26 de septiembre de 2022

S.L.B.: PREVISIBLES CAMBIOS MINISTERIALES / LAS FIGURITAS, PRIMERAS ACTRICES / A LA ONU CON LOS COLADOS DE SIEMPRE / ANSENUZA, NO SÓLO PUESTAS DE SOL Y FLAMENCOS / PREPARACIÓN DE LA TEMPORADA TURÍSTICA / SIEMPRE VIGENTE MEGACAUSA Y SU ETERNIDAD / QUÉ OFRECE MIRAMAR / ¿HABRÁ SORPRESAS EN EL CASO DE BLAS? /

Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” nº 745 del domingo 25/9/22 emitida en dúplex por AM580 y la 88.5FM ambas dependientes de Radio Universidad Nacional de Córdoba.
 
 
LAMENTAMOS LAS DEMORAS
QUE   FUERON    INSALVABLES
 
   Inconvenientes de logística registrados en la preparación de todo lo concerniente a la realización de nuestra edición nº 745, sumados al inconveniente de no haber contado con los habituales sistemas de participación de la audiencia a través de los mensajes, demoraron más de la cuenta la publicación de las desgrabaciones  e ilustraciones del programa emitido este domingo 25 de septiembre de 2022. Rogamos en consecuencia y agradecemos a nuestros seguidores nos dispensen por las demoras y omisiones, que procuraremos no se vuelvan a producir.
                                                                                                                 
¡Son una “cuestión de Estado”!
CADA VEZ DESCENDEMOS MÁS EN LA CALIDAD DE
LAS DISTRACCIONES:  AHORA SON LAS FIGURITAS
 
   Los argentinos en los últimos tiempos hemos asistido primero con desorientación y luego, mientras nos íbamos acostumbrando frente a esa sensación que nos habían distraído con algunos factores, para desviar el pensamiento de la gente con relación a una dura realidad que nos tocaba vivir y soportar, fuimos mansamente caminando en fila hacia  los predios de las obligadas resignaciones asumiendo que nos habían charlado bobamente.
   Mire, la realidad, no me pidan ejemplos porque este programa dura dos horas que no alcanzarían para extraer de la memoria colectiva temas como autos para todos, fútbol para todos, carne para todos, planes para todos y unas variedad inacabable de productos virtuales que la demagogia exhibe orgullosamente en sus vidrieras.
   Y como es lógico, todo se termina en la vida y las ideas distractivas comenzaron su adelgazamiento, hasta llegar a la convicción nacional y no tan popular, que en la mayoría de los casos no eran otra cosa que charlatanería, porque el objetivo era sacarnos de la cabeza la pobreza, los caprichos del dólar, la maratón interminable que corrían y aún corren los precios, la desocupación, el drama de la inseguridad y esa atolondrada y descontrolada expansión del narcotráfico.
   Ya sé que sobrarán quienes sostengan que nos ocupamos siempre de los mismos temas, pero aquellos que lo estimen así, que tengan la bondad y el patriotismo de recordar, así esos temas no son los actualmente corrientes aunque estén más gastados que los chistes cochinos de Jorge Corona.
   Y como las cosas no pintan como para lucirse desde el poder central en apoyo de sus pretensiones atemporales en la cúpula, los creativos que diseñan campañas tanto intrascendentes como preelectorales, exprimieron su creatividad y tomando en cuenta que el mundial de fútbol está a un paso aunque geográficamente lejano, apelaron al vetusto argumento de los álbumes de figuritas que mire vea, le confieso, sabía coleccionarlas este periodista unos años antes de la mitad del siglo pasado.
   Para los memoriosos, desmiéntanme si hasta se vendían y coleccionaban figuritas de lata y los empresarios dueños del producto lo regulaban de tal manera, que al ofrecer premios atractivos por álbum lleno, siempre había una o dos figuritas difíciles que mágicamente aparecían una semana antes de vencerse los plazos impuestos para el ocaso de ese juego.
   Bueno… la parte histórica está toda dicha.
   Por eso ahora, actualizada en criaturas, niños, adolescentes, mayores y ancianos de las tres o más tendencias sexuales, la aparición tras tanto tiempo de las figuritas, aparte de asemejarse a un baño de añorada frescura, ha servido también para motorizar un consumo y el acceso a jugosas utilidades en la manipulación ¿de qué? de las figuritas del mundial de Qatar.
   Hasta aquí un vuelo rasante sobre una realidad que nos coloca en la disyuntiva de asumirnos como pavos, resignadamente charlados desde el poder o lacrimógenos nostalgiosos de tiempos pasados que no sé si fueron mejores, pero al menos eran distintos.
   Lo que revienta, indigna y nos hace lógicamente desvalorizar nuestro respeto hacia las autoridades legalmente constituidas a través del voto popular, es que en medio de una crisis como la que vivimos, la inteligencia no les alcance para solucionarla y hayan apelado a las figuritas, su comercialización y la trata emergente, llevándola al increíble rango de “cuestión de Estado”.
   Mire… en homenaje a Carlitos Balá, quien partió hace unas horas a los 97 años, una de las expresiones más puras y admirables del sano humor para todas las edades como lo fueron las figuritas y con una mentalidad así dispuesta, es para pensar que las autoridades que apelaron a esa exageración con las esquivas figuritas para distraernos, ni siquiera saben qué gusto tiene la sal…
 
La transgresión en el ADN argentino
LA ASAMBLEA DE LAS NACIONES UNIDAS RECIBIÓ A
UN PRESIDENTE Y A MEDIO CENTENAR DE TURISTAS

   En el marco de los titánicos esfuerzos que vienen haciendo las áreas especializadas en el manejo de nuestra economía nacional y popular, sobresale esa arraigada costumbre argentina de endeudarnos hasta niveles astronómicos, en la certeza que al kilombo lo tendrán que garpar los que vengan después.
   Es una tendencia, como lo estamos padeciendo, que nace en los niños cuando van al kiosko del barrio donde sus mayores compran cigarrillos o galletas y sacan al fiado caramelos caros y mejor si son importados, para que los paguen sus mayores cuando concurran al mismo kiosko a proveerse de lo suyo.
   No es llamativa por lo poco novedosa, esa marcada obsesión por darle la mano o sacarse una foto con algún notable mundial, como lo puede ser el presidente de los Estados Unidos y ni hablemos para el caso de conseguir una audiencia personal, fuera de los 5 segundos que tardan los besamanos en cualquier ceremonia a la que asistan.
   Lo mismo, esa sensual oportunidad de exponer ante la asamblea de las Naciones Unidas por su trascendencia mediática y más aún cuando es un país del tercer mundo como es el nuestro con miras al cuarto, y entonces hay que ir acicalado, simpático y sonriente para ser escuchado universalmente.
   Pero hete aquí que mientras altos dignatarios europeos se las arreglan viajando en aviones de línea, por lo general de su propia bandera, entre nosotros eso es de pobretones o de los que quieren ser noticia por su sencillez y humildad a la hora de los gastos del dinero de su pueblo.
   En esos casos las delegaciones extranjeras son reducidas, salvo el caso nuestro, que viajaron casi medio centenar de pasajeros encabezados por el Sr. Presidente de los argentinos, quien tenía la obligación funcional de ir al imperio del norte, acompañado por su Primera Dama y una ristra de funcionarios, especie de “colados de lujo” que seguramente no querían perderse el free-shop, la oportunidad de viajar en nivel de primera clase, gratarola y seguramente cobrando jugosos viáticos.
   La verdad y para no abusar de lo que algunos pueden calificar como posición de odio, no cayó simpática la inclusión en la nómina de esos viajeros de la Secretaria de Pestañas y la Subsecretaria de Uñas Esculpidas que se encarga de las manitas de Doña Fabiola.
   Pero para aquellos que puedan pensar en un abuso en materia de gastos, es bueno que sepan que el protocolo exige impecable presentación de los visitantes y si llevan una guitarra para entretener al pasaje durante la travesía, lo aconsejable es dejarla en la aeronave y no andar aullando con amigotes en tan calificado destino.
   Por último y al evaluar de acuerdo con lo informado por el periodismo internacional, toda esa parafernalia de funcionarios, elementos, colados, prescindibles y afines, que se dispuso para asistir a una asamblea trascendente, duele enterarnos que para escuchar a quien viajara con ilusiones de abrazos presidenciales, ocuparan -dicen- 37 butacas.
   O sea que ni siquiera asistieron todos los ocupantes del vuelo, seguramente entretenidos caminando a costilla nuestra por la Quinta Avenida, en abierto ejercicio y goce de un envidiable alpedismo.
   En cuanto a los acompañantes, aparte lógicamente del Sr. Presidente, los ministros, el Sr. Canciller que por suerte lleva traductor, intérprete y asesor en señas, la nómina por si le interesa a algún cordobés que no tiene ni para pagar el boleto del bondi, es la siguiente:- Primera Dama , Fabiola Andrea YAÑEZ - Subsecretario de Comunicación y Prensa, Marcelo Ariel MARTÍN - Jefe de la Casa Militar,  Alejandro Daniel GUGLIELMI - Directora General de Ceremonial de Presidencia, Verónica Daniela ALTAMIRANO - Director de Fotografía, Esteban COLLAZO- Director de Comunicación Digital, José Andrés BOSSIO - Director de Traducciones de la Cancillería, Walter Carlos KERR - Jefe de la Custodia Presidencial, Diego Leonardo SANDRINI - Funcionaria de la Dirección General de Ceremonial, Clelia Vanesa RIVERO - Funcionario de la Dirección General de Ceremonial, Alejandro COPERTARI - Funcionaria de la Dirección General de Ceremonial, Ana Lía IÑIGO CARRERA - Funcionaria de la Dirección General de Ceremonial, Camila Denise MURÚA - Funcionario de la Dirección General de Ceremonial,  Mariano Roberto CHINI - Funcionaria de la Dirección General de Ceremonial,  Vanesa Amalia LIO - Asistente Primera Dama, Carolina MARAFIOTI - Funcionaria de la Custodia Presidencial, Mariela Elizabeth ASSENNATTO - Funcionario de la Custodia Presidencial, Cristian Miguel FERREYRA - Funcionario de la Custodia Presidencial, Gastón Elías PÉREZ- Funcionario de la Custodia Presidencial, Héctor Alejandro ORONA - Funcionario de la Custodia Presidencial, Hugo David IÑÍGUEZ - Funcionario de la Custodia Presidencial, Ezequiel Gastón SCINARDO TENGHI- Funcionario de la Casa Militar, Walter Fernando ROVIRA - Funcionario de la Casa Militar, Juan Manuel ESPÍNDOLA - Funcionario de la Casa Militar, Cristian Alcides GIMÉNEZ - Funcionario de la Casa Militar, Diego Alejandro CAYUMAN - Edecán Presidencial, Cristian Andrés GALIMBERTI - Médico Presidencial, Cristian Luis MARTELLETTI - Funcionaria de la Dirección de Comunicación y Prensa, Paula Andrea CHAHIN ANANIA - Funcionaria de la Dirección de Fotografía, María Eugenia CERUTTI - Coordinador de la Dirección de Comunicación Digital, Camilo ACAVALLO - Funcionario de la Dirección de Comunicación Digital, Nicolás GIMÉNEZ - Coordinadora de Comunicación, Roxana BARONE- Funcionario de Comunicación y Prensa, Ian Pablo ASERENY - Funcionario de Comunicación y Prensa, Juan Rodrigo DIAMANT - Funcionario de Comunicación y Prensa, Tomás REDOTE - Director Nacional de Inteligencia Criminal, Damián Ramiro NEUSTADT - Secretario Privado del Ministro de Seguridad, Juan Manuel PÁEZ MANE-Vicepresidente de Asuntos Corporativos, Comunicación y Marketing, Santiago ÁLVAREZ- Funcionario de Logistica Aerea, Tomas VALDEZ WILLINGTON.
   Para que cada vez que deban viajar a cualquier parte por alguna urgencia y no les alcance el dinero ni las tarjetas para pagar el boleto, se acuerden de esta lista y después tampoco lo olviden a la hora de votar.
 
Inmejorables perspectivas
MIRAMAR SE APRESTA A RECIBIR EN ESTA
TEMPORADA, UN RÉCORD  DE  VISITANTES
 
   Esta laguna de Mar Chiquita que tengo a la vista ahora desde un balcón del Hotel Ansenuza es a nivel mundial la número 5 de las más grandes con 4.000 kilómetros cuadrados de superficie, y es realmente la más grande de Sudamérica. Por cada litro de agua concentra unos 70 gramos de sal para este ecosistema natural de los más investigados del planeta, dada su variedad de ambientes y la enorme diversidad de su flora y de su fauna.
   En cuanto a lo que varía con el tiempo su nivel de agua, es un fenómeno atribuible a la evaporación.
   Allá por marzo del año 23 -casi un siglo atrás- y como reconocimiento y homenaje al emprendimiento hotelero encargado por la familia Rosso, se dispuso llamar Mira Mar al poblado ribereño, dos palabras separadas, porque el establecimiento que sobresalía en materia de infraestructura y servicios miraba hacia la laguna.
   Y dos temas para el anecdotario: en uno de los muelles vecinos había cabinas de madera, privadas y sin techo, donde los turistas se aplicaban fangoterapia y tomaban sol con un llamativo detalle: lo hacían, sin ropa, desnudos.
   Y otra instancia trágica vivió Miramar en la noche del 2 de diciembre de 1978 en que todo se preparaba para la inauguración de una casa de juego. La lluvia torrencial y el viento huracanado con ráfagas de 140 kilómetros por hora derribaron las defensas del hotel Casino y en cinco minutos anegó el edificio hasta un metro y medio de altura.
   Fueron tales los daños que el casino tuvo que ser trasladado primero al cercano Hotel Viena a donde también lo afectó otro desastre y tuvo que ser instalado definitivamente en Villa Carlos Paz.
   Mi agradecimiento a la escritora Mariana Elizabeth Zapata, detallista historiadora lugareña de cuyas publicaciones pude extraer interesantes detalles.
   Y un reconocimiento más que especial a Silvina de Lujan Arrieta, responsable de Cultura, Turismo, Deportes y Ambiente de Miramar por su calidad de anfitriona que nos ayudó también en la presentación del libro -en realidad un ensayo- titulado “La sociedad y los miedos”, de mi autoría junto al calificado escritor y experto en Seguridad, Marco Antonio Séptimo y en esta visita realizada a esta población ahora con más de 4.000 habitantes orgullosos de su suelo. Aparte, la hermosura del Hotel Ansenuza con su indiscutible nivel internacional, tan recomendable.
 
La conversación entre la titular del área de turismo, cultura, deportes y ambiente, doña Silvina de Luján Arrieta con el periodista Gonio Ferrari, puede ser consultada en la sección de audios, en  la  parte superior, columna  derecha  de  este   blog.
 
¿Elevado costo político?
DEMORÓ  DEMASIADO  LA  DEPURACIÓN DEL
GABINETE MINISTERIAL DEL CORDOBESISMO
 
    “Parece mentira que justo ahora, cuando más necesitamos ofrecer a la gente una buena imagen, integral, de todo lo que hacemos, nos vienen a suceder todas estas cosas”, palabra más o palabra menos se lamentaba amargamente un exponente del “cordobesismo” no tan encumbrado en la escala jerárquica, pero consecuente con todo lo que se venía haciendo, según también se compungía, por la gente en la intención de ayudar a superar los momentos de crisis que estamos viviendo.
   La pandemia con sus lamentables consecuencias, entredichos, divergencias en cuanto a los métodos aplicados, discusiones sobre encierros si y aislamientos no, barbijos si y barbijos no, bailongos si y bailongos no, se fue tejiendo un par de redes en la que cada uno se jugaba por sus propias convicciones.
   La pandemia está pasando, pero deja una estela de muerte, dolor, luto, secuelas y diferencias insuperables entre los cultores de las distintas posiciones que aplicó el gobierno provincial en su lucha contra el Covid.
   Fue ejemplo, entre otros, la ímproba tarea que se realizara en el Hospital Rawson por citar solo uno, contrapesando algunas improvisaciones concretadas sin dudas por la falta de experiencia en situaciones tan inéditas para nosotros como lo fue la letal pandemia que se cobró alrededor de 150.000 vidas en nuestro territorio.
   Sin embargo, es para pensar que en ese cúmulo de preocupaciones y situaciones dramáticas, jugaron a las escondidas ciertos elementos negativos que al transformarse en noticia y alcanzar estado público, fueron pesados instrumentos negativos que empalidecían buena parte de lo positivo que se hacía en otros ámbitos como los caminos, puentes y otras obras no prioritarias ante la situación sanitaria, pero imprescindibles para apoyatura de una anticipada como onerosa campaña preelectoral con más de un año de anticipación.
   Y ese loco devenir de la situación y de los apremios comenzaron a saltar los fusibles dentro de un incomprensible marco de silencio desde el poder, como si fuera carente de responsabilidades: en la policía provincial un desastre por la intromisión de elementos indeseables en sus filas, autores de numerosos delitos incluyendo crímenes, ocultamiento de pruebas y otras anormalidades que el tiempo fue descubriendo.
   El repudiable mutismo pasó a sobresalir por encima de lo positivo, más aún cuando las estadísticas que se divulgaban acerca de la delictuosidad en Córdoba nada tenían que ver con una realidad que todavía no ha podido ser modificada, pese a los millones de pesos que se malgastaron en equipamiento, movilidad, tecnología y otras erogaciones aparte de la incorporación de personal, mientras la verdad del crecimiento exponencial del hampa no se detenía y los silencios se acentuaban.
   Vinieron los incendios que se multiplicaron ante la falta de prevención o el descubrimiento demasiado tardío de los focos.
   El dramático y letal caso de la maternidad provincial, donde al parecer existió una conjura de silencios hasta que el dolor de quienes sufrieron la pérdida de seres queridos, recién nacidos, hizo estallar una verdad inexplicablemente escondida.
   ¿Para qué? se pregunta mucha gente que por una cuestión de sensibilidad no alcanza a comprender que para los malos políticos, es más importante su campaña precomicial que el respeto mismo por la vida.
   Cada día surgen novedades en torno de ese tema que también cada día menos nos sorprenden, por su reiteración, incluyendo ese tema del que tanto se habla a media voz, de exagerados gastos en el área de Cultura, descubiertos demasiado tarde como muchas otras situaciones.  La verdad, está visto que sin hacer mención a otras cuestiones tan conflictivas como las apuntadas, basta para definir el perfil de quienes a toda costa y a cualquier precio incluyendo los maliciosos silencios y amparando la ineptitud de algunos encumbrados, dejan pasar las cosas con la liviandad de una brisa.
   Sin embargo, en este mundo donde la tecnología todo lo descubre aunque con tardanza y ciertos límites, la verdad es lo que impera al final de cuentas, para desesperación de quienes siguen aferrados a la sensualidad del poder.
   Ellos debieran tomar en cuenta conceptos de Morón Alcain, quien con relación al poder sentenció que “Se dominan las cosas, las circunstancias y, lo que es mucho más, a los hombres; se goza de esa sensación de estar por encima de los demás, de tener sus halagos, sus privilegios… El poder fascina y enceguece al que es dominado por él”.
   Así de simple…
 
Para pensarlo seriamente…
LAS  CAPRICHOSAS  DECISIONES  TOMADAS
EN LA PROLONGADA  CAUSA DEL REGISTRO
 
  Siguiendo el hilo de árbitros y decisiones se vienen a la mente ejemplos de la causa del Registro de la Propiedad de Córdoba, como uno en el que un Juez escribe que reconoce la inexistencia de pruebas en contra de los imputados, aclarando que ni siquiera hay testimonios en su contra, otro en el que se acusó a alguien de apropiarse de un inmueble que era de su legítima propiedad u otros en los que los sospechados nunca pisaron el lugar de los hechos.
   En todos ellos, la decisión judicial fue la prisión. 
   Dice la Real Academia Española que una decisión es una resolución que se toma en una cosa dudosa y agregan los textos de derecho que en caso de las judiciales,  las leyes, Códigos y Constitución regulan con claridad el camino que deben seguir. 
   Aun cuando poco se entiende, en los ejemplos citados, qué duda puede haber cuando no hay pruebas, cuando una persona ya es dueña o cuando alguien no estuvo en el lugar, en las decisiones tomadas no se respetó el camino de la prohibición de prisión por las dudas.
   La palabra decisión fue empleada por organismos actuantes en la causa, así el Servicio de Paz y Justicia adujo que las decisiones adoptadas debían ajustarse a los parámetros legales porque de lo contrario el accionar judicial podría derivar en que el Estado Nacional incurriera en responsabilidad internacional de violación de derechos ( lo que ocurrió) y la Procuración de la Nación y la Corte Suprema de Justicia de la Nación sentenciaron que la decisión no se ajustó a las garantías y privó a los imputados de la posibilidad de defenderse, concluyendo que fue arbitraria. 
   Tan claro como el agua, la duda es  ¿de qué manera la justicia cordobesa va a arreglar estas malas decisiones de la causa? 
 
El precio de priorizar la campaña…
UNA CURIOSA VISIÓN DE LA INSEGURIDAD
CRECIENTE  QUE  ESTAMOS  PADECIENDO
 
   Realmente sorprendieron las declaraciones de quien ahora es el ex ministro de Gobierno de la Provincia, quien seguramente cumplió una orden impartida desde arriba porque en este aspecto no existen las sutilezas ya que el Dr. Mosquera horas antes había anunciado de manera casi rimbombante, que no pensaba renunciar.
   Su fracaso funcional en lo que seguramente fueron sus buenas intenciones de adecentar a la policía provincial, fue la chispa que de todas maneras ya no era necesaria en cuanto a detonar una situación que llegó a niveles insostenibles.
    No se puede, con una enorme carga de soberbia, seguir asegurando en base a estadísticas mañosas y poco serias, que en Córdoba vivimos un cuasi paraíso en materia de seguridad, cuando el hampa se rie de la autoridad, de la justicia y de la ciudadanía, mientras el narcotráfico cada día nos aproxima más a la situación incontrolable que padecen los rosarinos.
   Haber puesto alguna vez como ejemplos los índices delictuales de Chicago, de Nueva Orleans o de otras lejanas geografías, es una burda y pretendida manera de desinformar, porque para que lo sepa por si no lo supo el ministro ahora cesante, vivimos en Córdoba y para el caso importan un carajo las realidades ajenas.
   Se fue quien aseguró que no pensaba en irse, dejando tras de si una estela de dudas no en cuanto a su honestidad personal sino al caudal de conocimientos que se requieren para manejar y modificar una situación de tanto deterioro funcional como la que reina en la policía provincial.
    Pero no hay caso: mientras la policía, el ministerio respectivo o la gobernación del cordobesismo no limpie la mugre de adentro, será muy complicado tan siquiera intentar limpiar la mugre de afuera y a mi modesto entender, por mera intuición y algo de experiencia de vivir sobre ascuas en una ciudad que es maravillosa, podrán gastar más dinerales, endeudarnos si cabe a un nivel superior al actual e intentar mil fórmulas mágicas, pero nada mejorará, mientras no tengamos una conducción inteligente que diseñe, legisle, aplique y controle una política integral de seguridad.
   Mientras tanto, todo lo demás que veamos brillar en los actos inaugurales o puestas en marcha de nuevas flotas, serán solamente espejitos y vidrios de colores.
 
Poco a poco se diluye la farsa
ESTÁ CADA VEZ MÁS CERCA LA “VERDAD
REAL”  EN  TORNO  DEL  CRIMEN DE BLAS
 
   Pocas palabras para una situación que está al borde de eclosionar y descorrer el espeso telón de dudas, acusaciones, ocultamientos, silencios lamentables y otras actitudes repudiables en torno del crimen del que fuera víctima el joven Blas Correas a manos de un piquete de la policía provincial, uno de cuyos integrantes jamás debió ser autorizado a estar en ese puesto y esa función y menos con arma en su poder, por su condición de haber cometido un delito, tengo entendido, de instancia privada.
   Solo voy a permitirme recomendar el seguimiento de lo que sin dudas habrá de declarar un alto oficial policial dado de baja o en situación similar, de apellido Cumplido, quien nunca fue citado a declarar ante la Justicia con relación al crimen cometido por integrantes de una patrulla y el posterior ocultamiento y milagrosa aparición de un arma inservible con la que se buscó empiojar con propósitos “salvadores”, le llamemos, la comprometida situación de los uniformados.
   Téngalo presente, porque es probable que en las próximas horas ese policía exonerado, de apellido Cumplido, puede ser la llave que abra el candado que permite acceder allí,  donde se esconde una de las más tenebrosas tramas urdidas para escapar de la ley, por parte de quienes fueron puestos por el poder y la sociedad, para resguardarla.
 

  

18 de septiembre de 2022

S.L.B.: ENERGÍA AVASALLANTE DE LA JUVENTUD A UN PASO DE LA PRIMAVERA - NUEVO FRACASO DE LOS ENCUESTADORES PREELECTORALES - LA HIPOCRESÍA NO ES BUEN CAMINO HACIA LA CONCORDIA - MEGACAUSA Y FÚTBOL CON CIERTAS SEMEJANZAS - PÉSIMA COSTUMBRE DE HACER SINÓNIMOS POBREZA Y DELINCUENCIA - ALARMANTE CEGUERA DE NEGAR UNA REALIDAD QUE OPRIME - ¿LA INFLACIÓN ES UNA CONDENA A PERPETUIDAD?, ETC.

Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” edición nº 744 del domingo 18/09/22 emitido en dúplex por la AM580 y la FM88.5 ambas dependientes de Radio Universidad Nacional de Córdoba.
 
Dicho sea con algo de envidia…
A POCAS HORAS  DE LA  PRIMAVERA, ASOMA
LA AVASALLANTE ENERGÍA DE LA JUVENTUD
 
    Me provoca un enorme placer evocar las expectativas con que esperábamos cada 21 de septiembre, porque eran mayores que para la nochebuena, el año nuevo o el propio cumpleaños. Y más allá del clásico picnic junto al río, del acné, de la primera curda con sangría o del piquito que robamos a la compañera de banco, estaba aquella maravillosa actitud de saberse joven, mucho más joven que los anticuados y vetustos viejos de 30 años.
   Esperábamos ese día, el Día de la Primavera, el Día del Estudiante, sin conocer ni sospechar la preocupación de alguna profesora, que debía ingeniárselas para contener a esa banda mafiosa de 40 vándalos que aguardaban de ella algo más que el pancho, la medialuna y la coca, sino a veces descubrirla como mujer, hipnotizados en el escote o en las piernas.
   Bariloche estaba demasiado lejos, no era moda y entonces el Parque Sarmiento, los Pozos Verdes, la pileta San Cayetano, las costas del Lago San Roque o las orillas del Suquía en La Calera eran las accesibles metas de nuestra liberada, evidente, húmeda e irrefrenable revolución hormonal.
   Nadie por entonces tenía la idea del paco, del raviol ni del porro, sino la fijación del Saratoga o el Wilton a escondidas y del porrón, en los tiempos que el fernet era un remedio.
   La mayoría de los enfervorizados varones asumía en la secundaria -esperando que atendiera el farmacéutico- la sonrojada vergüenza de comprar un preservativo, dentro de la mayor ignorancia acerca de su colocación y uso práctico.
   ¡Eramos tan pavos!, como inequívoco signo de nuestra edad.
   Y ellas tan bellas, esquivas y deseables, como lo imponía nuestra libido en los gloriosos tiempos de su crecimiento y explosión.
   Pero ahora, antes de encarar la inevitable tarea de plumerear el nicho y por una cuestión de nostalgia, asumimos pese a todo la íntima llegada de la mejor estación del año, imaginando en sueños que los almanaques y los relojes se hubieran detenido.
   Porque es una cuestión de saber vivir.
   De saber crecer y madurar con dignidad, porque es una afrenta a los tiempos empeñarnos en ser eternamente jóvenes.
   Lo trascendente, es evitar la pena de sentirse viejo.
   Por esa juventud de hoy a la que miramos con el amor y el respeto de la inútil envidia, mi cariño y el brindis jubiloso.
   Como todos los jóvenes se lo merecen.
   Y que nosotros, alguna vez, también lo merecimos.
 
Encuestas preelectorales
FORTALECIENDO  UNA  CLARA  TENDENCIA
REITERARON SU INCLINACIÓN AL FRACASO
    Alguna vez aprenderemos a diferenciar dos resultados ampliamente diferentes en cualquier competencia, cuando debamos calificar a los pronósticos como errores, equivocaciones, procedimientos inadecuados o lisa y llanamente evitables papelones, como lo han venido siendo todos los sapos perpetrados por organizaciones dedicadas a las encuestas preelectorales a la luz de una realidad que pese a todo, algunos aún se empeñan en pasar por alto.
   Es claro: una cosa es errarle por algunas décimas, dos o tres puntos y muy diferente cuando con relación a los vaticinios, el resultado final muestra una diferencia casi alevosa que supera los 15 puntos.
   El más cercano de los ejemplos es lo acontecido en la elección de intendente municipal en un pueblo geográficamente alejado de las grandes urbes como lo es Marcos Juárez, en nuestra provincia, histórica cuna de la coalición que en su momento llevó a la presidencia de la Nación a Mauricio Macri, donde los rentados agoreros habían vaticinado en el peor de los casos eso del “empate técnico” que es una manera pretendidamente elegante de cubrirse de un error cuando se decide por escasas diferencias.
   Los casi 17 puntos de ventaja que obtuvo la fuerza política nacida allí, fue un duro golpe que le asestó el electorado a los gurúes que sostenían la existencia de cierta paridad que les permitía, salieran como salieran los números, mantenerse en un nivel medianamente decoroso ante la ciudadanía.
   Un resultado adverso que sembró un mal disimulado pánico en las filas de la corriente peronista kirchnerista e hizo estallar el entusiasmo de quienes por la calidad de su gestión, obtuvieron un resonante apoyo pese a la tenaz y onerosa campaña que se instrumentara y solventara desde el Panal, en realidad pagada por la ciudadanía más que por el partido político.
   Una demostración más, como si hubiera sido necesaria, que los mecanismos de las encuestas siguen mostrando más fisuras que coherencias y llevan a pensar con mayor firmeza, que las estimaciones previas tienden a satisfacer a quien las paga como que si al ser sinceras anticiparan una derrota, les impediría cobrar por tal servicio.
   En los últimos tiempos, esa impresión es la que ha venido ganando terreno de la mano de una verdad indiscutible, basada en una realidad que con anticipación y con cierto grado de eso que le llaman picardía política, se hubiera pretendido modificar.
   Y dentro de la maraña de pronósticos que se instalara en la mente ciudadana antes de las elecciones en Marcos Juarez, es justo destacar que la única encuestadora que acertó fue la consultora cordobesa Feedback liderada por Gastón Toro que anticipó la victoria de Majorel.
   No dejó de ser un baño de frescura en un panorama altamente competitivo, donde por lo general y a la luz de las experiencias, se anticipan triunfos como inducción al voto, aunque luego la realidad los despierte de un sueño que termina en pesadilla.
   Y si no, que alguien le pregunte al cordobesismo cuántos millones -que pagamos todos- les salió la joda.
 
Vocación por la incoherencia
NO HABRÁ DIÁLOGO NI ACERCAMIENTO SI
SE INSISTE EN PRACTICAR LA HIPOCRESÍA
 
   La novela con muchos ingredientes de suspenso, imaginación, creatividad e inventiva circula por distintos carriles de la comunidad argentina con dispar aceptación en cuanto a la veracidad o no de todo lo que se declara, de lo que se investiga y de las conclusiones que con cuentagotas están surgiendo y tomando estado público.
   Para muchos es un tema serio, preocupante, está en duda la calidad de protección para los más altos funcionarios y por otra parte se especula en que todo se armó con el propósito de llevar la situación a un límite tal de dudas, que electoralmente beneficien al oficialismo, tan golpeado y jaqueado en estos últimos meses por la inflación descontrolada, la caída del poder adquisitivo de nuestra moneda en un 70 por ciento según lo que sostienen los especialistas, la creciente e impune inseguridad con elevados índices que jamás nos habían tocado padecer, la desocupación, el crecimiento exponencial del narcotráfico y otros conflictos emergentes de la delicada situación económica que venimos padeciendo.
   Así las cosas como en toda puesta en escena, existen los libretos impecables pero también debemos dar espacio y atención a las sobreactuaciones y en tal sentido no son pocos los analistas que han tomado como simbólica muestra, una de las últimas expresiones de quien aparecía como víctima de una conjura para terminar con su vida y que vaya a saber por qué circunstancia, el sicario no exhibió calidad de tal sino que con su precariedad operativa y las imprudencias que habría cometido en la preparación del atentado, es casi como que ya hubiera confesado, sin presión externa alguna, la autoría del que fue intento de magnicidio con una pistola poco operativa.
   Sicarios eran los de antes, refería un novelista, al asegurar que nunca actúan en soledad sino que tienen apoyo para terminar con el encargo, en caso de alguna falla que impidiera la concreción de la tarea por la que cobraron una parte, y el resto se paga cuando se confirma el resultado letal.
   Es raro que aparezcan protectores divinos en esos momentos tan espantosos y cruciales porque si esa fuera la norma Kennedy se hubiera salvado, John Lennon también, Rucci otro tanto y hay otros varios ejemplos que nos refiere la historia más reciente.
   Pero agradecer la buena fortuna a Dios y a la Virgen, suena más a una injuria que a un milagro.
   ¿Por qué tal percepción?
   Simplemente porque si se quisiera incorporar esa afirmación divina a los campos de la hipocresía, sería bienvenida solamente por el rigor histórico del juicio que merecería quien la utilizara en beneficio propio.
   Basta con recordar esas asquerosas imágenes que recorrieron el mundo mostrando a militantes opositores tomando como baño para sus meos y sus cacas, el atrio del templo católico, apostólico y romano más venerado del país, en desacuerdo con ciertas medidas que se anunciaban, con las que no estaban de acuerdo, en tiro por elevación contra el bueno de Francisco.
   Porque a lo mejor por no saberlo -en este caso no cabe ni una pizca de ignorancia- que en esa casa, la casa de Dios, la Catedral porteña, habitan precisamente Dios y la Virgen, quienes con su bondad y el sentido cristiano del perdón, seguramente pasaron por alto una ofensa tan inmerecida.
   La hipocresía no es el mejor camino para llegar a la concordia imprescindible que aleje a los fantasmas de la desintegración social.
 
Megacausa del Registro de la Propiedad
SON CAMPANAS DE MADERA  LAS  QUEJAS
POR LOS ABUSOS DE PRISIÓN PREVENTIVA
 
   Un ingenioso texto compara al más popular de los deportes, el fútbol, con los conceptos de Justicia y Poder Judicial. Así expresa, por ejemplo, que el Poder Judicial está representado por el árbitro y los jueces de línea, el primero como el máximo representante de la justicia y los otros preservando los límites para que el juego no escape de su línea y, en situaciones dudosas, operando como consultores para introducir una cuota de deliberación en la decisión judicial.
   Dice que ningún juez es infalible, y que grandes son los árbitros, no cuando no cometen errores, sino cuando después del partido así lo reconocen. Pero lo más importante de todo, es que el árbitro no sólo debe aparecer como justo sino que además debe serlo. Si existe la sospecha de que el soplapitos ha sido "comprado" ya sea por una mafia o por un gobierno, el partido de fútbol está arruinado antes de su comienzo. 
   Si tomando ejemplo de tal texto, hacemos un pequeño paralelo con la causa del Registro de la Propiedad de Córdoba, nos encontramos con varias situaciones irregulares como la prisión preventiva sistemática en lugar de la excepción; la comisión especial para juzgar en lugar del sorteo; testigos anónimos en lugar de confrontables, condenas por convicción en lugar de pruebas o impunidad de funcionarios en lugar de igualdad ante la ley, por mencionar algunas.
   Dado que en la causa tanto organismos nacionales como internacionales han señalado errores (o que se escapó de la línea), sería bueno que estos árbitros judiciales, no infalibles, pudieran revisar lo actuado, y ser grandes, al reconocerlos.
   Lo grave no sería el error, sino que el árbitro haya sido "comprado", porque entonces la causa, (como el partido) está arruinada desde antes de comenzar.
 
Como si todos los pobres fueran ladrones
MALA COSTUMBRE DE HACER  SINÓNIMOS
ENTRE POBREZA E IMPUNE DELINCUENCIA
 
   Cometer la torpeza y la injusticia de hacer sinónimos entre pobreza y delincuencia aparte de ser una posición repudiable desde el punto de vista humano, desnuda un precario conocimiento de la realidad, y es imposible ocuparse precisamente de una realidad que nos agobia y no encuentra eco en materia de soluciones por parte del Estado, que falla en su ineludible obligación protectora.
   Es cierto que los mayores padecimientos se abaten sobre los más vulnerables económicamente hablando; sobre los sectores marginales de la sociedad, pese a que en parte con el indigno mecanismo de los bonos que reemplazan a la dignidad del esfuerzo, resulta algo atenuada la situación, y eso que en un país tan rico como lo es el nuestro, cabe aquello que “nadie se muere de hambre” porque aún no se han dado casos -tengo entendido- de desenlaces fatales no por comer menos, sino directamente por no comer, como sucede en otras geografías donde el hambre es elevado factor de mortandad.
   Atribuir a manera casi de disculpa por la propia incapacidad de aportar soluciones, que la delincuencia no es tan grave ni aumenta en Córdoba sosteniendo que tenemos la tasa delictiva más baja del país, es ofender la inteligencia de un pueblo que ya agotó su paciencia en materia de esperar una mejoría en cuanto a no saber, cada vez que el ciudadano sale a la calle, si va a regresar indemne, un pensamiento que comparte toda la familia en cualquier sector de la provincia, ahora una gigantesca zona roja donde reina el hampa.
   Ya cansamos con el gastado argumento que de nada sirven las onerosas inversiones en armamento, tecnología, movilidad y otros elementos que dicen son para combatir el delito, mientras no se diseñe, legisle, aplique y controle una política integral de seguridad que comience por la profesionalización de la fuerza azul, abandonando su sempiterna condición de bolsa de trabajo para los recomendados del poder.
   Lo peor de todo es que el funcionario encargado del área, tuvo la delicadeza de pronosticar algo positivo, al sostener que disminuyendo la pobreza en la inminente mejoría de la situación del país, también declinaría el accionar de los marginados de la ley.
   Si eso no es hacer sinónimo de pobreza con delincuencia, estamos todos locos, ofendiendo a la condición humana, el sacrificio, el sufrimiento y la honestidad de quienes siguen siendo pobres pero respetuosos de la ley.
 
Creen que negándolos, no existen…
ALARMANTE CEGUERA, JUSTIFICACIÓN DE
SILENCIOS OFENSIVOS E IMPERDONABLES
 
   Llegará el domingo en que en lugar de ocuparnos de algún episodio ilegal protagonizado por policías hablemos de cuestiones positivas, porque la depuración de la fuerza hubiera conseguido limpiar la mugre interna y es posible así encarar la lucha frontal y sostenida contra la delincuencia externa, reinstaurando aquella seguridad que supimos gozar años atrás, antes que factores desencadenantes como el narcotráfico y su impunidad, nos cambiaran la vida.
   Nos cambiaron los hábitos a quienes laburamos dignamente mientras que a otros vivillos que pese a ser como los esquimales que no transpiran nunca, gozan utilidades malhabidas, ventajas y otras prerrogativas que reciben, en elevada medida con el conocimiento de las autoridades y su selectivo vistagordismo.
   Hace pocas horas el ministro de seguridad, aunque debiera ser “de inseguridad” porque es lo que predomina, habló de infiltrados en la policía provincial a quienes cargó la responsabilidad de acciones delictivas recientes.
   Entonces es para preguntarnos, con mucho de inocencia cargada de candidez, cuáles son los filtros que fallan; quiénes son los dueños de los agujeros negros por donde se zampan -porque no cabe otro término- los que después resultan el contrapeso con relación a los probos, sacrificados, valientes y arriesgados policías que es de esperar sean mayoría en la fuerza.
   Si uno de esos hombres fue quien asesinó a un adolescente y casi desencadena una masacre, fue autorizado a estar en la calle y con arma, pese a un juicio en su contra por haber delinquido.
   ¿Se sabe quién le firmó el pasaporte a su impunidad?
   Sería lamentable que la responsabilidad para estos tremendos casos hubiera sido del área Recursos Humanos, porque es la Justicia, ahora, la que debe interrumpir ese flujo de equivocaciones que tanto perjudican a la sociedad cordobesa.
   El ministro Mosquera tiene en sus manos los instrumentos para ahondar en la búsqueda de los verdaderos responsables de la debacle institucional de la policía, aplicar los correctivos necesarios y luego recomenzar una ímproba tarea de saneamiento, en la calidad humana de todos los integrantes de la institución, desde el último de los “juanes” hasta la femenina cúpula.
   No es posible que los cordobeses tengamos que seguir soportando la inacción, las protecciones mal entendidas, las omisiones tan evidentes y el percudido discurso que la inseguridad dominante y descontrolada es sólo una sensación.
   Deberá obrar con premura, porque esa sensación a la que aluden, es probable que reviente las urnas cuando quienes la están descuidando pretendan eternizarse en un trono que no merecen.
 
Si es por “crecimiento”, el rubro principal.
¿SERÁ QUE LA INFLACIÓN ES UNA CONDENA
A PERPETUIDAD QUE DEBEMOS SOPORTAR?
 
   De vez en cuando en los momentos de ocio pero de pensamientos hacia adentro, nos cansamos de preguntarnos cómo vivíamos cuando no existía en nuestras vidas ni en el vocabulario corriente de los argentinos esa palabreja que ahora nos quita el sueño, devora los ahorros, desencadena quebrantos, destruye familias, escamotea miles de viviendas, obliga a vender autos propios a precio vil, lleva a remates, endeuda pueblos, capitales, provincias y termina azotando al poder nacional, de cualquiera de los signos políticos que nos tocaran en suerte últimamente y desde mediados del siglo pasado.
   Esa palabreja de solo 9 letras nos quita el sueño, adelgaza los bolsillos, mueve a privaciones y lo que más motiva es el insulto a los inútiles que no encuentran la manera de neutralizarla para bien de la recuperación nacional y a lo mejor también popular.
   Se han hecho decenas de experimentos y el único que dio resultado aunque ahora lo estemos pagando, fue el estilo implantado por el inefable Domingo Cavallo, prócer para muchos que lograron licuar sus abultadas deudas con el fisco y que le llamaron “convertibilidad” que duró algunos años.
   Y esa puta palabreja que por cábala a veces no queremos ni pronunciar, es “inflación”.  
  
Tengo entendido que lo sostiene el diario Clarín y por ende sospechado de inexactitud especialmente por el oficialismo gobernante y sus seguidores más fanatizados y consigna que para el presupuesto del 2023, año electoral, habrá otro “plan platita” porque el gobierno dispondrá un incremento en los planes sociales que supera el 100 por ciento, y creo que pocos se aventuran a pronosticar que asimismo algo instrumentaría el poder -como parte de la campaña proselitista- para la creación de demanda laboral por fuera del Estado.
   En definitiva y para ahorrarnos cálculos y especulaciones, nos abruma una verdad tan incontrastable como la dura sentencia de los números: en 1.000 días de gobierno del Dr. Alberto Fernández, la inflación nacional & popular que nos castiga creció un 221 por ciento.
   Y a tal exactitud, que la discuta Mongo…