ella sabe, porque así lo siente, que el sacrificio y la entrega son parte vital de su atávica vocación protectora.
   Sabemos, y ella también lo sabe, que a la hora de estar junto a nosotros no existen los enojos, las barreras ni las distancias.
   Estuvimos muy dentro de su mundo, nutriéndonos de su generosidad y de sus ansias por tenernos; por vernos nacer.
   Es la que nos regala el mágico prodigio de la vida, nos quita los miedos, espanta las sombras si nos abruman, comprende lo incomprensible y ahuyenta nuestras penas.
   Nada interesa si es casada o soltera, viuda o divorciada.
   Sus méritos como esposa, concubina, arrimada o como le quieran llamar poco importan, porque esa mujer, por encima de cualquier vetusto rótulo convencional, es Mamá.
   Y si abrumados por la angustia, buscamos un motivo que nos devuelva la alegría de vivir, más que a nosotros, en nosotros la encontramos a ella, así la tengamos o no.  
   Ese es el insondable sortilegio de su amor, porque con ella tal sentimiento está más allá de lo terrenal; de lo explicable.
   Podemos conocerla o no, pero estoy convencido que aquellos que no la conocen, lo mismo respiran por ella y miran por sus ojos.
   Siempre está y estará allí peleando por nosotros, cuidándonos, guiándonos, llevándonos de su mano.
   Siempre cerca.
   En la dicha y en la desgracia; en la risa y en el llanto.
   Presente.
   Siempre nuestra y nosotros de ella, aunque no la veamos volver.
   Siempre… siempre.
 
¿Es así que se diluyen las sospechas?
ARCHIVAR DENUNCIAS DE CORRUPCIÓN ES DARLE
UNA  MANO  A  LA  VIGENCIA  DE  LA  DESMEMORIA
 
   Es como caer en desgracia dentro de otra desgracia mayor que muchos se empeñan en esconder o al menos tratan de disimularla, aduciendo indiferencia y hablo concretamente de la crisis en tantos sentidos que venimos padeciendo, sin avizorar su solución a mediano plazo o plazo razonable que nos permita alentar esperanzas de recuperación de todo el deterioro social, político y económico que nos aqueja
   Es más o menos como estar bailando en la bamboleante cubierta del Titanic con la orquesta ejecutando la misma música de un par de años o algo más hacia atrás, aunque no con la convicción del desastre inminente porque algunos mecanismos seguramente se pondrán en funcionamiento para que al menos tengamos botes salvavidas para cobijarnos con algo de suerte en el encrespado mar universal.
   Y como bien lo sabemos y es de esperar que la mayoría coincida, una de las principales preocupaciones de los argentinos es esa especie de virus maldito que nos viene carcomiendo, que le llaman corrupción, manifestada en estamentos de trascendencia y alimentada por funcionarios autotitulados probos, pero que vienen demostrando una enorme vocación por la improvisación y una fatídica inclinación hacia los remiendos, los parches y la renovación de viejas, ajadas y percudidas demagogias.
   Es para pensar que la mayoría de los argentinos estamos en una posición más que de ansiedad, de un desencanto que se renueva luego de cada fracaso, de cada medida antipopular que se toma; de cada embate externo a nuestra condición de deudores casi universales.
   Y cuando llegamos a pensar poquitos años atrás que la matriz corrupta al menos tendría su merecido legal en Córdoba con la imposición de un fuero precisamente anti corrupción, nos hicimos la ilusión de encaminarnos hacia la plena honestidad funcional, pero con el paso de los meses y otros poquitos años, llegamos a la penosa conclusión de un reiterado fracaso en un cometido tan encomiable como lo es recuperar para la imagen de los gobernantes, la aureola de honestidad y decencia tan llevadas a los terrenos de las dudas.
   Las denuncias, si es que hubo tantas como lo merecía la realidad de entonces, tuvieron en estos días recientes el medianamente previsible destino de canasto de los desperdicios, o sea el pasaporte al más vergonzoso de los olvidos que es como estafar la trascendencia de la memoria y por ende hacerle “pito catalán” o un corte de manga a la historia.
   Más allá de los hechos que prolijamente fueron escondidos, como la compra de insumos médicos con un 300 por ciento de sobreprecio, seguramente andarán flotando en la memoria de la gente todo lo que denunciara Luis Juez sin que le dieran bola, razón por la cual presentó su renuncia como fiscal anticorrupción y el camino quedó allanado al consagrarse ciertas impunidades.
   Debe ser por eso que tenemos una policía severamente cuestionada, policías camineros y patoteros, obras a costos muy superiores a los reales, economía inmanejable, abusos de las empresas de servicios y otras lindezas sociales que mejor es dejarlas de lado.
   Poner trabas a la reinstauración de la decencia, así sea responsabilidad de la Justicia por iniciativa propia o por obediencia debida dentro de su declamada “independencia”, de los políticos o de Mongo, es una muestra cabal de una decadencia moral que los argentinos de bien no merecemos.
 
No sería precisamente un honor…
EL  VERDOSO  “FESTIVAL  DE  DÓLARES” YA MERECE
FIGURAR EN GUINNES BOOK,LIBRO DE LOS RÉCORDS
 
   Comentando nuestra realidad con algunos colegas extranjeros, en el curso de la semana me hartaron con preguntas acerca de la cantidad de tipos de dólar que manejamos los argentinos, obviamente no todos nosotros, como espejo de los manejos que a su manera y riesgo, ejecutan los responsables de nuestra situación económica tanto interna como con los organismos a quienes les debemos, porque seguramente nosotros no esperamos que nadie se ponga al día por adeudarnos algo.
   Realmente no podían creer por la variedad de asignarle nombre a la moneda norteamericana, que no se ha visto, me aseguraban, en ningún país del planeta, lo que nos hacía acreedores a figurar, otra vez, en el libro Guinnes de récords.
   Y hablando de ese libraco, se me ocurrió pispear un ejemplar del año 1997 y de entre el cúmulo de datos interesantes, me entere que por entonces la mayor inflación de todos los tiempos se había dado en Hungría allá por el año 1946 en que perdió todo valor su moneda, obligando a los húngaros a emitir cédulas de mil trillones el 3 de julio de ese año, que fueron retiradas de circulación el 11 de julio siguiente.
   Consigna asimismo la misma publicación que el episodio hiperinflacionario más conocido ocurrió en Alemania en 1923 cuando el monto de marcos en circulación emitido por el Banco Nacional germano alcanzó una cifra que no me animo a leer, pero comienza con el número 400 y le siguen nada menos que otros 15, ¡Si! quince dígitos más! pero el julepe les significó convivir con una inflación de 755,7 mil millones de veces comparando con los niveles del año 1913.
   Más recientemente el índice inflacionario más alto fue de 243,96 por ciento en Bielorrusia, año 1995.
   En cuanto a nosotros la más alta inflación anual de nuestra historia macroeconómica  llegó al 4.923,5 por ciento en 12 meses del 1989 y la más elevada inflación mensual, del 196,6 por ciento en julio de ese año, cuando el justicialista Carlos Saul I de Anillaco asumía la presidencia del país.
   O sea que la actualidad es virtualmente una joda, si es que hacemos comparaciones livianas, o sea que si son medianamente inteligentes desde el poder, en poco tiempo debiéramos estar viviendo la resurrección del país y el paso de todos nosotros a las grandes ligas.
   Entonces, importará un corno que tengamos 15, 25, 40 o más tipos de dólar porque estaremos en condiciones ideales de competir con las grandes potencias, recreando aquello de “Argentina potencia” de algunos años atrás.
   Mientras tanto, sigamos apegados a pensar en verde, a soñar en blue y a pasar hambre y no salir de vacaciones afuera del país, a menos que seamos dispendiosos funcionarios, porque estaríamos perjudicando a nuestras propias arcas que necesitan fortalecerse para hacer frente al brutal endeudamiento al que nos han sometido los inútiles que prometieron soluciones, y fueron demasiado hábiles para seguir encajándonos problemas.
   Es duro decirlo, pero más duro es padecerlo, con escasas posibilidades de recuperación.
   ¿Recuerdan de cuando éramos uno de los cinco países más ricos del mundo?
   Personalmente lo tengo presente y si usted tiene alrededor de 75 pirulos también podrá recordarlo…
  
Megacausa del Registro de la Propiedad
ESA  INCONTROLABLE “VARITA  MÁGICA”
QUE LE LLAMAN LIBRE INTERPRETACIÓN
 
   Ya dijimos días atrás y diccionario de por medio que la palabra ‘interpretar’ permite explicar o declarar el sentido de algo, traducir, concebir, ordenar, expresar, representar, ejecutar y también determinar el significado y alcance de las normas jurídicas. Por tanto, es una palabra poderosa que otorga al intérprete, (jueces y magistrados), una interesante y enorme potestad. 
   Si repasamos ejemplos de su aplicación en la causa del Registro de la Propiedad de Córdoba tenemos el caso de dos imputados en el que el Juez de Control, escribió que se carecía de prueba sobre su participación en los hechos y que no había testigos que los acusaran, pero igual, según su interpretación, confirmó la prisión preventiva dictada por el Fiscal.
   Casi tres años después estos imputados fueron absueltos, cuando un Tribunal, en el juicio, interpretó esta misma situación a la luz de la ley.
  Tiempo después fue noticia un escandalete judicial en el que el mismo Juez, arriba citado, fue acusado por el Fiscal, también arriba citado, de haber recibido dinero para liberar a un preso y desde un medio periodístico se informó que el Juez habría respondido, a modo de reclamo, en cuántas causas del Registro le había dado la razón. (Lo que se interpreta, sobre todo con el ejemplo anterior, como haberle dado la razón sin que la tuviera).
   A diferencia de los imputados, para el juez no hubo encierro ni prisión “por las dudas” y después de un año de concentrado silencio el magistrado a cargo del caso, interpretó que debía archivar la causa por falta de pruebas sin explicaciones ni cuestionamientos, cuando de no ser cierta tan grave denuncia, se debió sancionar, al menos, al fiscal por falsedad. 
   Podría decirse que en Córdoba existe una discrecional administración de justicia, usando la varita mágica y poderosa de la interpretación, que nadie parece controlar.  
 
Hora de reforzar la calidad receptiva
¿ESTAMOS  PREPARADOS  EN  CÓRDOBA PARA RECIBIR
EL TAN ANUNCIADO NÚMERO DE TURISTAS EN VERANO?
 
   En cada año, a esta altura, ya nos veníamos preocupando por advertir lo que se realizaba, se prometía o se diseñaba para encarar el comienzo de la temporada turística de verano, con la previsible invasión -grata invasión- de visitantes nacionales y en los últimos tiempos por el notable aumento de nuestra receptividad a extranjeros ávidos de nuevos paisajes, otras culturas, distintos modos de vida, exóticos manjares y todos los otros atractivos que los argentinos estamos acostumbrados a brindar generosamente a los visitantes.
   Por supuesto que esos son los “ganchos” para atraerlos, que dentro de todo suelen estar bien mantenidos en el receso y puestos al día con todas sus bellezas, para ser dignos de admiración, pero lo que suele fallar en nosotros, es el tema de la atención, de los servicios, de todo lo que está aparte del paisaje, el clima benigno, la hospitalidad proverbial y otros elementos y detalles.
   Es el poder de donde debieran partir directivas en cuanto al respeto por los precios, legislar para los casos de abusos pero con sanciones serias, contundentes y ejemplarizadoras por eso del miedo contagioso a caer en falta y recibir multas, clausuras o penas más severas, como se aplican para casos similares en otras geografías, donde la protección al visitante es una especie de religión que les asegura mantener y acrecentar el flujo receptivo con el correr de las temporadas.
   Más que cuidarlo, al turista hay que mimarlo, consentirlo, hacerlo sentir mejor que en su casa, para lo que es necesario desterrar esa insana costumbre que muchos practican, de esquilmar al visitante y no les preocupa si no vuelven al año siguiente, porque sostienen que  habrá otros incautos que los reemplacen.
   Las políticas turísticas no deben limitarse a embellecer los paisajes, a cuidar las rutas, a tener información actualizada para ofrecer, a controlar que no se cometan excesos y a tratar de tal manera a los turistas que los transformen en multiplicadores de una calidad receptiva que actualmente está deteriorada, precisamente por culpa de los inescrupulosos que abundan.
   Un control más severo acerca de toda la actividad turística nos podrá asegurar el éxito de cada temporada, más allá de los caprichos del clima, de las eventuales bajas en los niveles de los lagos o para el caso de los desastrosos como evitables incendios en las zonas turísticas.
   Cuando el turismo y la calidad de anfitriones que ya tenemos pase a ser una de las principales políticas de estado, será porque alcanzamos la madurez en tal sentido y más que nada, como muestra del amor que en este caso los cordobeses sentimos por lo nuestro, de lo que tan orgullosos estamos.
   No sería justo seguir dilapidando el esfuerzo que hicieron todos los pioneros de la actividad turística especialmente receptiva, porque son ellos los verdaderos dueños del éxito y especialmente, del regreso a nuestra tierra de cada uno de los visitantes que se sintió más que mimado y atendido, respetuosamente tratado.
 
La cohesión ha quedado atrás
EL PODER NACIONAL EVIDENCIA UNA LAMENTABLE
DESORIENTACIÓN O FALLAS EN LA COMUNICACIÓN
 
   Les consignaba un par de comentarios atrás la curiosidad de muchos colegas que residen en el exterior y allí trabajan, con relación a los altibajos de nuestra castigada economía y fueron ellos los que coincidían generalmente en sorprenderse, por el elevado nivel de enemistad más allá de lo político e ideológico, de los personajes de todas las corrientes.
   Sin embargo, lo que menos entienden aunque en sus países hayan vivido o vivan situaciones similares, es la virulencia que ellos califican como tal a las relaciones entre militantes de la misma corriente, separados finamente por algunos odios irreconciliables que en definitiva provocan más daños hacia adentro en lugar de mostrarse unidos en la lucha contra el adversario.
   Y esa actitud, me intentaban explicar aunque ya lo sabemos, que el daño suele ser irreversible y facilita el camino hacia una atomización de corrientes de pensamiento, que a su vez y malignamente debilita el sentido y el valor de los sistemas democráticos, porque lesionan el espíritu y las creencias del ciudadano apegado al sistema de libertad para elegir.
   La instauración de diferencias temáticas o ideológicas son dos elementos que perfectamente están incorporados a la actividad política, pero lo que aquí entre nosotros vemos que languidece, es el respeto por las posturas ajenas, sentimiento vulnerado por disímiles razones como la angurria por el poder, la vocación por eternizarse, o el haber sido tocados por la varita no tan mágica de un enriquecimiento imposible de justificar.
   Vemos de qué manera a veces virtualmente “se carnean” individuos que después aparecen tomados de las manos y en actitud victoriosa para los afiches de las campañas, sin tomar en cuenta que revelan así un elevado grado de hipocresía que la gente ya se cansó de rechazar por lo perversa, dañina y negativa.
   No se pretende de ninguna manera que existan sólo mieles, abrazos, fraternidad, simpatía y respeto entre postulantes a una misma posición dominante, pero bueno sería que los contendientes se apegaran a métodos civilizados que no encrespen ánimos ni llamen a ciertas acciones repudiables, para colmo dentro de las mismas corrientes, con lo que desnudan que de ninguna manera son ejemplos de corrección.
   Llamar al orden a los políticos es luchar contra un huracán, porque todos o la inmensa mayoría están seguros de obrar correctamente, de enfrentarse casi a muerte y terminar a los besos, o de prometerse daños que luego mágicamente se transforman en halagos.
   En pocas palabras y sintetizando, es hora que nuestros políticos tengan la grandeza de enfrentarse con argumentos superadores y no con descalificaciones baratas que los devalúan ya no tanto como políticos sino como ciudadanos.
   Precisamente somos los ciudadanos, los que los votamos por el éxito o por el fracaso, quienes nos merecemos advertir en ellos un ejemplo de patriotismo, de tolerancia, de vocación por el diálogo con respetuosos disensos, en lugar de verlos revolcarse a veces dentro de un festival de ofensas y formulaciones de cargos que a nada bueno conducen.
   No me refiero a las relaciones entre adversarios, sino a lo que considero de mayor gravedad, a las diferencias entre partidarios de las mismas ideas.
   No entiendo, finalmente, las anunciadas ausencias de altos funcionarios a las concentraciones donde se rendirá renovado culto a la lealtad, como si no hubieran existido el 17 de octubre del ‘45 ni sus consecuencias…
 
Qué es; qué significa la lealtad
NO ES UN INVENTO DE NADIE, NI TAMPOCO EL
HIMNO O LA BANDERA  DE  NINGÚN  POLÍTICO
   
 
   Las imágenes de aquel octubre del 45 nos traen otra vez a la memoria el fervor de la gente por su líder, los pies inflamados por la caminata metidos allí en el agua de las fuentes de la Plaza de Mayo y el grito que nacía desde el fondo de cada pecho.
   Es allí que con la memoria nos invade una nostálgica admiración.
   Digo admiración por la convicción; por la lucha inicial contra una oligarquía terrateniente, soberbia, negrera y de nariz parada, casta que con frecuencia viajaba a Europa llevando su propia vaca en el barco para asegurarse la provisión de leche.
   Aquellos agobiados trabajadores de rostros y cuerpos cansados por la explotación, bolsillos exhaustos, esperanzas en vías de extinción y derechos impunemente vulnerados fueron los que marcaron el rumbo hacia la redención, cercana al milagro.
   Ellos, y nadie más, merecen quedar en la historia como legítimos forjadores de la lealtad: lealtad a sus principios, lealtad a su lucha, lealtad a su propio sacrificio; lealtad al valor inconmensurable de su compromiso con un ideal.
   Los argentinos a veces cometemos la imprudencia de alterar y devaluar básicos conceptos, y algunos delirantes todavía quieren hacernos creer que ciertos personajes, estén o no con nosotros, son más importantes que las instituciones o que la Patria misma.
   Ese deporte nacional de endiosar casi al voleo ha llevado a la desilusión de muchos, habituados a fabricar patéticos dioses de cartón, charlatanes iluminados con alma mentirosa y demagógica.
   La lealtad debe inclinarse hacia la honorabilidad de principios, hacia la ética, hacia la honestidad, hacia la sana y productiva cultura de la productividad y la creación; del esfuerzo y de una actitud constructiva hacia la sociedad.
   Cuando lo que se impone es la generación de trabajo, no es positivo ni beneficia al país ser leales al bolsón, a la beca indigna, al subsidio politizado ni a ninguna expresión de dádiva.
   Lealtad es el inclaudicable y honrado cumplimiento de las leyes, la fidelidad a la verdad y el ejercicio del honor y de la hombría de bien.
   Lo contrario es politiquería no siempre barata.
   Porque la historia, nuestra historia de siempre, nos viene enseñando y a veces con secuelas de dolor, que los espejismos nos han salido demasiado caros.
   La lealtad a principios básicos de convivencia, es la mejor garantía que tenemos para recuperar todos los valores que se han ido perdiendo por los caminos de nuestra propia historia.
   La lealtad no es un invento de nadie, ni es el himno o la bandera de ningún político.
   La lealtad es simplemente una manera de obrar y de vivir.