27 de septiembre de 2020

S.L.B.: LA PANDEMIA OBLIGÓ A UN NUEVO RETROCESO - EL PATÉTICO ESCÁNDALO EN EL CONGRESO - LOS INCENDIOS OBEDECEN A FALTA DE PREVENCIÓN - MEGACAUSA Y VICTIMAS DEL SISTEMA JUDICIAL - FINANZAS CORDOBESAS Y SU COLAPSO - "SARASAS", KICILOFF, FIDEL PINTOS Y "CANTINFLAS" - CUANDO EL ESPIONAJE TIENE TÉTRICOS ASPECTOS, ETC.

Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” edición n° 640 del 27/9/20 que emitieron en dúplex la AM580 y la FM88.5 ambas de Radio Universidad Nacional de Córdoba.
 
Pandemia: nuevo retroceso
BUENO SERÍA  COMENZAR A DESTERRAR ESA
INICIAL ACTITUD DE EXCESIVO TRIUNFALISMO

   Desde unos siete meses atrás, cuando aquel fallido surgido seguramente por el apresuramiento de posicionarse como científico, por parte del ministro Ginés Gonzalez García acerca de las remotas posibilidades de la llegada del virus a nuestro país por la lejanía con China, se vienen sucediendo curiosos episodios que en lugar de ilustrar a la gente están sirviendo para mostrar la desorientación oficial de quienes se autotitulan idóneos para el  manejo de una situación tan
crítica como inédita, que nos llevaron a una serie de vacilaciones, equivocaciones, idas y venidas en un marco de penosa ciclotimia.
   No es casualidad que la nuestra sea la cuarentena más prolongada y variable del mundo en los últimos tiempos, frente a una sociedad alterada por las prohibiciones, los encierros, las limitaciones de su libertad y los variados condicionamientos de conductas, factores todos que han conseguido que se operen cambios fundamentales en nuestro propio estilo de vida, concepción de los derechos e incluyendo la alteración de humanas costumbres que creíamos consolidadas.
   Por momentos nos liberan de ajustados bretes y cuando empezamos a gozar del beneficio, de pronto desde el poder advierten el error cometido y nos vuelven al corral de las privaciones lo que acarrea visibles cambios en las relaciones familiares, laborales y en todos los otros aspectos de la vida en comunidad.
   Las autoridades diariamente divulgan estadísticas acerca de contagios,
ocupación de camas críticas, muertes, recuperaciones y otros detalles, lo que lleva a obligadas comparaciones con otras ciudades y con distintos países y vemos que nuestra situación se torna cada día más compleja a la vez que se consolida la sospecha de la utilización políticamente interesada de una situación socialmente apabullante, por las carencias que crecen, otras que aparecen y las pocas soluciones que se avizoran.
   Y cuando esas sospechas venían tomando cuerpo, ocurre eso tan inexplicable de la aparición, por así decirlo, de unos 3.500 casos fatales que no habían sido contabilizados, lo que fortalece la creencia sostenida que nos lleva a pensar que desde el comienzo nos vienen mintiendo.
   Se llega a esa revelación porque personalmente considero que si es difícil esconder un muerto, el hecho de hacerlo con miles de ellos es virtualmente
imposible, como se ha comprobado en estas últimas horas a lo que se suman los pasos atrás que nos vienen imponiendo con lo que se multiplican las angustias, mientras es ya imposible maquillar las divergencias entre las autoridades acerca del manejo de una situación que, en verdad, se les ha escapado de las manos.
   Y volvemos al inicial estado de incertidumbre, de vano palabrerío; de improvisaciones y remiendos mientras notamos que ominosamente se van cerrando los círculos del aislamiento y vemos más de cerca los casos fatales.
   Peligrosamente y en forma paralela surgen las violaciones a la prevención, eso de desoir recomendaciones de cuidarnos, eso de violar las reglas y retomar en muchos casos el ritmo de joda que es lo que nos va a matar: lo sabemos pero no todos lo entienden.
   Que quienes así piensen que se suiciden así, de tal manera, pero que no contagien a quienes aman la vida y respetan todo lo que se haga por preservarla por parte del poder o de quien fuera, pero para eso y quiero remarcarlo, es necesario que no nos mientan; que no nos oculten la realidad; que la muestren por más descarnada que sea, porque el hecho de saberlo nos

va a impulsar a querernos un poco más: a respetarnos porque en este barco navegamos todos, pensemos como pensemos, seamos ricos o pobres, laburantes o desocupados, buenos o malos…
   Es hora de exigir que nos respeten; que no nos engañen porque esas mentiras que llevan a la desprotección, al descuido, a la falsa opción de sentirnos inmunes, son los factores que van a terminar con nosotros, con la Humanidad y esto no es una exageración ni es pensamiento apocalíptico, sino que venimos advirtiendo que eso, que sonaba a fantasía o delirio, puede llegar a suceder.
   Está en nosotros y en quienes tienen la obligación de protegernos y de no engañarnos, la sagrada y humana obligación de ayudarnos en esta lucha brutal por sobrevivir.
   El exceso de triunfalismo no salva vidas, como tampoco las preserva la demagogia.
 
Escándalo en el Congreso
DEBIÉRAMOS SER MÁS CUIDADOSOS SOBRE LA
IMAGEN  QUE  QUEREMOS MOSTRAR AL MUNDO

   Irrespetuosidades existieron en la viralización del grave episodio que lesiona el respeto que se le debe, pese a todo, al poder legislativo, como por ejemplo algunas alusiones a un símbolo de los sanjuaninos como lo es la Difunta Correa, ofensas indirectas a empresas como decir que con el dinero acumulado por sus negocios y dietas, el salteño pasaría a ser sostén, si, sostén, de la firma Caro Cuore, la recomendación de hacer medir en una estación de servicio el calibrado de las gomas que es gratis y otros variados e ingeniosos conceptos parecidos.
   Es probable que el legislador salteño, fanatizado por su militancia K, alguna
vez acuda al pretexto de comentar que por las miserias que pasó durante el mandato macrista, se vio obligado a inclinarse, lo entendamos en el buen sentido, a volver a su tierna infancia y optar por la lactancia.  
   Comentan algunos allegados a este devaluado émulo del “Negro” Olmedo que al enterarse que su jefe de bancada y padrino político Máximo K le quitaba su apoyo, más aún y cuando en el tumulto al hijo de, le habían perdonado una deuda impositiva, optó por renunciar pasada la medianoche del último jueves, aunque en tal sentido trascendieron detalles más que jugosos.
   Y por la calidad intelectual del episodio, me voy a permitir comentar como chisme de peluquería que el fogoso ahora ex legislador pretendía atornillarse en su banca, hasta que pasada esa medianoche su jefe de bloque y padrino político a dúo con el capo de la Cámara, Sergio Massa, le exigieron airadamente la renuncia que debía presentar en el acto.
   Es probable que con la declinación del cargo se pensara que allí terminaría
todo, al menos ese episodio y que con el paso del tiempo el salteño calentón podría animarse a una nueva incursión en la tan bien paga esfera legislativa aunque lo correcto sería, bahh, es una simple idea que uno les tira desde aquí, suspenderlo en su cargo hasta que la comisión especial que se forme juzgue su actitud y lo sancione ejemplificadoramente para aventar esas sospechas de apelar al borrón y la cuenta nueva como tantas veces se hizo.
   Sobre todo porque no hubiera aguantado el devenir de los acontecimientos: no faltó quien lo anoticiara que había sido citada de urgencia la Comisión de Asuntos Eróticos de la no tan honorable -culpa de unos pocos- Cámara de Diputados de la Nación.
   Y lo peor, el voluntarioso vocero le adelantó, como si hubiera hecho falta
hacerlo, que el debate tendría elevado grado de calentura.
   Pero pasando ahora al plano formal y serio que amerita la situación planteada, será el tiempo el encargado de asignarle la debida implicancia internacional del culebrón legislativo porque al trascender mediáticamente al mundo, fue por muchos considerada como una señal, una especie de ADN de los argentinos que tendrá su influencia en las relaciones multilaterales a futuro.
   No fue poco lo que costó reinsertarnos en el mundo, para que por una situación más pecaminosa que política o ideológica, perdamos terreno en un ámbito donde la credibilidad y la seriedad deben ser elementos fundamentales a exhibir a la hora de pretender radicación de capitales extranjeros con nuestra deteriorada seguridad jurídica.
   Y para el consumo interno, la situación planteada puede que haya servido
para convencer a los negadores de la realidad, que las sesiones presenciales son irreemplazables entre otras ventajas para impedir hechos bochornosos como los varios que ya sucedieron, eso de cambiarse de ropa, estar en el baño, hacerse una siestita o distraerse, pero más que nada para justificar las elevadas sumas de dinero que los contribuyentes aportamos para el sostenimiento del poder legislativo.
   Y para colmo, todavía -en lo personal, claro- no tengo noticias que por el hecho de no asistir se hayan decidido a un ajuste de sueldos, como se lo hicieran a la enorme mayoría de los dependientes del Estado.
   Para terminar, tengamos una cristiana indulgencia con el ex diputado salteño: a lo mejor no soportó seis meses de íntimo aislamiento, sin saber que se sumaba a las huestes de la “sarasa”, que es parte de la personalidad discursiva de muchos de sus colegas, aunque los haya superado: ejerció su condición de legislador en su propio y siliconado seno…
   Y ya tiene asegurado un sitio de privilegio en la galería ¿de cuál se trata? Lógicamente en la de los bustos.
 (Seguidamente hay un audio de una legisladora pretendiendo defender al salteño atacando una actitud de Lilita Carrió. Ese tramo puede ser ubicado en el sector de audios, columna de la derecha).
 
Eran tan previsibles…
AL IGUAL QUE LA INSEGURIDAD, LOS INCENDIOS SON
UNA CONSECUENCIA  DE  LA  FALTA DE PREVENCIÓN

   Si hace más de una década que en la misma época del año sucede lo mismo, si los incendios se dan también casi siempre en los mismos lugares, estamos pecando de ignorantes si a esto no le asignamos su ineludible condición de previsibles y en consecuencia, de altamente sujetos a una prevención inteligente y efectiva.
   Dejemos al margen por ahora esas maledicencias que les vienen otorgando a
los incendios en nuestro territorio provincial ciertas intencionalidades inclinadas hacia un ambicioso proyecto inmobiliario y hotelero, o las sospechas de una masiva limpieza de montes para aplicar allí una nueva tendencia de cultivos: lo trascendente del caso es que nunca como en este año se malogró una superficie tan extensa que hasta ahora según someros cálculos, el fuego ha devorado más de 10.000 hectáreas, la mayoría de valioso monte nativo más el daño a la flora y la fauna lugareñas.
   Pasarán muchos años hasta que la Naturaleza renueve todos los recursos
naturales afectados y daños ocasionados por el fuego porque hasta el clima puede variar como consecuencia colateral provocada con tamaña deforestación.
   ¿Dónde estuvo la falla? ¿Cuáles han sido las carencias? ¿Qué es lo que se debió hacer y no se hizo?
   Son tantos los interrogantes como es enorme la indignación sumada a la impotencia de estar frente a una situación que se pudo evitar o al menos disminuir su nivel de agresión al ser humano y a su medio ambiente.
   Es cuando surgen las otras preguntas, las que incomodan pero son las que aportan intenciones para solucionar un drama que no debe volver a repetirse al menos en su tremenda magnitud.
   Durante demasiado tiempo hemos estado aportando, como impuesto indirecto
y dentro de la factura por el consumo de energía eléctrica, una suma mensual, según se anunciaba, como contribución para “el manejo del fuego” cuando en realidad debió hacerse para su prevención.
   Los abnegados y sacrificados bomberos son en su gran mayoría voluntarios que a veces deben vender rifas o hacer ferias de platos, a la vieja costumbre, para sostenerse ellos y sus cuarteles y eso no es justo, porque la burocracia provincial tiene un desarrollo enorme que si fuera correctamente regulado, alcanzaría para incluir en sus planteles a ese material humano tan imprescindible como asimismo merecedor de la mayor consideración.
   Ni siquiera dejaron en funciones a los antiguos vigías, imprescindibles para las
alertas tempranas e inmediatas.    No basta con reconocerles a los bomberos el compromiso, su valentía frente al riesgo, su sacrificio al enfrentar el peligro, sino que se hace necesario plasmar el agradecimiento de la comunidad con beneficios que los contengan y los estimulen.
   Otro aspecto es el uso de los aviones con una pregunta inicial: ¿para comprar cuántos aviones alcanzaron los recursos recaudados con esa partida a la que todos contribuíamos?
   Bueno sería -no por desconfiar sino para saber qué se hizo con tanto dinero- que algún legislador exigiera formalmente una rendición de cuentas, porque al ver ciertos gastos en autobombo que se realizan desde el poder, es para demandar que se tenga al menos un mínimo respeto por las prioridades que nos acosan.
   Y eso de tener con qué pelearle a las llamas y ganarles la dura batalla, es una de ellas.
 
Ya cerca de los 15 años…
LA MEGACAUSA  DEL  REGISTRO NO  SE TOMA
RESPIRO NI SIQUIERA FRENTE A LA PANDEMIA

   Hace un tiempo se presentó en Tribunales una asociación civil denominada “Víctimas del Sistema Judicial” como organismo que “busca defender a los ciudadanos cuyos derechos hayan sido vulnerados por la acción y/u omisión de los magistrados o funcionarios del Poder Judicial”.
   Hablando de “acción” se me ocurren los reiterados reclamos de familiares de la causa del Registro de la Propiedad de Córdoba por el abuso de la prisión preventiva, que en forma sistemática encarceló a cientos de trabajadores sin juicio alguno, utilizando tal encierro como condena anticipada y elemento de extorsión para forzar declaraciones de culpabilidad. Tengo presentes a tres de ellos que fueron absueltos después de casi tres años de inútil prisión, con
imposible reparación, agregando que desde la detención el juez -y preste usted atención a este concepto- había reconocido 
no tener pruebas contra ellos.
   Y si pensamos en “omisión” merece mencionarse la falta absoluta de sospecha, citación, indagación, imputación, ni nada que se le parezca contra los altos funcionarios que fueron denunciados en la causa. Aún más, el mismísimo Juez fue denunciado por el Fiscal de haber recibido coimas.
   Pero en este caso, y pese a la gravedad, no hubo prisión ni encierro por las dudas. La noticia pasó pronto a los predios del olvido, otro juez determinó que no había mérito y archivó el hecho sin mayores explicaciones, cuando de no ser cierto debió merecer una imputación al fiscal por falsedad.    
   Para no gastar palabras, omisión y acción para privilegio de algunos. La verdad es que tales acciones/omisiones convenientemente ejercidas transgreden las leyes,  vulneran la confianza en el sistema y nos colocan, prueba son los dictámenes, como ejemplo de injusticia internacional. 
 
Complicado panorama
NO ES DE AHORA  SINO POR ARRASTRE EL
COLAPSO DE LAS FINANZAS CORDOBESAS

   Aunque peque de exagerado, debo confesar otra vez o poner en claro que no soy ni por asomo un entendido en la macroeconomía, ni en los manejos presupuestarios del poder pero sí, un ciudadano contribuyente de impuestos al que le interesa conocer el destino de esos aportes, y si es posible contribuir a que no se malgasten como es la histórica costumbre entre nosotros.
   Nuestra provincia viene derrapando desde tiempo atrás y posiblemente esto venga sucediendo antes que nos impusieran el “cordobesismo” con sus dineros y es irritante advertir que cuando eso sucede, precisamente por aquello de malgastarlo, se apela a fondos como por ejemplo de los jubilados, de los docentes o de los presupuestos de otras áreas, pero nunca como fruto del achicamiento de un Estado que muchas veces queda transformado en bolsa de trabajo para la militancia política.
   Y eso, con el agravante que cada triunfador de elecciones va poniendo su
gente que se queda, incluso aunque más adelante triunfe una corriente adversaria, cuyos dirigentes harán exactamente lo mismo que sus antecesores.
   Y así seguimos con una sobrepoblación de empleados públicos pero siempre faltan maestros, médicos, policías correctos, bomberos, insumos en salud, caminos, viviendas u otras necesidades.
   Los gastos en lo que le llaman difusión de actos de gobierno que en realidad es publicidad partidaria con fines electoralistas son enormes al igual que los sobreprecios tradicionales en la obra pública o en casos en que deben realizarse correcciones que resultan más onerosas que los trabajos originales.
   Y cuando las deudas aprietan y hay que cumplir con compromisos, entre otros los salariales con la enorme masa de activos y de pasivos, se apela a los créditos o préstamos que nos van comprometiendo a todos los cordobeses y más cuando se tramitan y se suscriben en moneda extranjera que debemos pagar luego con nuestro raquítico peso argentino, ya cansado que en pocos años le hayan quitado tantos ceros.
   Resumiendo, ahora la deuda cordobesa, calificándola de monstruosa para
nuestras posibilidades sería exagerado, pero aplicarle calidad de elevada sería pecar de reduccionismo pero igual, la llamemos como se nos ocurra, hay que pagarla.
   Y así tendremos que hacerlo con el sacrificio de la gente que seguirá pagando la energía eléctrica más cara del país, el transporte urbano también carísimo y con penosa calidad, el agua que se cotiza como lo hace la OPEP con el petróleo crudo o los impuestos que son un arrancadero de cabezas.
   Pero no escarmentamos: un mes antes de cada elección cualquiera que se postule promete rebajas del 90 por ciento en los impuestos, agua y luz gratis, viviendas para todos, caminos, aire acondicionado en los campos de golf y los cordobeses, como corderos, vamos y votamos.
   No soy experto en economía.
   Sólo una víctima más de lo que ella nos ocasiona.

¡Fidel Pintos, Axel Kiciloff y “Cantinflas”!
OTRA VEZ SOBRE EL TAPETE ESE ARTE
DE HABLAR MUCHO ¡Y NO DECIR NADA!

   Para que nadie diga que nos limitamos a los malos ejemplos argentinos, nacionales y populares o de otras corrientes, es bueno comentar que en México existió un actorazo, Mario Moreno archiconocido como “Cantinflas”, especialista en hablar acerca de pilas de cosas, pero sin decir nada.
   Entre nosotros el ya desaparecido gran actor cómico Fidel Pintos, aquel del naso prominente, era un acabado cultor de emplear una catarata de palabras también para no decir nada, actitud que se define como “sarasa” en el
diccionario de lunfardo, argot o “slang” que tiempo atrás y sin perder vigencia en la actualidad, era común en los bajos fondos rioplatenses.
   El término “sarasa”, según el diccionario lunfardo es  Palabras sin sentido o que carecen de correlato o conexión con la realidad; argumentación vacua, discurso inconsistente o incomprensible”.
  “Yo también puedo sarasear” le comentó el ministro de Economía Martín Guzmán a la tercera autoridad de la Nación, el diputado nacional Sergio Massa,
cuando se aprestaba a brindar una explicación del proyecto de presupuesto para el 2021.
   Martín Guzmán creyó que el micrófono estaba apagado… como tampoco lo está la atención de la gente, harta ya de padecer las dos crisis que nos están carcomiendo los cimientos de nuestra propia supervivencia: la pandémica y la económica.
   Nunca se sabe, pero a veces y en tiempos de angustias, suele ser saludable gozar el impacto emotivo de un
sincericidio.
   Lo peor del caso es que después pretendió aclararlo…
    Y como siempre ocurre, no aclares que oscurece.
    Fidel Pintos ni Martin Guzman tuvieron exclusividad entre nosotros, y lopodrán apreciar en dos exposiciones brillantes: una, de Axel Kiciloff y otra del magistral “Cantinflas”. Deléitese al escucharlos:
  (El audio respectivo, de un minuto de duración en el que se escucha a Kiciloff y a “Cantinflas” está ubicable en la columna correspondiente, en el costado superior derecho de este blog)
 
Familiares del A.R.A. San Juan
CUANDO EL ESPIONAJE NO  ES SÓLO CUESTION
DEL PASADO SINO QUE SE SIGUE PRACTICANDO

   Es por ese apego natural a la privacidad que por lo general sentimos desprecio y odio hacia el espionaje porque más que una especie de curiosidad aprovechable, es una manera de meterse en las cosas de uno sin haber sido invitado y para inmiscuirse de esa manera en ciertas intimidades que son objeto de violación.
   En nuestro país se puede decir que siempre hubo espionaje, desde que las

fuerzas armadas entendieron aquello de controlar ideas y opiniones ajenas que no se hacían públicas.
   Espionaje industrial y comercial también es parte de la cultura de cualquier comunidad.
   Los periodistas, históricamente, hemos sido siempre motivo de espionaje como muchos a quienes no puedo llamar colegas, han sido parte de ese estilo reprochable, al servicio de algunos gobiernos.
   Espionaje desde los mandos militares los hubo según dicen desde San Martín y otros próceres hasta en los tiempos de Videla, de Menéndez y en plena democracia con Milani y otros exponentes de esas malas artes.
   Existen tareas de espionaje decididas por la Justicia en ciertos casos y con la debida autorización, para la investigación de delitos.  
 El fiscal federal de Mar del Plata Daniel Adler impulsó la investigación por un presunto espionaje  ilegal contra familiares de víctimas del submarino ARA San Juan y del naufragio del buque Rigel, tal cual denunció en base a pruebas encontradas la Agencia Federal de Inteligencia (AFI). Adler ya dispuso medidas
de prueba en el caso y acerca del asunto, un familiar de una de las víctimas del ARA San Juan, 
decía que no le sorprendía el espionaje ilegal.
    La denuncia de la AFI apunta al ex presidente Mauricio Macri por ser presunto responsable de fijar los lineamientos estratégicos y objetivos generales de la política de inteligencia nacional y a otros ex funcionarios.
   La cuestión está en manos de la Justicia, obviamente, y es de esperar que si las cosas se hicieron al margen de la ley, Se apliquen las sanciones y condenas correspondientes y se proceda de la misma manera cuando haya que juzgar a quienes tomaron la costumbre de espiar en los últimos años, tanto a periodistas como a personajes de los partidos opositores al que fuera gobierno por aquellos años.
   No es para escandalizarse, sino para que la mano de la Justicia tenga el mismo grado de aplicación con todos…
   Y todas.

22 de septiembre de 2020

¡Volvió Fidel Pintos!

OTRA VEZ SOBRE EL TAPETE ESE ARTE
DE HABLAR MUCHO ¡Y NO DECIR NADA!
   El gran actor cómico Fidel Pintos, aquel del naso prominente, era un acabado cultor de emplear una catarata de palabras para no decir nada, actitud que se define como “sarasa” en el diccionario de lunfardo, argot o “slang” que tiempo atrás y sin perder vigencia en la actualidad, era común en los bajos fondos rioplatenses.
   El término “sarasa”, según el diccionario lunfardo es  Palabras sin sentido o que carecen de correlato o conexión con la realidad; argumentación vacua, discurso inconsistente o incomprensible”.
  “Yo también puedo sarasear” le comentó el ministro de Economía Martín Guzmán a la tercera autoridad de la Nación, el diputado nacional Sergio Massa, cuando hizo una pausa en su explicación del proyecto de presupuesto para el 2021.
   Martín Guzmán creyó que el micrófono estaba apagado… como tampoco lo está la atención de la gente, harta ya de padecer las dos crisis que nos están carcomiendo los cimientos de nuestra propia supervivencia: la pandémica y la económica.
   Nunca se sabe, pero a veces y en tiempos de angustias, suele ser saludable gozar el impacto emotivo de un sincericidio.
   Lo peor del caso es que después pretendió aclararlo…

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20 de septiembre de 2020

S.L.B.: SEGUIMOS ESPERANDO EL PICO DE LA PANDEMIA - ¿CÓRDOBA EN RIESGO DE CAER AL DEFAULT? - DIA DEL JUBILADO CON POCO PARA CELEBRAR - EL DR. FAVALORO TENÍA MIRADA CRÍTICA SOBRE INFLACIÓN Y CORRUPCIÓN - EN LA MEGACAUSA, INTERPRETACIONES Y EXPLICACIONES - INMOVILIZAN A LOS ADULTOS MAYORES - BUENO ES APELAR A LA LEGITIMA DEFENSA ANTE OFENSAS GRATUITAS - LA PRIMAVERA QUE LLEGA PARA QUEDARSE, ETC.


Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” edición n° 639 del 20/09/20 difundido en dúplex por AM580 y la 88.5FM ambas dependientes de Radio Universidad Nacional de Córdoba.
 
La mayor de las angustias
EL MUNDO  Y  EN  ESPECIAL  NOSOTROS, SEGUIMOS
ESPERANDO QUE LLEGUE EL PICO DE LA PANDEMIA

   Un  principio fundamental de las verdades irrefutables es que todo lo que comienza, alguna vez se termina y esto rige para el mal tanto como para el bien, desde la vida misma hasta cualquier otra actividad humana.
El planeta Tierra, que ha sido sometido a millones de exigencias climáticas, políticas y de todos los órdenes de la vida sigue expectante desde todas las
razas, religiones y desde los orígenes que cada uno quiera asignarle, aguardando en un escenario de escondrijos e intereses internacionales, que la pandemia que nos aflige, nos encierra y condiciona todos nuestros actos en los últimos seis meses, llegue a su cúspide para que luego se estabilice por un tiempo y después comience a ceder terreno, un terreno sembrado de muerte, desolación y luto.

  
Es cierto que cada punto cardinal es un mundo diferente y lo estamos viendo por sus alteraciones permanentes en cuanto a los resultados de la lucha contra el coronavirus, porque en algunas latitudes los resultados son aceptables y en otras, es como si esa pobre gente viviera en un festival de desaciertos, improvisaciones y pretendidas justificaciones porque hace a la naturaleza humana eso de presumir infalibilidad.
   Dejemos los supuestos orígenes chinos, su fantástica difusión pese a las distancias y todos los aditamentos que podamos agregarle a la situación, pero es un deber reconocer que el ser humano ha podido demostrar en esta encrucijada, como si hiciera falta, su espíritu de rebeldía frente a los mandatos de la Naturaleza o los designios del Destino.
   El agotamiento mental está pasando factura, el encierro es ya insoportable y nuevas patologías están emergiendo alimentadas por eso de no avizorar un límite al mal, y la consecuente llegada de la salvadora vacuna que viene postergando su nacimiento, precisamente alentada por factores aparte de los científicos, de índole ideológico y demagógico.
   Cada gran potencia, a lo que se sumaron las medianas y las modestas anunció en su momento tener la solución al alcance de las expectativas, y hasta nosotros ahora, adherimos con cierto triunfalismo al modelo británico con participación mejicana en los estudios ya avanzados y anunciados como virtualmente exitosos que no faltaron los audaces que le pusieron fecha a lo que se aguarda como milagro.
  
Poco a poco se fueron desdibujando aquellas seguridades y paralelamente, por hartazgo, se relajaron las precauciones y las prevenciones hasta desembocar en un demencial aumento de los riesgos, de los contagios y de las muertes, que ahora se cuentan por millones.
   Y eso que en general, la sociedad mundial desconfía de los números que se dan a conocer suponiendo que cada nación maneja las cifras caprichosamente y de acuerdo con las conveniencias que son en realidad los factores más trascendentes, universalmente hablando, de los momentos que vivimos.
   Para sobrevivir, lo entendamos alguna vez y que nos entre en la cabeza y en el alma, debemos cuidarnos y cuidar a nuestro prójimo porque una recaída en medio de la pasajera mejoría de la situación, la agravaría hasta lo insostenible.
   Seamos entonces conscientes que la vida, más que en las manos de la ciencia y de los milagros, está en las manos de todos nosotros, que tengamos la suficiente grandeza de querernos un poquito más.
 
¿Es luz de alarma o simple presión?
INQUIETA CONOCER QUE A NUESTRA PROVINCIA
LA HAYAN UBICADO MUY CERCANA AL DEFAULT

   Se hace menester, como si fuera imprescindible, que confiese mi casi absoluta ignorancia en cuestiones de la macroeconomía, aunque me desenvuelva con algo de acierto en el manejo de la economía familiar, casera a como se les ocurra minimizar su trascendencia.
   Confesión aparte, el hecho de vivir atento a las informaciones que se manejan acerca

de esa actividad, no fue poca la impresión que provocara pocos días atrás conocer que una calificadora de riesgo, Standard & Poor’s Global Rating, nos bajó la nota como emisores de deuda a largo plazo y estableció algo que en lo personal considero de gravedad ya que dictaminó que la tendencia es negativa en el próximo año.
   Desmenuzando sencillamente esas pocas palabras, es para imaginarnos un escenario casi apocalíptico en el futuro también cercano, por el descalabro económico del país, en buena parte atribuible a la inesperada pandemia como a otros factores que en realidad no creo que sean pocos ni aislados, porque tal dictamen le encaja a Córdoba la vulnerabilidad de caer en incumplimiento de sus obligaciones financieras, que no son pocas ni baratas.
   Resumiendo, la calificadora nos ubica en la cornisa del default y pone dudas acerca que la oferta de reestructuración de los tres bonos internacionales de la provincia, evidencia que no podría cumplir con los pagos debido a la estresada situación económica y financiera –no lo digo yo sino que lo consigna el informe- y a la falta de acceso a los mercados de capitales.
    Pese a tales conceptos el organismo internacional elogia medidas adoptadas por el cordobesismo al usar casi al máximo la flexibilidad presupuestaria disponible, disminuyendo gastos para contener parcialmente la drástica caída de ingresos.


   La oferta cordobesa de reestructuración de la deuda de los bonos internacionales que vencen en los años 2021, 2024 y 2027 por casi 1.700 millones de dólares, son para la calificadora, equivalentes a un default porque apuesta a postergar por dos años todos los vencimientos de capital y lograr una importante baja de intereses.
   Es cuando uno se pregunta si la intención es patear para adelante como se dice y que lo resuelvan las administraciones venideras o se apele al viejo y percudido “que pague Dios” o “que Dios se lo pague”.  
   Porque el problema realmente es si para asumir los compromisos existió una apreciación y análisis de las prioridades o si el estado de riesgo actual puede ser utilizado como elemento de presión frente al nivel nacional que si lo bolsiqueó a Larreta en Buenos Aires ¿por qué no haría lo propio con nosotros?
   No se trata de una agorería sino que la realidad nos viene mostrando costados más que curiosos en cuanto al manejo de los endeudamientos.
 
Archivo implacable
EL DR. RENÉ  FAVALORO SUPO CRITICAR CON
DUREZA A LA INFLACIÓN Y A LA CORRUPCIÓN
   Tiempo atrás en un programa televisivo que conducía el periodista Bernardo Neustadt, el afamado cardiocirujano argentino René Favaloro supo definirse acerca de sus conceptos sobre inflación y corrupción, ubicando hechos de tales naturalezas en distintos segmentos de nuestra historia. Apasionado como siempre lo fue este orgullo para los argentinos, quien prefirió inmolarse en un duro mensaje destinado a quienes mostraron insensibilidad social, refrescó memorias especialmente de aquellos que cuentan la historia pero parcializada e interesada en función de sus inclinaciones ideológicas. Ese material de archivo puede escucharse en la columna de audios de este blog, ubicada en la columna superior del costado derecho.
 
Registro de la Propiedad de Córdoba
CURIOSO JUEGO DE INTERPRETACIONES Y
EXPLICACIONES EN TORNO DE  LA  CAUSA


   La palabra “interpretar” es, de cualquier manera, una herramienta poderosa.
   El diccionario nos dice que ella permite explicar o declarar el sentido de algo, traducir, concebir, ordenar, expresar, representar, ejecutar y también determinar el significado y alcance de las normas jurídicas.
   Una amplitud que otorga al “intérprete” una interesante potestad. En la causa del Registro de la Propiedad de Córdoba la ley que establece que la prisión preventiva debe ser excepcional "se interpretó" como todos presos.
   La normativa del juicio previo "se expresó" como llegar al juicio con la condena ya
cumplida. La garantía de imparcialidad con jueces distintos "se tradujo" como nombrar una comisión especial. La íntima convicción “se ejecutó” como posibilidad de reemplazar ausencia de pruebas. 
   Muchas fueron las víctimas de tan curiosas interpretaciones, mereciendo mención entre ellas, el caso del señor Andrés Pérez, quien dejó físicamente este mundo hace dos años, clamando y repitiendo su inocencia hasta la última gota de sangre como él mismo escribió. En su juicio nadie lo acusó, ni su firma apareció en ninguna irregularidad y no es menor el detalle de que previo al proceso había realizado más de 200 denuncias ante las autoridades, algunas de las cuales me envió, en las que resaltan palabras como apartamiento, sustitución, irregularidad, sustracción, reemplazo y similares.
   Pocos conocimientos bastan para comprender la gravedad de lo denunciado, sin embargo y aunque cueste creerlo, los “intérpretes” judiciales las ignoraron, sin citar a ningún alto funcionario para cumplir con el trámite legal y necesario ante la comunidad y la Justicia, de dar explicaciones.  
   Una elemental interpretación diría que tales determinaciones judiciales resultan caprichosas y arbitrarias y que resta interpretar aún su intencionalidad.
 
Alguna vez se hará justicia…
HOY ES EL DIA DEL JUBILADO AUNQUE NO
HAYA MUCHOS MOTIVOS PARA FESTEJAR

   Tengo entendido que el día fue instituido por algo que ocurriera en 1904 o por allí, cuando entró en vigencia una ley que ampara a los jubilados, término que viene de “jubileo” o algo parecido a un festejo o una celebración de algo.
   Seguramente el Dr. Silvestro podrá aportarnos mayores precisiones, pero viene al caso consignar algunos detalles que hacen a la vida y al sufrimiento de quienes han tenido para algunos la dicha y para otros la desgracia, de haber aportado durante los que eran interminables años a una Caja recaudadora, para que al final de su etapa

laboral productiva pudieran gozar el retiro en condiciones medianamente dignas.
   Uno primariamente interpreta que lo que hacen los activos es prestarle a las cajas un dinero mensual para que lo administren, hasta que cumpla con los requisitos y pueda pasar a las huestes de los que mal llaman pasivos, porque muchos necesitan seguir trabajando para sostenerse.
   Entre nosotros tenemos dos categorías de jubilados: los provinciales y los nacionales, demasiado distintos si de remuneraciones mensuales se trata porque mientras los provinciales tienen mayores haberes pese a los manotazos que les aplican
desde el gobierno, los dependientes de la órbita nacional son un lamento permanente porque entre otras injusticias, su mensualidad escasamente supera a la mitad de lo

establecido para vivir en condiciones de pobreza.
   Pero dejemos de lado esos detalles y rindamos un justo homenaje a tantos hombres y mujeres que dejaron su sacrificio, su compromiso, su esfuerzo a lo largo de tantos años y después vieron con impotencia que, entre otras cosas, sus dineros se aplicaban al pago del fútbol para todos, a sostener una malsana política de subsidios que sepultó a la cultura del trabajo y como caja chica para solventar campañas preelectorales.
   En consecuencia y no tan solo hoy sino todos los días, el Estado debiera realizar actos de desagravio al padecimiento de muchos argentinos olvidados por intereses políticos o por demagogia, que fueron útiles mientras aportaban y pasaron a condición de inútiles e indigentes cuando dejaron de trabajar.
 
Un beneficio menos…
PARA  COLMO, INMOVILIZAN A LOS ADULTOS
MAYORES QUITÁNDOLES PASAJES URBANOS

   Causa dolor y bronca muchas veces advertir que personas mayores ascienden a un ómnibus o a un trolebús y deben bajarse porque las tarjetas con que la demagogia los mimara tiempo atrás, ya no tienen vigencia para los viajes gratuitos.
   Es cierto que en muchas ocasiones los choferes voluntariosos y las atentas operadoras de los troles entienden la situación y se hacen cargo de trasladarlos sin exigencias, pero en menos casos obligan a bajarse a personas maltrechas que no salen de paseo sino a alguna consulta médica o trámites presenciales.
   Llama la atención que el gobierno de la provincia, tan inclinado por el desbordante gasto publicitario para dar a conocer las obras que realiza, no haya reparado en ese detalle de al menos hacer saber que el sistema que beneficiaba a los adultos mayores, ya no existe.
Realmente lamentable la actitud, una más que se inscribe en los tratos ofensivos hacia quienes dieron mucho de sí para contribuir a la grandeza del país, aunque otros, los verdaderos privilegiados, se esmeraron y aún se esmeran por desatender todos los logros que alcanzaran esos viejos a los que el gobierno les quitó un beneficio más que merecido.
   Para muchos funcionarios, desalmados por su indiferencia, no son más que viejitos o viejitas que sólo quieren viajar gratis, cuando lo que se impone es que se queden en cuarentena recluidos en sus casas según buscan imponerlo.
   Quienes tengan que ir al médico, debieran pedir un auto con chofer, de esos que abundan entre los políticos, y que pagamos todos, incluyendo esos viejitos ahora jubilados.
 
La memoria siempre ayuda
A VECES ES BUENO APELAR A LA LEGITIMA
DEFENSA SI LAS OFENSAS SON GRATUITAS

  Los recuerdos suelen empujar a una confusión cronológica, pero suele ser bueno y saludable apelar a la memoria porque más allá de ser “el lápiz de la historia” nos muestra cuántas cosas pueden suceder en el país -en nuestro país- en pocos meses de una nueva administración nacional.
   Y en esa mezcolanza de hechos trascendentes podemos evocar que el dólar se
disparó o lo dispararon
a 145 pesos, hubo cinco o seis desaparecidos/asesinados, quema de campos y otros incendios intencionales, liberación de corruptos, violadores y asesinos, represión al bueno y libertades al delincuente, ambulancias repartiendo drogas, cierre de más de 30 mil PyMe’s, caprichosa manera de legislar, casinos abiertos y Congreso Nacional cerrado.
   Podemos sumar la rotura de silobolsas, Boudou con condena en curso, libre e indemnizado; que Alberto perdona a Moyano 810 millones de deuda y Moyano es distinguido como “el sindicalista ejemplar”, bloqueo y apriete a Mercado libre, Grabois -el bendecido- llama a tomar tierras, ocupan terrenos en el conurbano bonaerense, no reaccionan cuando

Duhalde anticipa ingobernabilidad, Kicillof llama provincia a la Antártida, tres planes sociales nuevos, Guazzora invita a la gente a romper silobolsas y la tentativa de expropiación como para tantear las reacciones y no podemos olvidar las cuchetas de Baradel ni la emisión monetaria indiscriminada.
   Y si es por recordar, aquello imborrable cuando intimaron a Latam a que pague sueldos pero suspendieron al personal de Aerolíneas. Que pasamos de 35,4%  al 50% de pobres en 5 meses, 194 ediles peronistas que cobran el IFE,  funcionarios públicos que se aumentaron los sueldos en pandemia ni la cuarentena más larga y menos efectiva del mundo con seis meses para preparar un sistema de salud que está más quebrado que antes.
   Recordemos que empezaron al revés la “lucha” contra el coronavirus dejando para el último a los más vulnerables que son los ocupantes de geriátricos y habitantes de las villas marginales, ni el gobierno que compra alimentos por mayor más caro que en un almacén y castiga a quienes no respetan precios. Cuando Alberto prohíbe salir pero anda de gira sin barbijo y se junta a comer con amigos ni ese repetido episodio que

protagonizara ex Ella quien viaja a Cuba un par de veces en plena pandemia y vuelve sin cuarentena.
   Memorable lo del Sr. Presidente cuando felicita a Insfrán, especie de tiranuelo y dice que es el modelo a seguir, como lo es también ese derrape de Ginés González García quien anticipó que el virus estaba demasiado lejos para llegar a nuestro país y el bueno de D’elía cuando ambos elogiaron la salud pública, y al requerir de ella, se internaron en clínicas privadas. No es grave pero sí anecdótico que Alberto se proclame amigo de Maduro y de Chávez y que la gente hizo tres marchas a nivel nacional pero el presidente sigue sosteniendo que están confundidos a

la vez que anuncia una “contramarcha de la buena gente” descalificando al resto seguramente endemoniado.
   Es cierto que personajes de la vereda opuesta también hicieron de las suyas, pero ellos ahora no gobiernan y si tienen que responder por violar la ley, allí está la Justicia que no debe ser objeto ni víctima de manoseos en la obligación cívica de respetar su Majestad y me detengo aquí. No busco abrumar a nadie sino refrescar parte de lo que nos sucede. 
   Roguemos que cuando llegue el tan postergado “pico” estemos en condiciones sanitarias e institucionales como para poder superarlo y si es posible, hacia abajo. Y me quiero permitir recomendar que no disuelvan aquel “club del helicóptero” que formaron, porque en cualquier momento incorporan a uno, dos, o varios asociados entre aquellos que dijeron que venían a levantar el país y a "ponernos de pie" y ahora se están haciendo curar lastimaduras en sus rodillas.
 
Llega para quedarse
LA PRIMAVERA Y MARGOT


   Los cordobeses hemos estado viviendo desorientados con relación a las estaciones que nos indica con su esclavizante rigor el almanaque y a las temperaturas que de un día para el otro nos agobian por la pegajosa humedad, o nos obligan a sacar del placar la camiseta, la campera y el pulóver que habíamos arrumbado para no verlos ni tocarlos hasta el año que viene.
   Y finalmente, cuando suponíamos que la primavera no se había enterado que debía alegrarnos la vida y seguía paseando por otras geografías, se aquerenció pidiendo disculpas y haciendo anunciar su insólita tardanza con temperatura acorde, clásica y
aguardada para esta altura del año pandémico.
   Que ya está entre nosotros la estación de la juventud, la bandera estudiantil, la forjadora de romances, la fabricante de flores, verdores y perfumes, se nota en el calor que industrializa la maravilla de las sonrisas, los ojos luminosos y la ansiada brevedad de la ropa. Las limitaciones en la circulación y para los encuentros fraternos o casuales son en muchos casos motivos de evocaciones y recuerdos traídos a un presente de barbijos y de encierros, como si el Dueño de Todos los Relojes quisiera demorar el estallido de las flores y aún más la dolorosa y salobremente húmeda postergación de los abrazos.
   Una simple recorrida por la peatonal cordobesa, nos regala el magnífico y gratuito cuadro de la pasarela permanente por donde siempre desafiantes y pese a todo desfilan ellas, las dueñas de las miradas y destinatarias de los suspiros y de otras clásicas manifestaciones de masiva y sonora aprobación.
   Inspiradora de poetas la primavera en su esplendor ha recorrido etapas tan placenteras como desatadamente románticas hasta llegar a la lujuria, aunque en tiempos pasados y no tan lejanos, para aludirla se empleaba más el recato que ha sucumbido a la inspiración actual simbolizada por las eróticas y hormonales

exaltaciones del amor en su práctica por encima de las vetustas y anticuadas teorías que pretendían definirlo.
   Ahora, cuando la clandestinidad le viene dando sopapos al irrefrenable deseo, la Primavera llega lo mismo, inclaudicable vencedora de las murallas, las prohibiciones, las leyes o los decretos de necesidad y urgencia.
   Por eso es bueno rescatar de la memoria algunas expresiones poéticas consideradas audaces allá por mediados del siglo pasado que son un caramelo para el alma, porque están desprovistas de la intrepidez y la osadía literaria de la actualidad que más se aproxima a lo explícito que a la ensoñación.
   Es una pena no recordar el nombre del autor de “Margot”, un soneto delicioso y todo un atrevimiento para aquellos tiempos, aunque por el título se puede llegar a deducir un parentesco tanguero y lejanamente lunfardo: 
 
MARGOT
 
Pasa Margot con su bolsón de raso,
largo el andar y la pollera breve
y muestra el muslo su filón de nieve
con cada balanceo de su paso.
 
Ojos rasgados, con mirar de ocaso,
boca sensual para el mordisco aleve,
senos en flor luciendo su relieve
desnudos, bajo de la blusa acaso.
 
Se detiene en la esquina y con delicia
suya el viento mancebo la acaricia.
El viento sabe de caricias tiernas.
 
Y al formarse una arruga en su vestido
parece que Margot ha consentido
que le ponga una mano entre las piernas.
 
   La verdad, una suave ternura que pinta no tan solo al personaje sino a tiempos cálidos, con imaginables y sentimentales esquinas de barrio donde al evocarlos, se cruza la roja y cilíndrica figura del buzón con su vientre lleno de palabras, arrasado por el progreso.
   Ya está, algo tardía, pero en todo su esplendor la primavera dueña de soles y de caricias; de fantasías y de intenciones; de pétalos y de abrazos… y también de esperanzas de poder ser felices pese a las desgracias.