S.L.B.: LA BRECHA EN LA CIMA DEL PODER ES TAN INOCULTABLE COMO PELIGROSA – ES IMPOSIBLE ESCONDER LA POBREZA QUE REINA EN CÓRDOBA – AVANZA LA CRECIENTE Y DISOCIANTE LUDOPATÍA - TURISMO ESTUDIANTIL: VILLA GRAL. BELGRANO SERÍA REMISA A SU ACEPTACIÓN - AL SHOW DE ULISES BUENO LO CONCRETÓ EN CAMBIO LA MUNICIPALIDAD - CRISTINA KIRCHNER EN COMODORO PY Y SU INMINENTE PRESENCIA NO ESQUIVADA ANTE LA JUSTICIA, ETC.

Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” edición nº 732 del domingo 26/06/22 emitido en dúplex por la AM580 y FM88.5 ambas dependientes de Radio Universidad Nacional de Córdoba.

 
No es el caso de los gatos que se pelean…
LA BRECHA EN  LA CÚPULA  DEL  PODER 
ES TAN INOCULTABLE COMO PELIGROSA
 

   No alcanzo a superar esta mala costumbre de apelar a los grandes pensadores a la hora de comentar cualquier situación conflictiva o que lleve a dudas, malos entendidos o equivocaciones que el tiempo se encargará de confirmarlas como tales, o de darles finalmente un sentido histórico y en este caso me estoy refiriendo al poder.
   Empezando por Eduardo Morón Alcain, sostenía que con él “se dominan las cosas, las circunstancias y, lo que es mucho más, a los hombres: se goza de esa sensación de estar por encima de los demás, de tener sus halagos, sus privilegios. El poder fascina y enceguece al que es dominado por él” o sea que casi casi, lo ubica en una posición inicialmente pasiva cuando en realidad es primero intención, luego apetencia, le sigue su utilización y finalmente es una maravilla casi sensual de goce y aprovechamiento.
   En cambio Voltaire se mostró más contemplativo al referirse al poder, señalando que “La pasión de dominar es la más terrible de todas las enfermedades del espíritu humano” y al considerarla de esa manera, le restó cualquier componente de razonabilidad a una actitud que por sobre todas las cosas pretende imponer su dominio.
   Sin embargo han sido los chinos quienes destacaron con sapiencia, experiencias y años de padecimientos primero con uno de sus proverbios que es contundente al momento de sostener que “el poder es el mayor enemigo de su dueño”, lo que lisa y llanamente se contradice con el pensamiento casi actual de Lyn Yutang, dueño de esa sentencia que adoctrina con la fuerza de sus conceptos: “El máximo del poder es la iniciación de la decadencia”.

   Por todos estos antecedentes es que llama la atención ese capricho de personas supuestamente inteligentes y sospechadas de tales, de empecinarse en una lucha burda y desgastante, absurda, inconducente especialmente al tomar en cuenta que ambos contendientes sostienen haberse trazado las mismas metas de grandeza para nuestra nación.
   No es otra acción que una lucha estéril y poco probable camino hacia la grandeza, si cada uno de esos sectores muestra y esgrime amenazantes actitudes mezquinas, anhelos personalistas¸ temores a la acción de una justicia libre e independiente y permeable a todo lo que signifique llevarlos a la reflexión, en el sentido que dichas posturas marcan un camino hacia la desintegración institucional.
   La lucha de intereses que sin dudas enmarcan el abierto y reciente enfrentamiento entre el número uno del poder y la número dos, son alarmantes síntomas de evitable podredumbre en la cúpula, en momentos y circunstancias que la crisis nacional demanda serenar los ánimos y dejar de lado las apetencias personales en la recuperación de la serenidad y el diálogo, incluso dentro del democrático y respetuoso disenso.
   Entonces queda en claro para la ciudadanía, incorrecta e inédita invitada de piedra en esta teatralización disociante de una realidad que desde el mismo poder se empeñan en minimizar u ocultar, sobre aquel comentario popular que sostenía que eran gatos los responsables de esos ruidos y lamentos no porque pelearan, sino que era que el peronismo se estaba reproduciendo.
   Porque si no existe en la República una autoridad capaz de serenar los ánimos, llamar a la cordura y buscar un sendero que conduzca a la reconciliación por el bien común, el fracaso estará asegurado.
   Y los argentinos en su conjunto, ya cansados de tanto franeleo a la institucionalidad, bajarán los brazos y se entregarán, porque no les queda otra alternativa, a los designios de quienes buscan la destrucción de la democracia porque recuperarían un terreno para su añeja batalla por caminar hacia el autoritarismo fanatizado, hermano de un sistema que la Historia universal tiene mil facturas para pasarle por sus fracasos y desaciertos.
   Y dudo que estemos en condiciones, los argentinos de verdad, para tolerar otra vez el autoritarismo basado más en el fanatismo, que en la toma de conciencia de un pueblo pese a todo lo que padece, tan maravilloso como el nuestro.
 
Se impone actuar sin demoras
PESE A LO QUE SE BUSCA OCULTAR, LA
POBREZA EN CÓRDOBA ES ALARMANTE
 

   De necedad insalvable sería una actitud que negara todo lo bueno que se hizo y se sigue haciendo en Córdoba en materia de caminos, autopistas y obras similares, lo que se suma a la atención -en algunos casos parcial- a los requerimientos en el ámbito de la  educación, y en vivienda e infraestructura, dejando por ahora y para otro momento la obligación más cívica que periodística, de dedicar más páginas al tratamiento de una temática como es la seguridad, que es el mayor motivo para su consideración en procura de soluciones reales y no declamadas y anunciadas mediáticamente, a un costo mayor que el de aquellos emprendimientos que se cuestionan.

   Es dramáticamente cierto que en el contexto nacional uno de los temas que más preocupa a la sociedad argentina, es la creciente inseguridad reinante, que no es como muchos pretenden meternos en  la cabeza que una de sus principales causas es la pobreza estructural sumada a la desocupación en aumento, razonamiento que concluye en el absurdo de hacer sinónimos entre pobreza y delincuencia, algo así como una confesión oficial de inoperancia al buscar el camino más fácil que ofrece el ejercicio de la demagogia.
   No es tampoco cuestión de afirmarnos en los más recientes estudios estadísticos elaborados por distintos organismos estatales y privados, pero ya de por si resulta indigno que una provincia como la nuestra, que en el concierto nacional es modelo en cuanto a recursos naturales, industrialización y otros positivos indicadores, tengamos una pobreza creciente dentro de un  sombrío panorama de descontrol emparentado con un cierto grado de indiferencia, aunque el discurso desde el poder sostenga lo contrario con su ciclotímico accionar .
   La pobreza duele; nos duele como ciudadanos, como contribuyentes, como habitantes de este pródigo suelo, desde donde más de una vez se cayó en eso tan cercano al delirio, como lo sigue siendo aquella vocación separatista que nos aísle del puerto, para conformar junto con Santa Fe y Mendoza una especie de eje horizontal en el mapa de la República.
   Porque si bien es cierto que Córdoba tiene el privilegio de su ubicación geográfica, la bondad de su clima, el desarrollo de su industria, su calidad receptiva para el turismo nacional e internacional, debemos reconocer asimismo que se están dando los primeros pasos firmes y sostenidos no hacia nuestra independencia política, sino a diferenciarnos del resto en cuanto a posibilidades de progreso que es el camino hacia la recuperación y el bienestar.
   Y ante ese alentador panorama a mediano y largo plazo, no deja de ser un error esconder nuestra pobreza ni maquillarla con asistencialismo oportunista, porque la única vacuna contra la indigencia y la miseria es la creación de genuinas fuentes de trabajo más allá del ámbito estatal.
   Y podremos repetir la historia, aquella que marcó a  Córdoba como señera en el país, no tan solo para la peperina, el cuarteto, la frescura de su humor, su industria del apodo o el consumo de fernet.
 
Pisa firme la timba a domicilio
LA DOCTA CAPITAL DEBERÁ ENFRENTAR A
LA LUDOPATÍA QUE BUSCARÁ INSTALARSE
 

   Todo indica y no existe mejor indicador que la realidad misma, que los intereses existentes en torno del juego oficialmente permitido y alentado, sumado a su peligrosa derivación a la ludopatía destructora de relaciones familiares y laborales y otros negativos aspectos, cuenta con fervientes e interesados adherentes, dentro y fuera del gobierno, por lo que en definitiva triunfó aquella iniciativa de permitir que el juego invada los hogares cordobeses a través de lo que se dio en llamar “redes sociales”, calificación que la cotidianeidad y la tecnología han transformado en altamente peligrosa.
   Todo radica en la manera como se reglamente la determinación legislativa de aprobarla, pero hay un detalle que sobresale tanto como inquieta, y es el alcance de la habilitación de la timba domiciliaria: si su utilización y aceptación comprenderá a la ciudad capital de los cordobeses o se respetará lo que según tengo entendido, una prohibición municipal vigente al respecto.

   En lo personal, no creo que la angurria financiera de quienes sostienen esta manera para algunos elegante pero altamente nociva, se detenga por un detalle tan  nimio como superable, porque si pudo pasar la valla de lo que llegamos a pensar en un obstáculo para la entronización  de la ludopatía, su aprobación nos trajo al firme y consabido terreno de que todo, si hay dinero de por medio, y mucho, los obstáculos no existen.
   Seguramente desde la ávida conducción del negocio pondrán como uno de los fundamentos para su concreción, el pretexto de la fuente de trabajo para tantos operadores que lógicamente estarán a cargo de la atención de los jugadores así sean debutantes o viciosos.
   Un argumento que seguramente tendrá su apoyo de ciertos organismos vinculados con los trabajadores, pero el sano raciocinio deberá evaluar, lejos de cualquier apasionamiento por la postura, cuántos trabajadores se quedarán sin el sustento necesario para mantenerse y mantener a su familia, cuando la ludopatía se instale con la fuerza que la Humanidad y la ciencia ya demostraron que posee.
   Hay tanto para decir de los vicios, como entre otros lo expresó Moliere: “Todos los vicios de moda pasan por virtudes” o de Víctor Hugo: “En el surco del arado entierra el hombre sus vicios”.
   En lo personal me quedo con Rusó: “El vicio raramente se insinúa chocando con  la honradez; casi siempre toma el color de ésta”.
 
Megacausa del Registro
¿QUEDAN VINCULACIONES DEL TEMA
CON  EL  FUERO  ANTICORRUPCIÓN?
 

   La causa del Registro de la Propiedad de Córdoba transita por un período de aparente latencia en el que poco se informa, o casi nada trasciende, los fallos de distintos organismos que reprobaron la conducta judicial en la causa, incluida la Corte Suprema de Justicia de la Nación, ni las respuestas a los reclamos que nos hacen saber que persisten. 
   Hace un tiempo, un miembro del Superior Tribunal de Justicia cordobés, en una entrevista mediática, defendió al Fuero Anticorrupción provincial poniendo como ejemplo de su accionar la condena de dos fiscales, el proceso contra un ex intendente y las condenas relacionadas con el Registro de la Propiedad, aunque no aclaró la persona entrevistada, que en la causa del Registro no se condenó, y ni siquiera se juzgó a ningún funcionario –y lo voy a repetir- a ningún funcionario de alto cargo, pese a que fueron acusados en repetidas ocasiones. En el artículo 
se mencionan costos de unos 20 mil millones de dólares asociados a la corrupción, millones que, en Córdoba, no los tienen los que el Poder Judicial condenó en la causa del Registro.
   Quizás sea por esto, que el resultado de una encuesta realizada en Córdoba señale que el 75,8 por ciento de la población manifieste poca o ninguna confianza en el fuero Anticorrupción, analizando que en toda su trayectoria no realizó ninguna condena de peso. Incluso, para muchos, el Fuero sirve para instrumentar, entre otras acciones, la defensa corporativa cuando alguien de la Justicia es denunciado, como se comentó hace un tiempo en el caso del muerto litigante.
   Pero volviendo a los millones perdidos, que no tienen, ni tuvieron los condenados del Registro, sería muy beneficioso que el cuestionado Fuero, o quién sea de la Justicia, intentara encontrar a dónde y quiénes los tienen, no sólo para devolverlos, sino para reparar también la confianza que legítimamente muchos hemos perdido. 
 
¿Condicionar el modelo de visitante?
SI EL TURISMO  QUE  RECIBIMOS ES ‘SELECTIVO’
SE TRANSFORMA EN ACTITUD DISCRIMINATORIA
 

   Un importante municipio del departamento Calamuchita de esta bella y turística provincia mediterránea caracterizada por exitosos festivales tanto de la cerveza como de la masa vienesa y otras atracciones, adelantó la intención que aún se desconoce si finalmente fue aceptada desde adentro y fuera de su bello emplazamiento.
   El pueblo ocupado mayoritariamente al menos desde sus comienzos por habitantes de origen alemán a lo que después se fueron agregando vecinos provenientes de Austria, Hungría, Polonia y otras geografías, se caracterizó siempre por su delicada prolijidad urbana, el pujante comercio y la rigidez en sus horarios de atención a propios y extraños.
   Es centro para el encuentro de familias provenientes de Córdoba capital, de otras provincias y de países limítrofes lo que le otorga una atractiva condición cosmopolita y sin embargo y debe ser que de alguna manera les molesta, que en los últimos tiempos haya crecido el turismo estudiantil, ese de los finales de curso en la secundaria o grupos universitarios que transitan todavía el final de su adolescencia en camino a la adultez.
   Y por lo que ha trascendido, buscaron las peor manera de redireccionar el flujo de visitantes, sugiriendo algo así como una prohibición para ese segmento etario que sin dudas altera la bucólica tranquilidad del pueblo, de su gente y de su paisaje.
   En caso de concretarse o llevarse a la práctica alguna medida restrictiva de la libertad del turista de ir a donde mejor le plazca, no sería cuestión de embanderarse en oposiciones forzadas o cercanas a cualquier nivel de violencia.
   En un país libre como se supone es el nuestro, y ya lejos de cualquier discusión o justificativo oficial, sería para la directa intervención del INADI y de doña Victoria Donda, porque estaríamos enfrentando una inadmisible muestra de discriminación.
   Y a eso no lo podemos permitir, ni siquiera en nombre de nada…
   Si los contingentes son desordenados, ruidosos y de otras derivaciones antisociales, es el hogar de cada uno donde deben preocuparse en la educación y la formación de su juventud, lo que no se repara con antipáticas maneras de segregar.
   Muchas veces el crecimiento de una población y su notoriedad y crecimiento como receptora de turismo, tal el caso que nos ocupa, lleva a instaurar alguna medida para conservar el nivel original y ya superado de los visitantes, y parece que el “status” de los jóvenes no satisface a los adustos germanos, que tienen otro modelo de formación, posiblemente demasiado estricto.
  
No hizo falta el escenario…
EL SHOW NO FUE CANCELADO  PORQUE LA
MUNI SE ENCARGÓ DE HACERLO REALIDAD
 

   Toda la costosa y abrumadora parafernalia publicitaria adelantando la campaña proselitista del próximo comicio para elegir gobernador, intendente, legisladores y otros relevantes cargos, se derrumbó y con el paso del tiempo, pocos entenderán que un músico, su nula percepción de lo que provocaría y su expandida fama, fueron los motivantes de un casi cataclismo que conmueve al poder tanto provincial como municipal, en estos tiempos críticos de situaciones que la población no acepta ni justifica por lo absurdas y evitables.
   Se cometieron inéditas torpezas que llevaron al fracaso de lo que se pretendía presentar como una versión apocada y doméstica de los grandes festivales de luminarias que subyugaron a poblaciones de lejanas geografías, suponiendo que para nuestro pago chico juntarían a cerca de 50.000 personas en un recital gratuito, que vaya pavada, ya consideraban transformables en otros tantos miles de  necesarios votos con su correspondiente arrastre.

   El mayor aliado del papelón fue el apuro por hacer las cosas en el menor tiempo posible, para evitar a esos moscardones que siempre molestan con sus agorerías de fracasos, cuando no son ellos los que encaran algún emprendimiento trascendental.
   Y claro… es entendible que las prisas no se llevan del todo bien con la burocracia y desde la Municipalidad auspiciante del show porque el artista se hizo invitar a festejar su cumpleaños, omitieron entre otras cosas apelar a la sana costumbre de la licitación o del concurso de precios para la logística, y todo lo atinente a la convocatoria, que si bien no siempre son un modelo de limpieza, al menos aparentan serlo y eso queda social y políticamente ”fashion” y elegante para el tontaje.
   Hasta que casi en el momento de encender las luminarias, lanzar globos al aire, activar las máquinas generadoras de humo, lanzar bengalas, atronar con el sonido y consignar que esa realización multitudinaria y publicitadamente gratuita, era parte de la gestión, alguien les mojó la mecha y tuvieron que huir poco decorosamente, empujados por la vergüenza y la culpa de haber cometido un pecado contra los vecinos, una afrenta al sacrificio de pagar tributos y una burla que se expandió, en este caso como elemento negativo, a lo largo y lo ancho del país, sin dejar de lado algunas derivaciones en el exterior.
   A desarmar todo cuanto antes, fue la consigna y  no les daban las manos ni las herramientas al febril cometido de eliminar el escenario emplazado en el Parque Sarmiento.
   Lanzaron al matadero a un funcionario que le tocó actuar de fusible para dar explicaciones y ninguna autoridad del nivel superior dio la cara, hasta el punto que vaya casualidad y buena suerte, el dueño de la gestión recordó que tenía que viajar ese mismo día a los Estados Unidos, creo, lo que tenía programado desde antes y no podía faltar.
   En resumen porque fue la comidilla mediática de cuatro o cinco días pero seguramente tendrá su prolongación, todos quisieron, desde los sectores involucrados, apartarse de lo indignante que resultaba saber que se habían destinado 43 millones de pesos para llevar a 50.000 asistentes a festejar un  cumpleaños por autoinvitación del agasajado, quien al final de cuentas no deja de ser, el artista, una de las tantas consecuencias.  
   Y los cordobeses azorados, más desorientados que chupete en el tujes, fuimos creciendo en indignación que seguramente compartieron los empleados municipales a quienes por falta de recursos les negaron mejoras salariales.
   Resumiendo, fueron a parar allá arriba lejos, al carajo, el maquillaje de las calles, las avenidas angostadas, la vocación demoledora para que algo cambie, los bondis nuevos y todo el discurso de eficiencia de gestión que viene esmerándose en mostrar hasta el cansancio, para terminar gastando más en eso que en realizaciones imprescindibles y ajustadas a las reales prioridades más allá del pan y del circo.
   Con razón es que todo no terminará en el desactivado festejo cumpleañero por dos cuestiones que saltan a la vista y una de ellas es en lo formal: un viaje lejos, como para esconder lo que seguramente será un rostro avergonzado y otros números emergentes del festival de gastos con clarísimas evidencias de campaña preelectoral.
   Basta con saber que para otra de las “funciones” por así llamarla a la bicicleteada más reciente, para lo cual la Municipalidad de Córdoba, nuestra comuna, la de la gestión brillante, contrató directamente la logística para la fiesta del pedal gastando en eso 20 millones y medio de pesos, sumados a 3.700.000 pesos en agua para los participantes y el rubro más costoso, escuche bien, 51 millones de pesos… si! 51 millones de pesos que son nuestros, para la confección de 15.000 remeras para los participantes.
    Con esos números, lógicamente que el costo del cumpleaños sería una bicoca…
   Aunque en verdad, el show no se suspendió.
   Les voy a regalar una primicia…
   Al costoso show lo hizo la Municipalidad de Córdoba, por lo que seguramente pasará a la historia…
 
La Corte Suprema de Justicia ratificó la citación
POR AHORA, EX-ELLA  PADECE EL FRACASO
EN LA BÚSQUEDA DE SU PROPIA IMPUNIDAD
 

   El hecho de comparecer ante la Justicia, para cualquier ciudadano consciente de su corrección de conducta, debe ser un acto tan simple y para muchos rutinario como alejado de los riesgos propios que supone, y más que nada, aún más distante que un eventual temor a que ese poder independiente del ejecutivo y del legislativo de la República, aplique correctivos lo que se agravaría para el caso de sanciones privativas de la libertad.
   Debe ser ese el fantasma que acosa la íntima conciencia de quienes hacia adentro, se saben responsables de alguna incorrección castigada por las leyes de la Democracia, porque no debe existir en el ser humano un temor más grande, agobiante e indeseado que carecer, otra vez vale consignarlo, de esa maravilla de sentirse libre de andar por la vida alejado de remordimientos o arrepentimientos, sin ataduras ni limitaciones que le cambien la vida.
   Disraelí es el autor de un párrafo demoledor acerca de la ley, cuando sostiene que ”cuando los hombres son puros, las leyes son inútiles; cuando son corruptos, las leyes se transgreden”, conceptos especiales que coinciden con el pensamiento de San Agustín quien declaró la firmeza de asegurar que la primera libertad es carecer de pecados.
   Los argentinos durante demasiados años padecimos el cercenamiento de las mínimas libertades consagradas por la historia como la libertad de pensar, de obrar, de decir o de callar, lo que nos marcó a fuego y nos abrazó en el repudio irrestricto a las tiranías y los fanatismos.
   Por todo esto, es para tomar como síntoma de respeto, madurez y consideración hacia el sano ejercicio de la Democracia, la actitud de la actual vicepresidente de la Nación, doña Cristina Elizabeth viuda de Kirchner, de presentarse en los próximos días ante los tribunales de la República, para responder por las acusaciones de corrupción que le vienen formulando.
   Porque tanto para ella como para nosotros, habrá llegado al menos seguramente la hora de su verdad jurídica, pero quedarán sin dudas las otras verdades, las ocultas, que jamás habrán de trascender.