Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio
Ferrari en su programa “Síganme los buenos” del 12/02/17 emitido por AM580
Radio Universidad de Córdoba.
LA QUINIELA INSTANTÁNEA Y EL VICIO
Bien sabemos que no son pocos
aquellos que sueñan con la salvación en materia de finanzas personales, a
través de cualquiera de las alternativas que ofrece el juego ya sea el que
maneja el Estado o en los emprendimientos privados.
Entre nosotros, las
estadísticas -me lo comentaron- indican que las preferencias están encabezadas
por la quiniela, le siguen la lotería, el Quini 6, el Loto, el Brinco, algunas
raspaditas y después las tragamonedas en todas sus variantes y las visitas al
casino con ruleta, punto y banca y otras que mentirosamente les llaman
“atracciones”, que son en realidad mecanismos para el despojo con mínimos
porcentajes de ganadores.
En nuestra provincia el Estado
regentea el juego a través de Lotería de Córdoba, un organismo superpoblado que
de lo recaudado, vuelca nada más que el 18 por ciento a la ayuda social de
diferentes maneras, porque a “la parte del león” se la llevan los
concesionarios de las “slots” y el mantenimiento del organismo.
La quiniela despierta expectativas
tan elevadas, que la demanda hace que en Córdoba haya cuatro ediciones diarias,
de lunes a sábados, de los sorteos incluyendo el que se realiza los miércoles
con la lotería mediterránea.
Lo que se dice, todo un éxito
de participación, a lo que debemos sumarle los sorteos de otras loterías del
país que también se registran en nuestra provincia, lo que marca el interés
general por ese tipo de apuestas que se resuelven en el día.
Pero el ludópata es un enfermo
de ansiedad a quien no le gusta esperar pese a la adrenalina que ello supone, y
se me hace que de esa actitud nació la quiniela instantánea, o sea juegue ahora
y ya mismo sabrá si ganó en cuyo caso cobrará en el acto. ¿Qué mejor para un
ansioso?
Algunos maliciosos de esos que
nunca faltan, especularon que fue una especie de globo de ensayo de la empresa
Boldt, beneficiaria de concesiones de juego, y si prosperaba la quiniela
instantánea intentarían después meternos en la ciudad las tragamonedas y un
casino.
Y Lotería de Córdoba se lanzó a
la pileta y habilitó a sus agencias el nuevo sistema, seguramente sin tomar en
cuenta que ese tipo de juego está expresamente prohibido en nuestra capital
aunque permitido más allá de los 20 kilómetros del centro.
No es necesario volver a
puntualizar las consecuencias y derivaciones de la ludopatía que destruye a la
familia, que pauperiza hogares, que se emparenta con males como el
narcotráfico, la usura y la prostitución y otras emergentes que el Estado
protector no siempre toma en cuenta, escudado en los fines sociales de parte de
lo recaudado en el juego.
Más allá de las históricas
diferencias que siempre existieron entre provincia y municipio cuando son
gobernados por distintos signos políticos, cuando se avizoraba una nueva
batalla todo indica que prevaleció el buen criterio por ambas partes, porque
desde la Intendencia se hizo saber que ese tipo de apuesta -la quiniela
instantánea- estaba prohibida y desde la gobernación hicieron saber que la
retiraban de la variada timba cordobesa.
¿Es que no hay una asesoría
legal que impida estos papelones y los enormes gastos de publicidad que se
hicieron para promocionar esa modalidad que a la postre murió al nacer?
¿A quién hay que reclamarle la
costosa e inaceptable imprevisión?
Es hora que las autoridades
actúen con algo de seriedad en la aplicación de innovaciones, cuando bien se
sabe que están vedadas por la ley que ellos tienen la obligación tanto de
conocer como de aplicar.
Lo más triste, es que todo ese
dinero despilfarrado, se tendría que haber destinado a fines sociales, para
tratar de dignificar algo ese mezquino y pijotero 18 por ciento que les aporta
el juego, permitiendo que cifras millonarias vayan a parar, precisamente, a
quienes suponemos que necesitan menos que los pobres y los marginados.
Eso es parte de la intolerable
injusticia social.
LOS MACRI, EL CORREO Y LA DEUDA
Para estas cuestiones tan
delicadas que sirven como misiles tanto para uno como para otro sector de la
política argentina, si es que aceptamos la vigencia no del bipartidismo pero si
de dos veredas separadas por una grieta que tarda en cerrarse, se me ocurre que
lo más conveniente, cuando el asunto está judicializado, es dejar que sean los
jueces quienes decidan mientras los políticos y sus seguidores pueden seguir peleando.
Resumiendo, que sea la
legalidad y no la pasión la que escriba la historia que como la nuestra es
riquísima tanto como sujeta a interpretaciones según sea el lector.
Quiero dejar en claro y en lo
personal, con proyección al tema Macri padre-Correo-Macri hijo que no me hago
cargo de lo que haga o deje de hacer mi hijo, como supongo ocurrirá lo mismo
por parte de mi hijo con relación a mi condición por el hecho de ser su padre.
Eso por una parte y por la
otra, dos aspectos que tendrían que ser parte del debate y advierto que hay
cierta resistencia de la actual oposición por integrarlos: uno es de acuerdo
con lo que se sabe, que ciertas liquidaciones no llevan carga de intereses y la
otra, por qué a lo largo de tantos años en que fueron gobierno nadie se encargó
de acelerar o gestionar la cobranza.
Es más que previsible que en
una cuestión tan delicada y controvertida porque hace a la seriedad y
honestidad, tanto del actual gobierno como del que se fue y pretende volver,
que las chicanas de nada sirven y que lo mejor es dejar actuar a la justicia
que maneja sus propios tiempos, que no siempre van en concordancia con los de
la gente.
Si existe una deuda realmente
impaga o algún beneficio maliciosamente acordado, la ley cuenta con mecanismos
como para exigir su cumplimiento o de lo contrario aplicar las medidas
punitivas que se contemplen, incluyendo el cuestionamiento y la sanción a los
funcionarios, tengan el cargo que tengan, que hayan incurrido en violación de
cualquiera de los instrumentos legales.
Pero asimismo, es de pensar que
la misma ley o alguna vinculada con este asunto, contempla investigar sin
prescripciones cualquier omisión en que se hubiera incurrido en la última
década, relacionada con el trámite resarcitorio o con la obligación -si así lo
especifica la ley- de gestionar una cobranza.
Mil millones, seis mil millones
o 70 mil millones son solo cifras que se tiran al no siempre limpio ruedo de la
política manejando agresiones, acusaciones o justificaciones y defensas,
olvidando que todo ese panorama lo único que consigue es enturbiar la claridad
que debieran tener todos los actos de gobierno, tanto como la responsabilidad
de una oposición madura y respetuosa.
Nadie, absolutamente nadie en
los gobiernos, puede vanagloriarse de equilibrado en los momentos de ser poder,
y tener la potestad de designar jueces y fiscales porque dudo que en ningún
caso hayamos tenido modelos de independencia absoluta y ecuanimidad.
Si el actual presidente
incurrió en falta o en delito, el caso está donde debe estar, en manos de
quienes administran justicia, así como la administraron los distintos gobiernos
cada uno en su momento y si le cabe condena, para eso están las leyes y todos
los otros mecanismos republicanos para aplicar.
No vengan entonces con delirios
-desde ninguna de las dos veredas- tendientes a minimizar la importancia del
asunto o a darle mayor vuelo que el que realmente merece porque los argentinos
tenemos demasiados frentes abiertos hacia adentro, que nos impiden salir de la
ciénaga.
Y recordemos, de paso, que ese
barro no es nuevo …
TRANSPORTE URBANO: ACENTUADO DETERIORO
Desde hace más o menos un mes
se viene notando un paulatino deterioro en la calidad del servicio de ómnibus
en la ciudad, situación que algunos ilusos vincularon con las vacaciones.
La realidad con el paso de los
días mostró que nuestro análisis era acertado, cuando alertábamos que las
frecuencias se irían acentuando y ahora basta un simple control o un solo
ejemplo para certificar que a la situación, como siempre pero ahora con mayor
impunidad, la vienen manejando desde las empresas aprovechando la indemnidad
que les obsequia generosamente la falta de controles del poder concedente.
La Municipalidad y a eso lo
vemos en cualquier punto del vasto territorio urbano de Córdoba,
ha dejado de
controlar el cumplimiento de las frecuencias y es como si le bastaran los
números que les dibujan desde la FETAP, como si las prestaciones fueran
normales.
Vamos a lo que acabo de
comentar, un solo ejemplo: en una parada de Alta Córdoba donde suben o bajan
pasajeros de cinco ¡cinco! líneas de ómnibus a eso de las 11,30 de la mañana de
un día hábil, durante 20 minutos no pasó ni siquiera un solo ómnibus y eso que
es ahora una constante entra ya a la categoría de burla.
Los usuarios no comprenden el
porqué de las tardanzas, cuando esas demoras en las horas tempranas, les
impiden cumplir con el respeto por los límites de ingreso a sus trabajos, lo
que les afecta a la hora de recibir el sueldo ya que pierden el plus por
puntualidad y a veces por presentismo.
Esa actitud empresaria no se
concreta en los hechos sólo para economizar combustible y otros insumos, sino
para deteriorar la prestación y aducir que se ven obligados a ello porque de lo
contrario el negocio deja de ser rentable.
En pocas palabras, una actitud
insolidaria y miserable que perjudica a los que menos tienen; a los que están
obligados a peregrinar de parada en parada tratando de conseguir en qué llegar
a horario al trabajo o a cualquier otra obligación.
Si la Municipalidad en realidad
velara por sus vecinos, tendría que haber salido hace muchos días, apenas se
advirtieron que las demoras en las frecuencias llegaban a duplicarse en la
mayoría de los barrios.
Ahora, virtualmente triplicada esa demora, el
pasajero es como si hubiera sido víctima de la resignación, por aquello de “es
lo que hay”.
Pero los cordobeses merecemos,
al menos, algo de ese respeto que no hay.
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El reportaje completo al
Presidente del Colegio de Farmaceuticos de la Provincia de Córdoba, Dr. Germán
Daniele, forma parte del audio integral del programa de este domingo, en el
costado derecho del blog. Los temas abordados entre Gonio Ferrari y el Dr. Daniele
fueron entre otros el comportamiento del PAMI con los jubilados en materia de
medicamentos, la incidencia de los laboratorios, la cobertura para los
afiliados y otros temas de interés general.
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LA MEGACAUSA Y VIAJAR AL FUTURO
Las fotos envejecidas que vamos a mostrar al ilustrar este comentario
sirven para viajar con la imaginación al futuro, tal vez a un manual de
historia del año 2057, en el que algún curioso buscador de verdades se dedique
a escudriñar la revuelta causa del Registro de la Propiedad de Córdoba.
Así, si comienza por explorar las larguísimas listas de condenados
como temibles delincuentes de cuello blanco, será muy probable que se sorprenda
cuando descubra que fueron integradas, más allá del pequeño grupo de autores
confesos con, a saber: un militar, una escribana jubilada de 67 años y otra de
71, la secretaria de una escribanía, dos empleadas de comercio, dos vendedores
de autos, el dueño de una ferretería, un comerciante gastronómico y un
ingeniero civil.
Si piensa usted que eso es todo, está muy equivocado porque también
recibieron condenas un visitador médico, dos amas de casa, un carnicero, un
chofer de larga distancia, un repartidor de gaseosas, un pintor, un albañil, el
empleado de una concesionaria, un trabajador del campo, una empleada del
Registro jubilada por cáncer de mama y en tratamiento psiquiátrico, un
particular que extraía áridos, un escribano de 72 años y otra escribana de 73.
También, aunque no lo crea, un colocador de alarmas de autos, un mozo,
dos abogados, un maestro mayor de obras, una instructora de pilates, una
cosmiatra, un vendedor de celulares, un señor de 80 años que criaba lechones en
el campo, una empleada doméstica, un profesor jubilado, un guardia de
seguridad, una profesora de educación física, un docente universitario, y
muchos, muchos similares.
En la historia recordarán a otras listas.
En el presente y no es mi intención defender a Petrone cuyo expediente
en particular no he leído, no escapa a la más distraída de las miradas que su
persistente y populosa difusión en esta causa, sólo pretende justificar la
masacre de tantos y tantos trabajadores.
COMPREMOS INDUSTRIA ARGENTINA… EN CHILE
Me cuentan que algunos días,
especialmente en los fines de semana, las colas para pasar a Chile desde
nuestro país, tenían más de 10 kilómetros de vehículos de todo tipo: autos,
camionetas, motos, furgones cuyos conductores y a veces con familias numerosas,
aguantaban con paciencia que los trámites se apresuraran.
No había muchas protestas,
porque la expectativa de cruzar la frontera y darse el gusto de comprar lo que
fuera a precios más baratos que en nuestro país, borraba cualquier lógico y
humano atisbo de cansancio o impaciencia.
Las estadísticas publicadas en
los últimos días hablan de multitudes de argentinos que cruzaron la Cordillera
e hicieron tiritar sus tarjetas de crédito y los bolsillos en los comercios
chilenos, con enorme mayoría de mendocinos y sanjuaninos y en tercer lugar,
cordobeses.
Es simple de entender no en
este caso el fervor turístico de los viajeros, sino su manera de eludir los
abusos que aquí entre nosotros se cometen con los precios al no existir norma
que los regule o les aplique un máximo: el mecanismo es el de la oferta y la
demanda, aunque hay casos que ni siquiera así se entienden.
Hay mercaderías básicas entre
nosotros, por ejemplo la ropa, aparte de los electrodomésticos o las cubiertas
para vehículos que con relación al fabricante aparecen a la venta con un
recargo del 400 por ciento o más en muchos casos, sobre el valor original,
incluidos los medicamentos que se fabrican en Argentina y otros productos del
mismo origen.
¿Es acaso por la carga
impositiva que aquí llevan los productos?
Es probable que así sea en
muchos casos pero no es así en la mayoría, sino simplemente que es necesario y
oportuno señalar a las etapas de la intermediación y al vendedor final, que van
haciendo cada uno su propio colchón aplicando el conocido y dañino “por las
dudas”.
Otra causa es que el
comerciante está mal acostumbrado por la pasividad del comprador argentino, que
se resigna a que lo esquilmen como si no le costara sacrificio ganar peso a
peso.
Los comerciantes del lado de
aquí se quejan calificando de ilegal y desleal la competencia, lo que les ha
reducido al mínimo las ventas y por ende las utilidades, justo cuando tienen
que responder a la presión tributaria y al pago de los costosos servicios que
padecemos nosotros.
Es probable que así caigan en
cuenta que la angurria desmedida suele ser pasible de ciertos castigos y se
acostumbren a moderarse en cuanto a las utilidades.
Los hoteleros se quieren salvar
en un par de meses para todo el año; los comerciantes en general prefieren
cobrar más y vender menos que operar al revés y así es que estamos condenados a
los caprichos de un consumismo que se está devorando la cola.
Lo de Chile es un serio aviso;
una advertencia de que estamos haciendo las cosas mal, porque cuando andan
bien, son de afuera los que vienen a comprarnos.
Y eso, hace demasiado tiempo
que no ocurre.
LA IMPUNIDAD AL VIOLADOR DE LA CALERA
Es un tema recurrente por la
cantidad de casos de policías corruptos que se ha venido conociendo en los
últimos días, lo que contrasta muy sensiblemente en la sociedad con el reciente
sacrificio de dos fieles exponentes del uniforme azul, como parte de su deber y
compromiso que es proteger vidas y bienes de la comunidad como brazo armado de
la Justicia.
El tema de Leandro Castañares,
acusado de múltiples casos de violación, ya pasó de la categoría de estrépito
mediático para inscribirse en la memoria como uno de los escándalos más
resonantes, por lo que hasta ahora se sabe -solo la punta del iceberg- de la
participación o la omisión policial en el asunto, lo que le permitió al
futbolista amateur de La Calera gozar de la enorme ventaja de 144 días de
impunidad.
Durante esos días es que se conocían las actividades del
sexópata, desde el hecho inicial en perjuicio de una joven de 17 años que en su
momento ¡el 30 de julio de 2016! lo denunciara con nombre y apellido aportando
la fotografía, el número telefónico, su perfil en redes sociales de internet,
el domicilio y por poco el grupo sanguíneo, el talle y su número de calzado.
Y como desde aquel momento nada
se hizo en materia de eso que tanto y tanto aburren desde la conducción
policial que le llaman prevención, teniendo todos los datos que hubieran
permitido actuar en consecuencia y evitar la seguidilla de hechos similares, es
que la propia policía le regaló a Castañares por amiguismo, conveniencia o por
lo que corno fuera, un escandaloso tiempo de indemnidad como para reincidir en
cinco o más ocasiones con otras víctimas.
Quienes con el encubrimiento y
la complicidad de su silencio enterraron los otros hechos buscando el olvido,
debieran estar tan presos como el acusado porque se valieron de su condición de
autoridad para esconder hechos incalificables, que avergüenzan a la fuerza y a
quienes se desempeñan allí con sacrificio y honestidad.
Hurgar hasta el hueso es lo
único que hará que la sociedad recobre el respeto hacia una policía que por lo
que se aprecia, tiene “nichos” estructuralmente corruptos que se le pasan
inexplicablemente por alto a sus autoridades y a la conducción política
ministerial, donde al respecto estalla un ominoso silencio, a veces tímidamente
quebrado por alguna promesa marketinera o anuncios de limpieza que luego no se
practica.
Habría que preguntarles, en este orden, a cuántos
"candidatos" flojos de papeles (sabiéndolo o no) recomendaron para
ingresar a las filas policiales: el Sr.
Gobernador, el Sr. Vicegobernador, los Sres. Ministros del gabinete, los Sres.
legisladores de todos los partidos, los punteros políticos de todos los
colores, los altos funcionarios nacionales, los miembros de la Justicia, los
importantes empresarios, los dirigentes sindicales, los Sres. ex gobernador, ex
vice, ex ministros y legisladores Mandato Cumplido, ex funcionarios de
anteriores administraciones, figuras populares de la música y del deporte;
jerarcas de iglesias y credos, periodistas locales y nacionales, amigotes
personales, compañeros de gimnasio y de copas; prominentes abogados, amigas de
la infancia, etc., etc., etc...
Será la mejor
manera de hurgar en los antecedentes reales, no "lavados", de cada
uno de los ingresantes que poco a poco con sus inconductas fueron minando la
calidad humana de una fuerza que debió ser ejemplo, de acuerdo con su alto
nivel de equipamiento tecnológico.
Alguna vez
hay que empezar por el principio, aunque parezca una burrada. Y una vez
depurada, quitarle a la Policía su condición de instrumento político del
gobierno de turno y transformarla en lo que jamás debió dejar de ser: una
organización profesional para la prevención del delito y lucha contra la
delincuencia.
Porque los
gobernantes cada uno en su turno, en lugar de profesionalizar a la policía la
politizaron como bolsa de trabajo. De no hacerlo, lo que vemos ahora es solo el
comienzo del caos absoluto que abre las puertas de la anarquía. Por ahora y sin
ser apocalípticos y guiándonos solo por la alarmante realidad, estamos en el
umbral...
No hay caso y vale repetirlo
hasta el cansancio, en procura que quienes mandan lo tomen como una consigna,
un clamor que parte desde la sociedad cordobesa: si no saben, no pueden o no
quieren terminar con la mugre interior, jamás podrán limpiar la mugre de
afuera.
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