Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio
Ferrari en su programa “Síganme los buenos” emitido el domingo 18/08/19 en
dúplex por AM580 y la FM88.5 ambas de Radio Universidad de Córdoba.
Frente
a lo impensado (en ambas veredas)
SEMANA DE
INCERTIDUMBRES Y DE
DUDAS
DESPUÉS DE LAS PRIMARIAS
No me vayan a salir con que cualquier
argentino podía acertar en los pronósticos, a la luz del nuevo fracaso padecido
por los encuestadores, cuyas bolas -en este caso de cristal- tuvieron serios
cortocircuitos o no se obró con la seriedad necesaria a la hora de las
consultas que se hicieran tanto personales como telefónicas o aplicando otros
mecanismos de auscultación de la voluntad ciudadana.
Ese tema de los fracasos es una repetida
situación pese a lo cual se dan dos fenómenos: uno, la forma de mirar hacia
otro lado por parte de los responsables de números alocados, como su sempiterna
costumbre de hacer como si nada errado hubiera sucedido para poder seguir en
pie y facturando, con miras a la próxima consulta electoral.
Y si en alguna medida las adivinanzas
-porque en realidad pasaron a ser eso- generaron inquietudes varias, algunas
marcadas y otras que prefirieron tomarlas silenciosamente como descabelladas,
produjeron en la sociedad un efecto no deseado que fue innegable componente: la
desorientación.
Ya el lunes el dólar se enloqueció o lo
enloquecieron, los formadores de precios se relamían a la hora de darle a la
maquinita rotuladora, los especuladores cerraron sus ventanillas de venta y les
pusieron el cartelito de compra y después de mucho tiempo la brecha entre el
verde comprador y vendedor llegó a niveles impensados, cuando hasta pocas horas
antes era la habitual de entre dos pesos y algunas monedas más.
Todo en cuanto al terreno de la economía, en
un análisis lejos de lo técnico, sino basado en recorrer calles y preguntar
precios.
Hasta una petrolera subió de prepo sus
precios y empujó los combustibles hacia arriba y bien sabemos que es un
componente trascendental en la cadena que allí se inicia para nuevas tarifas y
ajustes.
La cuestión política se calentó y hubo de
todo: desde las posturas respetuosas de la democracia hasta los delirios de
pedir renuncias como si las primarias hubieran servido para sacralizar a
quienes se postulaban para los máximos cargos, cuando en realidad era una
especie de interna abierta a todas las opiniones e inclinaciones tanto
partidistas como ideológicas.
Es cierto que la inflación de julio de 2,2
suena a risa porque se estableció antes de la compulsa y de poco sirvió para
calmar ansiedades, porque lo importante será conocer los números de agosto y de
septiembre, como para tener un panorama que inspire mayor conocimiento y
respeto.
Alberto Fernández consideró razonable un
dólar a 60 pesos, o sea que convalidó que se haya perdido un 30 por ciento, de
un solo saque, en cuanto al poder de compra del salario.
Por otra parte y desde el oficialismo
gobernante, se apeló a instalar en los argentinos la dudosa certeza que tal
devaluación era la resultante de la falta de confianza en la posibilidad de un
regreso “K”, con lo que habrían comenzado a tambalear tanto las inversiones que
se siguen esperando como la estabilidad de muchas empresas radicadas entre
nosotros.
Mire… La verdad es que sea como al final
sepamos que fue, la cuestión es que el pueblo ha entrado en una etapa de
recapacitación no de su voto en octubre sino del día a día que es lo más
agobiante y cercano.
Los reacomodamientos de hombres, como en
este caso el alejamiento de Dujovne es para tomarlo más como hecho anecdótico,
porque lo importante es el rumbo de las medidas que se toman desde lo político
y si se cambian hombres para que nada o poco cambie, seguiremos en un laberinto
de dudas e imprecisiones.
La campaña en el tiempo que queda hasta
finales de octubre será crucial siempre y cuando desde el poder entiendan y
asuman la gravedad de la situación y la oposición madure con propuestas y no
con sugerencias de helicópteros o de renuncias encadenadas.
Eso que le llaman democracia y que a veces
tanto se la ofende, establece mandatos que contra vientos, mareas y tormentas
se deben respetar, o estaremos perdidos…
Lic. Richard Blanco Cabrera
RECIBIMOS LA VISITA DE UN DIPUTADO A
LA
ASAMBLEA NACIONAL VENEZOLANA
En realidad nos sorprendió la visita del Lic. Richard Blanco Cabrera,
con cargo actual de Diputado a la Asamblea Nacional Venezolana representante
del distrito Capital, o sea Caracas. Nuestros intentos por ubicarlo hasta
anoche habían chocado con algunas dificultades para conciliar las lineas
telefónicas entre su celular con número venezolano y los nuestros aquí
radicados.
Pero a último momento y ya comenzada la emisión n° 582 de “Síganme los
buenos” tuvimos su presencia y agradecemos en especial al Lic. M.P. artífice
del encuentro.
Alteramos la pauta elaborada para dar lugar a tan interesante personaje,
quien aparte de legislador de la patria bolivariana, Blanco Cabrera es abogado
y ejerce funciones periodísticas en medios de su ciudad.
Se definió como primer preso político del gobierno del desaparecido Hugo
Chávez y la conversación con Gonio Ferrari sirvió para conocer de fuente
directa, sin intermediarios, la realidad venezolana desde su particular punto
de vista.
Fueron abordados todos los temas inherentes a esa cuestión sin escaparle
a la complejidad de algunas situaciones como la pobreza, la falta de medicamentos
especialmente oncológicos y las persecuciones de las que son víctimas los
opositores al “chavismo madurista”.
También evaluó recientes manifestaciones de la expresidenta de nuestro
país, la Sr. Cristina Elizabeth Fernández de Kirchner, cuando aseguró que Argentina
se estaba pareciendo a Venezuela por la falta de comida, lo que fue
enérgicamente combatido por el legislador, quien estableció las notables
diferencias entre los dos países con relación a las carencias que la Sra.
Cristina puntualizó.
El
audio de la conversación entre el Lic. Blanco Cabrera y el periodista Gonio
Ferrari puede ser encontrado en la columna respectiva, ubicada en el costado
superior derecho de este blog.
El
pendenciero de siempre…
ENTRE LA MODERACIÓN Y AMENAZAS
CUANDO TODOS BUSCAMOS
LA PAZ
Suponer con mucho de fantasía que existe una mayoría dispuesta a
reinstalar aquellos tiempos oscuros de la violencia cotidiana, aparte de de ser
una insensatez que conspira contra la estabilidad y el respeto que merecen las
instituciones de la república, es una imbecilidad que por su condición de tal
no despierta otro sentimiento o reacción que el desprecio de la sociedad.
Aquellos que basan en la prepotencia, la
amenaza y la violencia en sus mil expresiones, siguen atacados de nostalgias
por el poder perdido, por las posiciones que han debido ceder o porque la
Justicia que a veces la notamos lerda pero que por lo general llega implacable,
colocó en su lugar a esos curiosos especímenes que han hecho del autoritarismo
y la vigencia de la patota, una forma de vivir o de creer que así hacen la
política del “carteludo” que suele ser
mejor visto por algunos sectores mientras actuén con mayor beligerancia.
Uno de los casos emblemáticos de los tiempos
más recientes es Luis D’Elía, militante que en los tiempos de su sociedad con
el barbado Raul Castells, trotskista en el Movimiento al Socialismo, despertara
genuinas simpatías por su nivel de combatividad urbana, virtual inventor del
piquete callejero, del escrache a empresas y de otras lindezas que tanto
perturban a la comunidad porque en nombre de sus derechos y demandas, se
vulneran otras sagradas libertades, como es la de circular libremente o
trabajar.
Apenas se conocieron los primeros números de
las últimas PASO, este muchacho D’Elía tuvo un nuevo ataque de incontinencia
verbal y se despachó con este discurso que lejos está de ser conciliador. Lo
escuchemos… (El audio está en la sección correspondiente, costado superior derecho
de este blog).
Un tema
que conserva su vigencia
MEGACAUSA: CUANDO LA INOCENCIA Y
LA LIBERTAD NO ESTÁN ASEGURADAS
En la causa del Registro de la Propiedad de
Córdoba podría ser interesante instituir un “día de la Justicia”, con la
consigna de respetar a rajatabla tanto los principios constitucionales como el
de la libertad.
Y buenísimo sería asimismo un “día de la
Inocencia” con la obligación de re-pensar la insana costumbre de
encerrar sistemáticamente a imputados sin
juicio. Utilísimo sería también establecer un “día del debido
proceso” con la invitación a desactivar comisiones especiales y aplicar la
objetividad e imparcialidad desterrando los prejuicios y las
condenas sin pruebas.
Es para considerar fundamental practicar una
jornada de sana crítica racional para despertar la coherencia y la lógica de lo
investigado.
Quizás resultara fantástico que el Tribunal
estuviera presidido por Concepción Arenal, periodista, abogada y
escritora, quien escribió que privar a un hombre de su libertad sin
haber probado que es culpable es cosa que dista mucho de la justicia.
Y a su lado Montesquieu afirmando que si la
inocencia de un ciudadano no está asegurada tampoco lo está su libertad. Y
también Beccaria, Hobbes, Voltaire, Carrara y cientos más que denunciaron
como atrocidad, barbarie, tiranía, tortura, injusticia e inmoralidad la
prisión preventiva.
Y no parece que se hubieran equivocado.
Millones de Organizaciones así lo confirman.
Lo que sí parece delirante es
tener que imaginar soluciones utópicas para que la justicia en la
causa del Registro de la Propiedad sea una realidad.
La economía nuestra
de todos los días
EL
DÓLAR ALTO, ALGUNOS PRECIOS LOCOS Y
CAPRICHOSOS VAIVENES
DEL IVA Y DEL UVA
Cuando se conoció la noticia que se
eliminaría la aplicación del Impuesto al Valor Agregado a los alimentos que
componen la canasta familiar, comenzó a circular una especie de aire fresco,
pero con el correr de las horas eso se transformó en una simple bocanada.
Es que hay que entender a los formadores de
precios, especialmente supermercados que son el último eslabón antes de llegar
al consumidor, porque es el sector que ha pasado por más peajes y necesita
cubrirse de lo que le costaron.
Es fácil restar el 21 por ciento cuando con
antelación se reajustaron esos precios en un 15 o en el 20 por ciento o más y
se reduce a la simple utilización de esa maquinita infernal que se llama
rotuladora.
La medida, y no es pronóstico apocalíptico
sino basado en recorrer almacenes, super, etc, tiende a diluirse porque no
existen ni serán implantados controles que garanticen la aplicación de esas
quitas en los precios que estaban vigentes.
Con el dólar a 60 pesos es como si todo lo
que consumiéramos en el hogar ya sea pollo, azúcar, yerba mate, manteca, fideos
o sal estuvieran enganchados con el billete verde, lo que significa un
menosprecio al valor de nuestra tan vapuleada moneda.
Estableciendo el precio de los combustibles
poco es lo que se garantiza porque muchos artículos, diría la mayoría no son
dependientes de naftas, gas, electricidad y otros servicios.
Y en cuanto al UVA la medida del Estado de
hacerse cargo de sus variaciones mediante subsidios a quienes contrajeron
deudas bajo tal sistema de financiación, puede que sea una medida beneficiosa
para la gente, siempre y cuando se instrumenten mecanismos como para hacerla
respetar.
De lo contrario, nos quedaría solamente el
amargo sabor de haber sido otra vez víctimas de la demagogia.
Para ellos es un día mágico
EL NIÑO, UN MAESTRO ENANO QUE NOS
AYUDA A COMPRENDER
EL PROGRESO
El Dia del Niño,
hoy, es una postergación de la fecha original, que en realidad es el primer
domingo de agosto.
Ocurre que para
entonces, no son muchos los que han
cobrado su sueldo.
Ya con este
detalle queda ampliamente confirmado el perfil comercial del agasajo: la
cuestión no es solo saludar al niño sino festejarlo con salidas u obsequios que
van desde la chuchería accesible hasta casi prohibitivos viajes a Disney.
No ha sido
sorpresa que los juguetes aumentaran sus precios en algunos casos hasta el doble
en esta última semana.
Y como no
tenemos la cultura del escarmiento -y por eso la historia nos marca penosas
reincidencias- en lugar de negarnos a que nos esquilmen, vamos risueños al
degüello, porque la cuestión es endeudarnos.
Si la sequía nos
abruma, ofende, condiciona e inhabilita, apelamos al dinero plástico.
Y al llegar el
resumen sin incluir la factura de la luz, del gas y los cedulones de impuestos
y no nos alcanza, acudimos a la financiera.
Y cuando nos
quieren cobrar la usura normal de la financiera, tenemos que ir a llorar
miseria a Tribunales.
El ciclo es una
especie de clásico de la conducta argentina.
Si pisáramos la
tierra, saludaríamos sin excesos al niño en este día intrascendente impuesto
para el consumismo y dentro de nuestras reales posibilidades, para evitar las
penosas lamentaciones emergentes.
Cuando crezca y
evalúe, ese niño seguramente nos
agradecerá por dejarle principios
y conductas, en lugar de recibir la herencia de las deudas.
Más allá de todo
esto y dejando de lado lo comercialmente abrumador, suele ser bueno darse una
vueltita por los rincones de nuestra niñez, sobre todo para entenderlos.
Porque estar con
ellos es beber sus ansias, es conocer sus miedos, es compartir la sorpresa de
descubrir un mundo maravilloso e impensado.
No caigamos
entonces a la común torpeza mediática de tratarlos como tontos, de rebajarlos
como personas, de hablarles queriendo hacernos entender con un mensaje vacío e
inentendible incluso para nosotros.
Les debemos respeto,
porque los niños en muchas cosas ya volvieron cuando los mayores creemos
haberlos superado.
A la compu y al
celular los manejan mejor que yo.
Estar para ellos
no es otra cosa que cumplir con el designio de la formación, y más que nada,
del cariño y la comprensión.
Ese cariño que
tanto recibimos de ellos, y que a veces lo tomamos como inherente, cuando en
realidad suele ser un inocente pedido de auxilio para crecer.
Y cuando les
brindamos nuestro amor, íntimamente sentimos como que volviéramos a ser niños.
Ese niño, aquél
niño lejano, abrumado por los recuerdos y las nostalgias, que la mayoría de los
adultos y los viejos nunca hemos dejado de ser.
Y cada día que
pasa, esa es, puedo jurarlo, una
sensación maravillosa.
Para él, todo el
bronce es poco
PRESENCIA
ETERNA DE NUESTRO PRÓCER
MÁXIMO,
EL GENERAL JOSÉ DE SAN MARTIN
Las versiones escolares sobre vida y obra de
José de San Martín, medio como que no encajan con lo que fue la realidad del
ilustre personaje, Padre de la Patria.
Y en las cuestiones históricas, cuando uno
carga algunos años, entiende que lo mejor es consultar a distintos autores, más
allá de los textos que nos hacían leer.
Es cierto que nació terminando febrero en
Yapeyú, de donde dos años atrás habían expulsado a los jesuitas.
El pueblo no era un paraíso, sino un
asentamiento de indios guaraníes y poca presencia del hombre blanco.
Seguramente los únicos españoles eran don
Juan de San Martín, designado allí por la corona gobernador intendente, y su
familia.
Esa región era tan complicada, que no se
sabe si el nombramiento era un premio o un castigo.
El matrimonio no era noble ni mucho menos.
Doña Gregoria Matorras no aportó alcurnia ni
dinero.
Vivieron y murieron siendo pobres.
José de San Martín fue hijo de carenciados,
no tuvo cuna de oro, sangre azul ni privilegios y hasta se comentaba que era
hijo de una india.
En los libros de la primaria, San Martín era
hijo de nobles y tenía que casarse con una dama de la sociedad porteña.
Se casa con Remeditos, hija de un
comerciante ligado a intereses británicos.
Dicen que la familia de ella cuestionaba esa
relación.
Tanto fue así, que al injertado pariente lo
nombraban despectivamente el plebeyo, el soldadote, el indio o el tape.
Formó el Regimiento de Granaderos a Caballo,
lo armó y adiestró uno a uno a soldados y oficiales.
Lo integró con gauchos, indios que hizo
llevar desde su tierra natal, artesanos y algunos marineros que habían quedado
varados en el puerto de Buenos Aires.
En el actual norte argentino, San Martín
hizo buenas migas con otros grandes revolucionarios de la época como Manuel
Belgrano y Martín Güemes, ambos despreciados por los poderosos.
Con éste acordó una táctica de pueblo en
armas para contener a los realistas que se proyectaban desde el Alto Perú. Con
Belgrano, que era abogado y economista, hizo gran amistad y recibió
experimentados consejos para la lucha contra la minoría conservadora,
provinciana y porteña.
Los libros de la primaria omiten por
ejemplo, que Güemes fue muerto por una partida realista, a la que fue entregado
por la oligarquía salteña.
Es que el guerrillero patriota irritaba a
los grandes terratenientes, ya que la aplicación de la Ley Gaucha, una especie
de reforma agraria en medio de la guerra, era perjudicial para sus intereses.
Tanto se acosó a Manuel Belgrano, que murió
pobre y abandonado, cuando había dado toda su fortuna, que no era poca, a la
causa revolucionaria
En la ciudad puerto, las masas populares se
levantan contra los déspotas de Buenos Aires.
Los poderosos convocan al Ejército de los
Andes para reprimir a los insurrectos.
San Martín se niega a ser verdugo de su
pueblo y esa desobediencia le cuesta la enemistad de la oligarquía rioplatense
y por otro lado el cariño de los patriotas.
Seamos libres y lo demás no importa nada,
dijo a sus soldados en una proclama, allá por 1820.
Después el exilio, la enorme pena y la
muerte.
Fue en Boulogne-sur-mer, 169 años atrás.
En eso si, coinciden los libros.
Desde entonces, San Martín nos hace falta.
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