Desgrabación de los comentarios del periodista
Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” del domingo 26/08/18 emitido
en dúplex por AM580 y la FM 88,5
ambas de Radio Universidad de Córdoba
SENADO NACIONAL,
LUGAR DE
IMPUNIDAD Y COMPLICIDADES
Evaluar ahora lo
acontecido días pasados en el Senado de la Nación con el pedido de autorización
para allanar propiedades de la Sra. ex presidente, sería medio bobo por todo lo
que aconteció en dicho trámite judicial y algunas revelaciones obtenidas con
los resultados de esa acción, que muchos consideraron inútil y extemporánea por
lo anunciada, lo que equivalía a eliminar el factor sorpresa como ocurre en los
allanamientos a cualquier hijo de vecino.
Pero también estuvo posteriormente el tema
de la extinción de dominio, lo que le permitiría al Estado, es decir a la
legalidad, recuperar todo lo que rapiñaran los corruptos que se valieron de mil
artimañas entre ellas la más usada que fue la coima, para enriquecerse ilegalmente
y consolidar fortunas tanto en efectivo especialmente de color verde y en
propiedades, vehículos de alta gama, aviones, hoteles, campos y otros bienes…
En resumen y para no aburrir, viene al caso
evaluar algunos de los dichos de la principal oradora que tuvo aquella
maratónica sesión, en la que llamó la atención -entre otras anomalías- la
extensión del discurso de la doña que duplicó y algo más el término establecido
para cada intervención de los legisladores.
Dijo entre otras cosas "Yo no soy el problema de este gobierno. El
problema son ustedes y sus políticas horribles" y agregó después "Tampoco
puedo ignorar que en todo esto también hay intenso fuego amigo. Y estoy seguro
que si mañana me parte un rayo y solo quedan esparcidas mis cenizas, seguro que
muchos no llegarían con el voto popular a ser presidentes", tiro por
elevación a Pichetto, Moreno y otros…
La
realidad nos viene mostrando, por intermedio de diarias revelaciones lo que
vino aconteciendo en el tema coimas, y que para algo sirvieron -¡y eso que son
fotocopias!- los cuadernos del escándalo como guía para la búsqueda no tan solo
de la verdad sino de los responsables de la rapiña y el desquicio.
Más
adelante la Sra. Cristina se preguntó y afirmó: "¿Ustedes creen que la patria contratista y
que la cartelización de la obra pública comenzó en mayo de 2003? ¿En serio? Estamos en la Argentina que
preside Mauricio Macri, el hijo de Franco. El primo de Angelo Calcaterra y el
hermano del alma de Nicky Caputo. ¿De verdad creen que esto empezó en
2003?".
No hay
que negarle certeza en cuanto a la instauración de esa patria contratista,
porque no han sido pocos los funcionarios de todos los colores políticos que
fueron ilustres ciudadanos de esa patria del saqueo desde el fondo de la
historia.
Y si tanto
Macri hijo como cualquier otro funcionario hubiera caído a nacionalizarse en
esa patria despreciable y delictiva, será la Justicia la que investigue, juzgue
y condene llegado el caso, pero que nadie pretenda ninguno de los dos absurdos:
adelantar los relojes de la historia o volver atrás las agujas de tiempos
perdidos cuando no se trata de sospechas inmediatas.
Ella
trató de títere y de juez enemigo a Bonadío y se despachó con rencor y fantasía
sosteniendo que "Este
es un instrumento de persecución y proscripción de dirigentes populares”
agregando luego que."Ya no es necesario recurrir a los métodos que se
vivieron en la dictadura. Ya no hay que suprimir al adversario, que era
indomable. Hubo una generación, más allá de los extremismos, que no se doblaba.
Y como no se doblaba los hicieron desaparecer a los 30.000" lo que no es
todo tan cierto porque no pocos de aquellos que les llamaban románticos y
secuestraban, torturaban y mataban igual que los despreciables del terrorismo
de Estado a quienes decían combatir, llegaron a ocupar importantes posiciones
dentro de su gobierno.
Luego
de esta comparación poco feliz y exagerada, ya que ella ni siquiera hubiera
podido expresarse en libertad por aquellos tiempos del desprecio, cumplió con
su inveterado papel de victimizarse.
Es por
eso que descartó el arrepentimiento pese a todas las circunstancias que la
muestran en actitudes más que sospechosas acerca de sus bienes, rematando con
eso que, según dijo “con errores o aciertos había mejorado la vida de
millones en la República Argentina" lo que no es mentira, sobre todo la
vida de sus más cercanos.
Hasta
allí una sesión de la que la mayoría de los argentinos pudo enterarse, pero lo
grave sucedió después, en la siguiente, cuando el temor a los barrotes fue más
convincente para la conciencia individual, que la obligación patriótica de
reparar aunque fuera en parte el enorme daño que se hizo a la economía del
Estado, del que todos formamos parte.
No se aceptó
volver atrás con la recuperación de dineros malhabidos, protegiendo
ridículamente la deshonestidad casi generalizada, con la imposición de una
consagrada impunidad que es un insulto a la Democracia y a los que decentemente
la ejercen y la respetan.
Aunque
no perdamos las esperanzas: en la vuelta del proyecto a Diputados, puede que la
mayoría se incline por el ejercicio de dos actitudes poco frecuentes en los
políticos en general: la autocrítica y el amor a la Patria y a sus semejantes.
Alguna
vez el altruismo y la honestidad deben recuperar,
para el bien de la República, todo el terreno que han venido perdiendo…
LA OBRA PÚBLICA EN
CORDOBA
NO ESCAPA DE LAS SOSPECHAS
Merced a la generosidad política de De la Sota y luego con fuerte e
interesado apoyo kirchnerista, la firma Electroingeniería que partió
virtualmente y como se dice, de un modesto garaje barrial, se fortaleció
operativamente en Córdoba, consiguiendo
licitaciones cuando las hubo, de importantes obras, lo que más o menos
ocurriera también con Odebrecht la megaempresa con base en Brasil, país hermano
donde el ex gobernador y ahora empresario textil y modelo de ropa y con
apetencias presidencialistas fuera embajador argentino, lo que le permitió como
es de suponer, cultivar interesantes relaciones en el mundo empresario.
Electroingeniería se erigió como una de las constructoras más fuertes
del país haciéndose cargo de numerosas obras públicas, que contaban con
financiación nacional citando algunas como la Usina del Bicentenario de Pilar,
en nuestra provincia, cuya energía todavía estamos esperando, represas
hidroeléctricas en la provincia de Santa Cruz y otros emprendimientos.
Pero
Electroingeniería no se conformó con la obra pública porque en el exterior
constituyó algunas empresas “offshore” con el detalle que lejos está de ser
anecdótico sino virtualmente vinculante, que uno de sus titulares es Carlos
Fernando Bergoglio, familiar del Sumo Pontífice y en otra de esas empresas el
CEO es Jorge Neira, ahora detenido, una de las últimas incorporaciones a la
lista de arrepentidos ante el fiscal Carlos Stornelli.
Cuando
saltó a la notoriedad el tema de las coimas y algunos apuntaron a Odebrecht no
faltaron los altos funcionarios de la provincia que saltaran defendiéndose
cuando nadie los atacaba, sosteniendo por comentarios de la propia Odebrecht
que esa mega empresa a lo mejor había pagado coimas en cualquier otro lugar del
planeta, menos en Córdoba.
Eso
se llama curarse en salud, lo que no sería necesario si todo estuviera en orden
y no fueran a poner trabas en una investigación seria y profunda que se impone
tanto en el manejo de los dineros, como en la calidad de las construcciones
concretadas.
Se
hicieron cargo entre otros de la nueva sede del gobierno que bautizaron El
Panal aunque la imaginación popular le colgó el mote de “rallador de queso”.
El
tema radica en lo incómodo que debe ser para cualquier empresario sentirse
sospechado, mientras que para los políticos no del todo correctos, es una
especie de karma que los acompaña por méritos propios.
Realmente debo confesar que ignoro si la oposición provincial ha
elaborado algún pedido formal de investigación a fondo de la obra pública, porque
si no lo hizo, es imperioso que lo formalice.
Hay
íconos dignos de ser revisados en todos sus aspectos como lo son entre otras las
escuelas y viviendas edificadas, la nueva terminal de ómnibus, el repetidamente
construído Camino del Cuadrado y otras realizaciones envueltas en el sedoso
papel de regalo que aparecen en las campañas preelectorales, sin olvidar al
hotel de Ansenuza.
Y ya
que estamos, que alguien se moleste en profundizar seriamente y sin presiones
políticas, la verdad acerca de la EPEC, empresa que sigue siendo deficitaria y
tecnológicamente atrasada aunque se esconda esa realidad y en lo práctico sea
manejada más por el gremio que por sus autoridades.
Porque si de aventar sospechas se trata, nada mejor que un diagnóstico
certero siempre y cuando los médicos no sean demasiado amigos o comprometidos
con el paciente.
LA
VERGÜENZA DEL TRANSPORTE URBANO
Todo indica
que momentáneamente ha sido colocado en el freezer ese delirio de la FETAP de
llevar el precio del boleto del transporte urbano a 24 pesos, tomando como base
un supuesto estudio que habría realizado una universidad privada.
Pero sin
dudas frustrados por el rechazo popular, los empresarios apelaron a otro de sus
viejos y percudidos recursos, que es el de regular maliciosamente las
frecuencias para abaratar costos aunque el usuario se reviente en las indignas
esperas que incluso son un ataque al derecho ciudadano de viajar.
Y también
todo indica que el estilo aplicado al transporte de pasajeros de Córdoba cuenta
al menos y no digo la complicidad, pero con la indiferencia del poder
concedente que es la Municipalidad que por lo visto si no aplicó sanciones
previstas en las concesiones, es porque no controla en absoluto la calidad de
la prestación.
Los
empresarios han maniobrado de tal manera los corredores de las líneas, que han
modificado el cuadro que regía por uso y costumbre y han suprimido servicios en
algunos sectores por considerar que tienen demasiado, pero no han beneficiado a
los barrios más postergados sino que se limitaron a guardar las unidades o
sacarlas de circulación.
Es tal la
anarquía, que a veces y con alarmante asiduidad llegan a las paradas dos coches
juntos de la misma línea.
Si estamos
pagando la tarifa más cara del país para un servicio lamentable, el costo para
el pasajero se duplica por los problemas laborales emergentes de las tardanzas
y la supresión de coches en determinados recorridos.
Es demasiado
pedir que la Muni controle el servicio en serio y frente a los incumplimientos,
se sancione a los empresarios, a quienes les conviene más pagar las multas que
regularizar las prestaciones.
De todas
maneras si las cosas no se normalizan, el usuario tiene un mecanismo para
canalizar su descontento aunque en otros rubros la Municipalidad dedique
esfuerzos y presupuesto como lo son las cloacas, la iluminación o los desagues.
La gente,
ahora, premia o castiga con el voto.
MEGACAUSA
Y GENTE CON “RÓTULO VIP”
Es interesante analizar el lenguaje utilizado en la difusión de la causa
del Registro de la Propiedad de Córdoba, según el nombre de quien se
informe. En una denuncia que involucra a un alto funcionario del
gobierno es cuidadosa la utilización del modo potencial: trataría,
podría, parecería, sería, en correspondencia con el principio de inocencia y se
la presenta como “similar” a la megacausa, sin directa relación con
ella.
En otro caso se alardea de los más
de cien condenados como causa de “estafas VIP” y la palabra VIP, aceptada en
nuestro diccionario, proviene del inglés y es la sigla de la
expresión:“very important person”, traducida como
“persona muy importante”.
El
término alude a personajes famosos y destacados, políticos, empresarios, con
elevada posición social y económica. Estas personas reciben trato
especial en muchos lugares públicos, en función de su
importancia y también de su billetera.
Esta proclamada
lista de juzgados y condenados está integrada en su mayoría por empleados
sin cargo jerárquico, ordenanzas, tramitadores, secretarias, profesionales
sin fortuna (quizás lo VIP fue poder estudiar), amas de casa, vendedores de
celulares, albañiles, familiares, amigos y contactos telefónicos de otros
imputados.
En
contraposición la lista de denunciados que nunca fueron imputados ni
juzgados, se integra con altos funcionarios, miembros del gobierno y
sus allegados, o dueños de abultadas y conocidas cuentas.
No se
trata de clasificar personas, sino de acomodar los términos y el sentido común.
Todos sabemos que son estafas VIP. Entonces, o la
justicia empieza a buscar por otro lado a las personas VIP, o el título se cambia de VIP a VSP,
very simple person.
Mejor
aún sería más que justicia para el idioma y aunque parezca una tontera,
justicia para la justicia…
Otra vez el Santo Padre pidió el perdón terrenal …
EL PERDÓN DIVINO NO DEJA DE
SER ABSURDO ENCUBRIMIENTO
No es bueno que muchos curas violadores se
beneficien con la sacra impunidad en lugar de
rendir cuentas ante la Justicia de los hombres
Así como la recóndita intimidad de los templos esconde el enorme peso
que siempre ha lucido la Iglesia Católica a lo largo de la historia
condicionando al poder político e imponiendo presiones ideológicas, religiosas
y económicas, también el arcano oculta miserias humanas sacralizadas de
indemnidad, al resguardo de la Justicia terrena, esa de los hombres que juzgan
y condenan con garantías -o no en el caso de las dictaduras- del derecho a la
defensa.
En los estrados judiciales no basta con pedir perdón o arrepentirse
sincera o hipócritamente: los códigos de las comunidades organizadas se aplican
acordes con probanzas y otras exigencias determinadas en los encuadramientos
legales y las sanciones se resuelven en función de un proceso donde el fiscal
acusador en nombre de la sociedad, reclama el condigno castigo o considera que
cabe la absolución.
Allí no existe el perdón divino
que en muchos casos suele ser un delicado o burdo disfraz con el que se viste
la impunidad.
Se sabe que el Vaticano conocía
de los abusos sexuales en Pensilvania que trascendieron en estos últimos días,
al menos desde un lejano 1963 y que no hace mucho tiempo y desde la vieja
Europa, el Arzobispo de Dublín le expresó al Papa que no basta con pedir perdón
por los abusos, pese a que 3.420 sacerdotes terminaron condenados por la
autoría de hechos aberrantes contra menores entre el 2004 y el 2015, con el
detalle que 848 curas resultaron apartados del
servicio sacerdotal que es la “pena” más
dura que contempla el derecho canónico, en tanto los 2.572 restantes recibieron
otro tipo de sanciones, lo que equivale a evaluar que en dicho período fue
sentenciado por pederastia en procesos eclesiásticos un alucinante promedio de
casi un sacerdote por día.
Un tribunal
diocesano, allá por 1995 consideró culpable al cura Ilarraz y entonces la
condena de sus pares había consistido en su traslado a otra ciudad, aunque poco
después recibió como “castigo terrenal” un viaje de estudios al Vaticano, donde
vaya ridícula paradoja se licenció en Misionología con una tesis que versó
acerca de la labor de los niños en las misiones evangélicas. Y a su regreso fue
derivado a Tucumán hasta que en 2012 las víctimas decidieron ventilar sus penurias
y lo llevaron ante la justicia penal, por iniciativa de José Francisco
Dumoulín, exsacerdote quien dejó los hábitos y luego promovió las causas
judiciales por pedofilia en Paraná.
Uno de los
abusados agotó vanamente diversos recursos incluyendo la intervención del
Nuncio de aquellos tiempos para llegar al Sumo Pontífice procurando que
interviniera al Arzobispado de la capital entrerriana, sin obtener respuesta.
No es
cuestión de planteos religiosos, científicos ni jurídicos en la consideración
de un tema tan sensible que tiene costados y aristas delicadas y complejas,
porque sería entrar en tecnicismos dilatorios que aportarían más confusión que
claridad.
Pero un
enfoque se impone desde la perspectiva de la realidad y es el de replantear la
vigente obligación de castidad absoluta y su práctica virtualmente
inalcanzable, lo que llevaría a inéditas modificaciones de tamaña rigidez que
lejos está de una simple evaluación mediática: los claustros y la abstinencia
son incompatibles con la natural condición humana porque debe ser difícil la
indiferencia frente a las terrenas y corporales inclinaciones y apetitos.
¿Es que casi todo se resuelve en el sacro nombre del Señor?
Transformar a la deidad en
cómplice y encubridora, debe ser el mayor e imperdonable pecado que se puede
llegar a cometer.
UN NUEVO AUMENTO EN LA TARIFA DE LA EPEC
Todo indica que en breve se
aplicará un nuevo aumento en la ya casi impagable tarifa de la energía
eléctrica que provee la EPEC, la más cara del país y sin embargo la que debe
lucir un récord en materia de cortes algunos anunciados y otros no, y el mayor
nivel de conflictividad gremial pese a los elevados sueldos que cobra su
personal.
El incremento ya fue aprobado
por el ERSEP y en lo personal tengo la duda si ese organismo está para regular
el servicio y ponerse del lado del consumidor, o es un sello que solo se aplica
cuando hay que apoyar los ajustes que no siempre se dedican a la mejora de las
prestaciones sino para sostener la maraña administrativa de la empresa.
Ya se sabe que el pago de las
tan generosas como inmerecidas bonificaciones por eficiencia a su plantel directivo
no tienen determinante incidencia en el presupuesto pero por algo hay que
empezar, suprimiéndolas salvo en los casos que se trate de conquistas
sindicales.
Porque los caprichos, a los
cordobeses nos están saliendo demasiado caros, mientras se despilfarra en
publicidades estatales para intentar convencernos que el precio de la energía
eléctrica es justo, cuando en realidad no deja de ser otro de los despojos que
se ensaña con la gente.
Alguna vez la EPEC se pondrá
del lado del usuario, que es a la postre el obligado sostén de la empresa y
rehén, muchas veces, de los caprichos y presiones de la conducción sindical de
Luz y Fuerza.
El usuario no tiene por qué
solventar esos rubros que le son ajenos, pero demasiado emparentados con el
poder político de la provincia.