Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio
Ferrari en su programa “Síganme los buenos” edición del domingo 29/09/24
emitido por la AM580 Radio Universidad Nacional de Córdoba:
LA DESESPERACION NACIONAL: LA GENTE Y
SUS URGENCIAS QUE SON IMPOSTERGABLES
Y eso que resumo sumando lo de las carencias multiplicadas, del descrédito comercial internacional, del crecimiento exponencial del narcotráfico -tan exponencial como real aunque se lo pretenda minimizar- sumado todo lo anterior a la crisis habitacional, fisuras en la atención de la salud lo que fue patentizado por los miles de casos fatales por la peste, el injusto maltrato a los más vulnerables que son los jubilados, a las insólitas cifras cumplidas de un maltratado calendario escolar; al desamparo a las provincias que no eran ”del palo” especialmente a la hora de abonar la coparticipación, y otros detalles que sería más que engorroso puntualizar.
El hombre ganó en buena ley y cuando fue pisando el terreno de la cercana y revelada realidad archivó la motosierra, moderó su discurso aunque paralelamente cayera o sucumbiera frente a la tentación farandulera, perpetrando situaciones más cercanas a la ridiculez y al mal gusto, pero lo mejor ahora es no hablar de tonteras sino pintar un panorama real de lo que estamos padeciendo, más allá que algunos temas están en los comienzos de su concreción, especialmente en el manejo de los dineros públicos y evitando la superpoblación de los organismos y empresas estatales, aunque eso de llenarlos de militantes ha sido distintivo de todos los gobiernos, más en unos que en otros.
“No hay plata” son las tres palabras del sincericidio presidencial que no necesita mayores explicaciones ni aporte de detalles que para colmo, sirven para calentar aún más los ánimos de la gente en el mar de frustraciones y derrapes ajenos que nos toca soportar.
La desocupación apremia, la inflación es el caballito de batalla en el que monta un cachito así de gestión exitosa, y es la esperanza de alcanzar si no todo se derrumba, el equilibrio necesario que lleve nuestra moneda a su real valor y merecedora de respeto como cuando éramos potencia mundial, y ahora debemos conformarnos con serlo en el fútbol, en las inversiones equivocadas y en otros aspectos que mejor es dejarlos de lado.
La gente, nosotros, el pueblo, lo que necesitamos son soluciones para la subsistencia digna que añoramos y merecemos por vivir en un país rico aunque cíclicamente saqueado, pese a lo cual no hemos llegado a comer raíces pese a que la delincuencia descontrolada por un Estado que debiera ser protector, está fallando, plagando de omisiones, improvisaciones y remiendos.
La gente necesita comer todos los días la cantidad necesaria de nutrientes, para que tengamos futuras generaciones sanas, y no de hambrientos, desatendidos en su salud, mendigando una “changuita” temporaria o la generosidad de algún desprendido que no abundan.
No es posible, aceptable ni tolerable querer asumir esa postura de nuevos ricos, como si al dinero lo recogiéramos en las calles o encontráramos oferta laboral como para elegir.
Necesitamos ya, con motosierra o sin ella, regularizar nuestra desquiciada economía, achicar los gastos descomunales del Estado que somos todos, aunque haya tantos privilegiados; terminar de una buena vez con los ejércitos de asesores en todas las funciones tanto legislativas como en las administraciones estatales; necesitamos más médicos y docentes que ñoquis cultores de la vagancia, la vida regalada, los viajes al exterior y otros derroches que, también, los pagamos todos.
La gente necesita estar protegida en la ciudad y en el campo, lo que se logrará cuando los gobiernos tanto nacional, provinciales y municipales apliquen una purga en serio en las fuerzas de seguridad y en todos los otros ámbitos, y no un cómico laxante que no provoque los efectos deseados, sino que les aumenta a los acomodados la provisión de café, criollitos, transporte gratuito y créditos de los llamados “blandos” que muchos bancos publicitan e instrumentan siempre que los candidatos a esos préstamos puedan demostrar que no los necesitan.
Hay tanto para exigir, pero resumiendo, que lo trascendente es el respeto por las prioridades reales de la sociedad, que no se contenta con parques bonitos, murales artísticos, paseos entre jardines porque estrechan las calles -y los comerciantes se funden- mientras crece el parque automotor y los viejos deben caminar tres o cuatro cuadras hasta encontrar una parada de ómnibus, de empresas que manejan las frecuencias en las narices municipales que no detectan esa falla y permiten los abusos y las transgresiones…
“Mejor que decir es hacer; mejor que prometer es realizar” rezaba una consigna peronista desde mediados del siglo pasado, que no ha perdido vigencia al menos en su enunciación, porque a la hora de la verdad, ni siquiera la cumplen quienes abrazan aquella doctrina.
Dejemos que lo de Aerolíneas Argentinas se resuelva criteriosamente y deje de ser como lo es ahora, una especie de aeroremisse que pagamos todos para los amigos del poder, sus familiares y bendecidos, como los que visitan al Papa y cuando vuelven los putean…
La situación más cómoda en materia de acumulación de ahorros y la vigencia para muchos eterna, de ser ungidos en cúpulas de poder con apetencia o capricho de eternidad, debiera entender las reales necesidades de la gente y obrar en consecuencia con la obligación de no mentirle al pueblo y Napoleón supo comentar “es más fácil engañar que desengañar” y para que lo tengan muy en cuenta los amantes, fanáticos y practicantes de la demagogia, de los que podemos contar por miles, que con una mentira puede irse muy lejos, pero sin esperanzas de volver.
Porque me juego la cabeza que no hay siquiera uno de los funcionarios gubernamentales o sindicalistas que alcanzaron posiciones dominantes, que siquiera remotamente piensen en retirarse.
Seguramente, algún interesante atractivo los impulsa…
Y para que lo asuman los que mandan, obrando en consecuencia: la situación nacional es apremiante y no es cuestión de tomarlo con liviandad. La gente, mucha gente, demasiada gente pasa hambre, pero los capitostes de la política y del gremialismo no saben de qué se trata eso de no comer.
Tengan algo de sensibilidad, pídanla prestada si alguien se las ofrece, y si no están en condiciones de gobernar para la gente, vayan pensando en la manera menos escandalosa de mandarse a mudar…
BANCOR PAGÓ A JUBILADOS Y DEMORÓ POR
FERIADO EL TRÁMITE EN CAJEROS HUMANOS
El pago a los pasivos provinciales se viene respetando en un 90 por ciento haciéndolo efectivo el último día hábil de cada mes, y la legión de beneficiarios colmaba los cajeros automáticos y aquellos que no se animan a operar con la tecnología que les paga sin conocerlos, no pudieron cobrar el viernes que se había informado ya estarían los depósitos pero algún problema surgió, porque varios cajeros automáticos de la ciudad estaban cerrados.
El caso se agravó el sábado, porque aunque se habilitaron algunas dependencias para cobro por máquina, el máximo extraíble era de 150.000 pesos cifra que no siempre alcanza para afrontar los primeros gastos o aquellas emergencias que pudieran surgir.
Mañana, día de San Jerónimo patrono de la ciudad y por tal razón bancos capitalinos, al menos las sucursales de BANCOR estarán cerradas y habrá que ver si alimentaron a tiempo a los cajeros automáticos, pero seguirán teniendo el límite de extracción ya apuntado de 150.000 pesos y no habrá cajeros humanos que puedan hacer algo para superar el trance de muchos beneficiarios que deberán esperar hasta el martes para cobrar.
Lo enojoso del caso, es como que si nunca le faltara a la provincia un motivo para que sufra su clase pasiva y no quiero ni pensar en las aglomeraciones de beneficiarios, sumidos en la sequía crocante que es de imaginar, penando en las sucursales para ser atendidos.
Los viejos, nuestros viejos, no merecen el maltrato…
LA ‘INDUSTRIAL’ FABRICACION DE POBRES ES
GRAVE INJURIA A LOS DERECHOS HUMANOS
Y ya que abordamos el terreno de las citas de famosos personajes, vienen a mi memoria palabras que pronunciara tiempo atrás en uno de sus discursos John Kennedy, cuando sostuvo que la guerra contra el hambre es verdaderamente la guerra de la humanidad para obtener su liberación. Y recalcò que no hay batalla más importante en la tierra ni en el espacio, pues la paz y el progreso no pueden ser mantenidos en un mundo alimentado a medias.
Al abordar una temática tan delicada, no es cuestión de palabrerío, sino de asumir esa realidad que desde las cúpulas, o no se observan, o se hacen los “sotas” para no enterarse.
No son pocos los que piensan que grandes generadores de hambre son ciertos gobiernos y ciertos credos, para alimentarse de seguidores a quienes les solucionarían demagógicamente sus carencias.
El hambre, para que se recuerde, puede llegar a motivar acciones tan violentas, como lo es tener que resignarse a padecer por falta de alimentación y más cuando se trata de familias con integrantes pequeños.
Si dejáramos de malgastar cifras siderales en boludeces, desatendiendo una demanda como la que moviliza a los hambrientos, ni siquiera tendremos tiempo de arrepentirnos.
Y los gobiernos tienen con qué superar esta inhumana carencia, incluyendo el uso extremo de la maquinita de imprimir, que se sigue utilizando para estupideces y gastos absolutamente prescindibles.
Si desde el poder no se aportan soluciones integrales, no vengan después con llantos de victimización, por haber sido insensibles a la demanda de gente hambrienta, que es capaz de cualquier barbaridad, que uno llega a comprender y en muchos casos a justificar.
Que mañana no tengamos, todos los argentinos, que comprender y justificar la demanda de los hambrientos.
Partamos de la base, si se quiere, que comer es también un humano derecho y que aquí no se interprete así, es una verguenza…
DEMASIADOS AÑOS SIN PAUSA LLEVA UNA DE
LAS CAUSAS MÁS MANOSEADAS DE CÓRDOBA
Resulta sorprendente que las condiciones de unos pocos se generalicen a toda la causa y que se desconozca que la mayoría de los imputados / condenados, que “reclaman justicia” pertenecen al estrato que la autora denomina como víctimas: son ciudadanos comunes y trabajadores que viven de sus sueldos. No son desarrollistas, no hacen negocios, no construyen.
Casi todos ellos fueron encarcelados en prisión preventiva sin motivo que lo justificara, dado que no poseen antecedentes penales, fortuna, ni desarraigo y estuvieron presos hasta tres años sin juicio y es cuando la sorpresa y la indignación nos lleva a preguntar ¿Es eso Justicia?
Varios murieron en esa prisión y nunca podrán ser juzgados. ¿Será la frontera o ilegalidad manifiesta?
A esta conducta la sancionaron la Corte, la Organización de las Naciones Unidas y los organismos de Derechos Humanos por no ajustarse a la ley. Sería recomendable además que analice los nombres de los condenados y se sorprenderá con campesinos, empleados, secretarias, obreros y profesionales comunes, pero ningún alto funcionario de los denunciados.
Recién ahí podremos empezar a discutir el título, algo pomposo, de la ponencia.
FULGURANTE PASO AÉREO POR ENCIMA DEL
DRAMA QUE NOS AFECTA A LOS CORDOBESES
Debemos entender que por cuestiones de seguridad personal, me comentó un allegado a la seguridad de los funcionarios nacionales, existen ciertas limitaciones en cuanto a la presencia en lugares de conflictos o de desastres como los vividos por los cordobeses.
Se llegó a pensar que existe un problema de alergia al humo, al calor excesivo, al sufrimiento ajeno, a la resignación por todo lo perdido en vidas y en bienes, o alguna otra causa que justifique, ni remotamente, que el presidente Milei no haya bajado para abrazarse a los bomberos, para interiorizarse de sus carencias sin que hubiera intermediarios que lo impidieran o lo condicionen, y tantas otras cosas que a uno le vienen en esos momentos de desconcierto y de dudas…
La presencia presidencial hubiera servido asimismo, para que salgamos al menos de una de esas dudas, acerca de ciertas manifestaciones surgidas en Capital Federal, que se había determinado que el origen de algunos incendiarios, responsables de lo que está ocurriendo en nuestras bellas serranías, serían integrantes de una pandilla rentada, que dependía de un gobierno anterior.
Aunque fuera sólo para eso, disipar o confirmar las dudas, hubiera sido para nosotros una ducha de realidad y compromiso, una realidad que nos ha superado en sufrimientos y en pérdidas ya irreparables y cumplir el compromiso de estar junto a la buena gente.
Ni siquiera con subsidios, pésames u otras expresiones de los argumentos hipócritas.
El sacrificio de tanta gente, no merece tal afrenta…
DIRIGENCIA POLÍTICA Y GREMIAL ANSIOSA DE
OCUPAR CARGOS POR TODA LA ETERNIDAD
Posiblemente sea la eternidad el objetivo principal que alienta al ser humano y es lógico que nos inclinemos por la vida que transitamos, a diferencia de morirse porque nadie volvió de las insuperables tinieblas para comentarnos de qué se trata, cómo es ese contrasentido ya no de sobrevivir sino de sobremorir y otros misterios insondables que rodean al hecho de partir definitivamente de la vida terrenal, especialmente para quienes no creemos, por considerarla imposible, en la resurrección o su dulcificada versión de la reencarnación, especialmente por considerarla posterior al banquete de los gusanos.
Me reconozco incapaz de jugarme por alguno de los conceptos que rondan alrededor de la muerte, porque opto sencillamente por vivir el presente vital, donde cada uno de los humanos somos artífices innegables de nuestro propio destino.
Cabe entonces recordar, entre tantos otros, valiosos conceptos de Juan Pablo II en el sentido que “Para madurar espiritualmente hasta la eternidad, el hombre no puede crecer sólo en el terreno de la temporalidad. No puede poner su apoyo en la carne, es decir, en sí mismo, en la materia. El hombre no puede construir sólo sobre sí y confiar solamente en el hombre. Debe crecer en un terreno diverso del de lo transitorio y lo caduco de este mundo temporal. El terreno de la nueva vida, de la eternidad y de la inmortalidad el que Dios ha puesto en el hombre, al crearlo a su propia imagen y semejanza”.
Esto se trata de una verdadera y meticulosa maduración de los conceptos, aunque otro purpurado como lo fuera Ratzinger supo afirmar que “El hombre necesita la eternidad. Cualquier otra esperanza se queda demasiado corta. No es cierto que la eternidad robe tiempo al hombre, lo vacíe y convierta en algo insignificante. Todo lo contrario: sólo la eternidad le puede dar tiempo. Cuando la muerte del hombre carece de dignidad, no la tiene tampoco su vida”.
Como se puede advertir no son posturas antagónicas pero sí planteadas en conceptos diferentes, y tal calificación nos está llevando a creer que tanto los encumbrados funcionarios, como todos los encaramados en las huestes del sindicalismo argentino, están por encima de tan sesudas elucubraciones, y sólo ansían esa eternidad que les asegure el bien vivir con medido esfuerzo, y la enorme ventaja de una herencia que en algunos casos ya las vemos como descomunales, para el buen pasar de sus descendencias.
Mientras tanto, en esta nuestra vida terrenal pocos se han ocupado en preguntarse, más allá de las religiones y de los enfoques de sus pastores, por qué ese Ser Supremo con el nombre que prefieran darle, permite el abyecto e inexplicable misterio, acerca de la existencia de una masa humana dirigencial adormecida en su opulencia, dirigiendo los destinos de un pueblo de millones de trabajadores, en elevado número sumergidos en la pobreza.
Hay temas que no siempre encuentran explicación y el que acabo de comentar debe ser, seguramente, el más agobiante en los tiempos y en la realidad que nos toca vivir.
LOS PERSONAJES DE NUESTRA CANCILLERÍA
embajadores y funcionarios de nuestra diplomacia:
“Que los cónsules tengan cuidado”, fórmula con la
que se procedía a la designación de los cónsules
con poderes extraordinarios, en casos de extremo
peligro, por parte del Senado Romano”. Es que por
semejanza, se emplea para llamar la atención de un
colectivo ante la amenaza de una situación peligrosa.
Así que Cancillería argentina “mucho ojo al piojo”…