Desgrabación
de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los
buenos” nº 789 emitido el 30 de julio de 2023 por la AM580 Radio Universidad
Nacional de Córdoba.
Un tema rayano en la novela
EL FALSO MEDICO ANTE LA JUSTICIA Y DE
ALLÍ SALDRÁN QUIENES LO APADRINARON
El jovencito que era Ignacio Nicolás Martín, quien ni siquiera se inició como curandero pero llegó a presentarse y ser aceptado como médico por funcionarios cuya principal obligación es velar por la salud de la sociedad, de alguna manera se las arreglaron para apadrinarlo y en el silencio que imponían los lutos y las angustias de la pandemia, no se dieron cuenta del enorme daño que le estaban metiendo en el alma la sociedad cordobesa.
El pibe por fin terminó batiendo, por eso del instinto de conservación, que era una víctima de eso que no hace mucho tiempo se le llamaba “obediencia debida” con lo que muchos delincuentes se protegieron y encajaron sus culpas hacia arriba, con una relativa suerte porque la justicia -me refiero a la justicia en serio y no a la manipulada- llegó por fin a poner las cosas en orden.
El mocoso, pintón y simpático, inteligente como todo sicópata o candidato a tal condición, se dio lujos que pocos estudiantes avanzados en medicina han podido darse, como por ejemplo ocupar una jefatura de servicios en momentos tan cruciales para los argentinos.
En un marco y escenario donde al parecer no existían las dudas, se perpetró el atropello de meterlo de prepo en actividades que le eran ajenas y para lo cual Ignacio Nicolás tenía siempre un verso como tocador de oído, cuando en realidad no estaba habilitado ni siquiera para colocar una curita en un raspón.
La causa ya pasó a ser de dominio público, pero lo importante ahora es conocer algunos detalles de lo que poco se gestiona, como por ejemplo quienes son las restantes victimas aun ocultas que sufrieron la atención del chico, qué se hará para atender a los familiares de quienes fueron víctimas de su peligroso descaro, pero más que nada, quiénes fueron los responsables, en la cadena de funcionarios desde abajo hasta la cumbre, que un pendejo disfrazado de galeno pasara a ser dueño de vidas y lo peor, responsable de alguna muerte.
Esto no es joda, aunque se tienda a extinguir el fuego que afecta a toda la ciudadanía porque si así es como se esmeran en averiguar antecedentes de quienes dicen ser lo que no son, la sociedad aun corre serio peligro.
No se conocen renuncias, ni se sabe si existe una responsable y seria investigación para no dejar cabos sueltos ni la más mínima duda en la cadena de responsabilidades, porque el padrinazgo debe ser muy fuerte para intentar llevarlo a los campos del silencio y los olvidos, tanto en Rio Cuarto como aquí.
Lo antes posible tenemos el derecho de saber quién o quiénes tienen la culpa de este hecho injurioso, que coloca en un nivel sujeto a dudas a todos los integrantes de lo que se puede llamar “cadena de mandos” que hicieron la vista gorda, apelaron a la comodidad o se hicieron los burros frente a una transgresión de tamaña magnitud y con lamentables y evitables consecuencias.
No es cuestión de reducir este episodio a una travesura juvenil, porque sería faltarle el respeto a la sociedad, a su inteligencia y a su derecho a la salud.
…Y después hablan de “ñoquiato”
EL SENADO YA SE ENCAMINA A BATIR UNO DE LOS
PEORES RÉCORDS EN LA ACTIVIDAD LEGISLATIVA
Lo peor que se instala en el seno de la sociedad argentina, es eso que se llama engordar las dudas, porque la vieja y malsana costumbre de la instauración del “ñoquiato” nos daña diariamente como sociedad y ayuda a que la clase política dirigente siga acumulando dudas en su contra, en lo que caen, hay que reconocerlo, víctimas que son inocentes de las transgresiones que se cometen.
Es lo de menos la abultada suma que gana un legislador, porque en su defensa sostienen que el trabajo es arduo, responsable, riesgoso en muchos aspectos, pero nadie se refiere a otras certezas que anidan en la sociedad como por ejemplo los arreglos que se maquinan, los acuerdos que se manejan vía chequera o las trapisondas que se perpetran en nombre del ejercicio de la Democracia con lo que suman adeptos a gestiones tristemente célebres como las incursiones militares en el poder.
Ellos han sido elegidos para trabajar, para cumplir con un mandato que más que su origen popular, radica en la seriedad y responsabilidad con la que se asume un cometido tan valioso que nos consolida como sociedad, siempre que se cumplan los postulados que tanto se pregonan especialmente en campañas precomiciales.
El Frente de Todos solo logró sesionar una vez para tratar leyes en todo el primer semestre de este año, y se duda que volvería a reunirse antes de las PASO, con lo cual se frustraría el nombramiento de una jueza clave para el kirchnerismo.
En la Cámara alta, que preside Cristina Kirchner, la primera mitad de 2023 registró la marca más baja en cantidad de sesiones de la última década, porque el oficialismo perdió el quórum propio en febrero por el viraje de cuatro senadores propios que conformaron un bloque aparte, al que llamaron Unidad Federal, junto a la schiarettista Alejandra Vigo.
Resumiendo hasta el momento hubo una sola sesión ordinaria el 13 de abril, donde se aprobaron nueve proyectos y pliegos judiciales, y una segunda sesión de carácter informativo a cargo del jefe de Gabinete, Agustín Rossi y vale agregar que el oficialismo convocó en otras dos oportunidades, pero ambas fracasaron porque la oposición vació el recinto.
De tal manera, el Senado quedó muy lejos del promedio de la última década, ubicado en 7,4 sesiones en los primeros seis meses del año pero un ejemplo en contrario es el de 2020, año no electoral: en plena pandemia, con sistema remoto y una composición política distinta, el Senado pudo realizar siete sesiones en ese mismo lapso.
Algunos de los nueve proyectos que aprobó el Senado en su única sesión ordinaria son la ley de alcohol cero al volante, la eliminación del trámite de fe de vida para jubilados, el reconocimiento de la lengua de señas, la ley de enfermería y un programa nacional de cardiopatías congénitas.
El miércoles 12 de julio pasado, el oficialismo procuró sesionar para tratar una serie de pliegos judiciales, entre los que se encontraba el de la jueza Ana María Figueroa para la estratégica Cámara de Casación Penal.
La magistrada, señalada como cercana al kirchnerismo, cumple 75 años el 9 de agosto próximo y si no se le prorroga el mandato no le quedará otra alternativa que jubilarse y vale señalar que aquella sesión se frustró por la ausencia de dos senadores de Unidad Federal que quebraron a último momento su compromiso de asistir, el jujeño Guillermo Snopek y el entrerriano Edgardo Kueider, sumados al aliado oficialista Alberto Weretilneck, gobernador electo de Río Negro.
Recientemente el Gobierno hizo gestos hacia Snopek: intervino el Partido Justicialista de Jujuy, como pedía el senador, y permitió que la lista que lo lleva como candidato a diputado pueda acoplarse a la boleta de Sergio Massa, después de que la Junta Electoral de Unión por la Patria la hubiera “desenganchado” tras la sesión fallida.
El pliego de Figueroa corre peligro de naufragar y su lugar en el tribunal que tiene en su poder y para resolver causas tan sensibles para la vicepresidenta, como Hotesur-Los Sauces y memorándum con Irán, podría quedar vacante.
En cualquier actividad productiva existe un mandamiento de hierro que predica aquello que el que no trabaja, no cobra, lo que no ocurre con los legisladores según tengo entendido.
Pero no hay que desesperarse porque ante una eventual pobreza que pueda atacarlos, la Sra. Cristina Elizabeth Fernández viuda de Kirchner tiene para esta contingencia de algún descuento por inasistencias, una patriótica inclinación por el ahorro.
Según su declaración patrimonial, en el último año lo duplicó llegando a contar matemáticamente hablando con el doble del año pasado, algo así como 1.200 millones de pesos si no me equivoco.
Siempre es bueno tener un chanchito que los atesore…
Vivir en la irrealidad provoca ceguera
GABRIELA CERRUTI DIJO QUE NO HAY HAMBRE EN LA
ARGENTINA, MIENTRAS MASTICABA UN BIFE DE LOMO
El tema del hambre debe ser uno de los más preocupantes y dolorosos que podemos abarcar, porque suena ridículo que un país tan rico como el nuestro pero histórica y permanentemente mal administrado, nos transforma en víctimas de una pobreza, que naturalmente no alcanza a quienes de alguna manera tienen poder ya sea político, empresario, artístico o deportivo y de cualquier otra actividad rentable.
Pero de allí a sostener que en Argentina no existe el hambre, es reírse de la desgracia ajena porque parte de una bocaza con estómago alimentado lo suficiente como para tener esa energía ofensiva que desnuda, además, una perniciosa manera de mostrar la propia insensibilidad.
Doña Gabriela Cerruti, vocera presidencial o lenguaraz como prefieran llamarla, cometió la reiterada torpeza de sostener lo insostenible como tantas veces lo hiciera.
Más o menos, palabra más o palabra menos, sostuvo algo así como que el hambre es nada más que una sensación, aunque para ella así lo sea porque lo dijo seguramente después de embuchar algún sabroso y nutritivo plato.
Pero negar el hambre existente, aparte de ser una ofensa a la realidad, es muestra cabal del desconocimiento que padecen sin ponerse colorados de vergüenza, muchos funcionarios que tienen prebendas por doquier y que la alimentación no significa ningún drama familiar, para ellos ni para su descendencia.
Es curioso que pocos le hayan salido al cruce, porque aparte de su prepotencia funcional, la ceguera absoluta no le permite ver ni evaluar un presente que estadísticamente muestra de qué manera abrumadora aumentan en Argentina el hambre y la indigencia.
Debiera esa doña enterarse de un principio que supiera enunciar Séneca, cuando sostuvo que “el hambriento no razona, no le importa la justicia, ni escucha las oraciones”.
En consecuencia, su desconocimiento de la situación pareciera que alimenta su perverso sentido de la opulencia propia y su postura marginada de toda sensibilidad frente a las penurias y las carencias del prójimo.
Pocos días atrás se produjo un accidente rutero creo que en San Luis, o en Córdoba… bahhh, en algún lugar de nuestro país, cuando volcó un camión que llevaba como carga algunas toneladas de carne vacuna faenada.
Decenas de personas ocuparon el lugar y se llevaron toda la carne, que eran medias reses, costillares, etc. Y parece que no hubo poder policial que lo impidiera.
Y aquí muy cerca de nosotros, sobre calle 27 de Abril y junto a un bonito restaurante ubicado al costado de la Catedral, frecuentado por turistas de todos los orígenes, habían puesto fogones donde se cocinaban, sobre la calle en el carril junto a la vereda, costillares y otros cortes. Ocurrió que en un momento cerca del mediodía pasaron dos muchachos en una moto, se bajaron, sacaron un costillar de la cruz donde los asaban y raudamente se fueron a gozar del manjar. Y no todo terminó ese día, porque el hecho se repitió unos pocos días después en el mismo lugar y con idéntico estilo, pese a que en la Plaza San Martín suele haber presencia policial.
Eso, más que el propósito de hacer daño, en cualquier parte del mundo se llama hambre.
La mira en el Registro de la Propiedad
UNA PILDORITA DE RACIONALIDAD BIEN VENDRÍA
PARA NORMALIZAR UNA CAUSA QUE DEJA DUDAS
En una obra de teatro realizada frente a las puertas de Tribunales hace unos años un grupo de familiares de la causa del Registro de la Propiedad de Córdoba, se acerca con urgencia a un médico llevando a la Justicia Cordobesa, y explican al galeno que están muy preocupados por su extraño modo de actuar, ya que, según le relatan, sus razonamientos no tienen lógica, ha perdido el juicio y la sana crítica racional, ha olvidado lo que dice la Constitución, luce perdida y desorientada, alucina, no comprende lo que lee, ve delincuentes por todos lados, confunde los hechos y se contradice en sus escritos.
Mientras tanto la Justicia forcejea, gritando que los va a mandar a todos a prisión preventiva ante lo que los
los familiares insisten, ¿se da cuenta doctor? Así está todo el tiempo. El médico entonces decide hacerle algunas pruebas, solicita al enfermero que le alcance la Constitución y pregunta a la Justicia: Supongamos que usted está investigando un delito y sospecha de algunas personas que han estado en el lugar, ¿Los investiga? La Justicia responde: ¡Qué fácil! Los mando a encerrar con prisión preventiva y después los investigo.
Inquieto, el doctor continúa ¿Si usted en un juicio no tiene pruebas de que una persona es culpable, qué hace?
Molesta y encrespada por la impertinencia, la Justicia responde: ¡Los condeno a todos! Si para eso los meto en prisión preventiva, ¡yo sé que son culpables!
El médico razona que ante estos síntomas la Justicia está realmente enferma, por lo que decide recetar unos comprimidos con una combinación de objetividad, imparcialidad, independencia, sinceridad, igualdad, legalidad, racionalidad y libertad que puedan volverla a la normalidad, aunque hasta ahora constituye un desafío a la más avezada imaginación, descubrir cómo administrar a la Justicia esta mágica pildorita.
Tiempos de asombrosas sorpresas
ACTITUD DE HUMANA SOBERBIA ES PENSAR
QUE SOMOS ÚNICOS SERES EN EL UNIVERSO
Pascal comentó tiempo atrás que lo espantaba el silencio eterno de esos espacios infinitos, aludiendo al universo del que formamos una milmillonésima parte, a lo que el mismo Pascal definía como una esfera infinita cuyo centro está en todas partes y la circunferencia en ninguna.
Naturalmente y aunque el genio íntimamente lo sospechara, no había llegado al tiempo actual en que de acuerdo con una promesa formal que viene desde los Estados Unidos, adelantó que en pocos días las Humanidad en su conjunto podrá tener la certeza que no somos los únicos del universo, sino que hay otras civilizaciones en remotísimas latitudes de esta maravilla de la creación que es el Universo.
Es entonces que nos asaltan las dudas y las incógnitas; las imaginaciones vuelan y se engrandecen en la mente de cada terrícola, incluyendo a los eternos soberbios que a lo mejor siguen sosteniendo que somos los únicos que habitan esas inconmensurables distancias y lugares.
Ya se los imaginan cabezones, de brazos extensos, de cerebro más grande que el corazón, el estómago y otros órganos vitales, de lenguaje silente pero de transmisión mental, que no saben llorar, lo que es reir, hablar, sufrir, amar, algo asi como, una vida mecanizada sin eternidades ni sufrimientos, pero el detalle que más preocupa a quienes sueltan su potencia cerebral en todas direcciones, es de qué manera se reproducen, como crecen, de qué se alimentan y tantas otras dudas.
Sepamos esperar, porque la Humanidad está en los umbrales de todas las fantasías que se unen para alocarnos en cuanto a creencias y otras nimiedades, que incluso abarcan a los enfoques religiosos.
La mística de la espera, de las incertidumbres, de lo que llegaremos a saber que existe desde el fondo de todas las historias, es lo que moviliza a la población mundial a perder la paciencia frente a las demoras que pudieran existir hasta el día de la gran revelación.
Algunos que minimizan el acontecimiento, se limitan a preguntar cómo se divierten, si toman alcohol, si existe el fútbol, si viven vestidos o en cueros o si las familias son numerosas.
Estamos en tiempos de tantas dudas, pero en el acceso a una maravilla que desde chiquitos nos vienen quitando el sueño…
Cuando se devele el misterio, habrá muerto la humana soberbia.
Jovatos: “hay que enfundar la mandolina”
LA DESPEDIDA TANGUERA CON EL FINAL DE UN
TEMAZO DE HORACIO ZUVIRÍA DEDICADO A LOS
VETERANOS ADICTOS A LAS MUJERES JÓVENES
Un tema tanguero sin tiempo, porque nunca desaparecerán los veteranos, más cerca del crematorio que de la vida nocturna, que se empeñan en deslumbrar a mujeres demasiado jóvenes, a las que doblan en edad y más en algunos otros casos. La creatividad de los poetas, como el caso de Horacio Zuviría, permitió esta última estrofa antológica, que en la radio se difundiera en la voz del eterno Carlos Gardel:
“Qué querés, Cipriano, ya no dan más jugo
tus 50 abriles que encima llevás
junto con el pelo, que fugó del mate
se te fue la pinta, que no vuelve más.
Dejá las pebetas para los muchachos,
esos platos fuertes no son para vos;
piantá del sereno, andate a la cama
que después mañana, andás con la tos.”
Y llegamos al final de la edición nº 789 de SLB y no
lo olvide: pase lo que pase y cueste lo que cueste,
jamás deje
de ser feliz. Como siempre, agradezco a
Mariela Kusik, a Conrado Vicens, a Sabri Bustos, a la
polifuncional Cele Pereyra y a Oji en la posproducción.
Siga en la 580, llega “La voz de la paz” con Lita y Lalo.
Gestión, modestamente: Gonio Ferrari… ¡y equipazo!
Hasta el próximo domingo, y mil gracias
UNA PILDORITA DE RACIONALIDAD BIEN VENDRÍA
PARA NORMALIZAR UNA CAUSA QUE DEJA DUDAS
En una obra de teatro realizada frente a las puertas de Tribunales hace unos años un grupo de familiares de la causa del Registro de la Propiedad de Córdoba, se acerca con urgencia a un médico llevando a la Justicia Cordobesa, y explican al galeno que están muy preocupados por su extraño modo de actuar, ya que, según le relatan, sus razonamientos no tienen lógica, ha perdido el juicio y la sana crítica racional, ha olvidado lo que dice la Constitución, luce perdida y desorientada, alucina, no comprende lo que lee, ve delincuentes por todos lados, confunde los hechos y se contradice en sus escritos.
Mientras tanto la Justicia forcejea, gritando que los va a mandar a todos a prisión preventiva ante lo que los
los familiares insisten, ¿se da cuenta doctor? Así está todo el tiempo. El médico entonces decide hacerle algunas pruebas, solicita al enfermero que le alcance la Constitución y pregunta a la Justicia: Supongamos que usted está investigando un delito y sospecha de algunas personas que han estado en el lugar, ¿Los investiga? La Justicia responde: ¡Qué fácil! Los mando a encerrar con prisión preventiva y después los investigo.
Inquieto, el doctor continúa ¿Si usted en un juicio no tiene pruebas de que una persona es culpable, qué hace?
Molesta y encrespada por la impertinencia, la Justicia responde: ¡Los condeno a todos! Si para eso los meto en prisión preventiva, ¡yo sé que son culpables!
El médico razona que ante estos síntomas la Justicia está realmente enferma, por lo que decide recetar unos comprimidos con una combinación de objetividad, imparcialidad, independencia, sinceridad, igualdad, legalidad, racionalidad y libertad que puedan volverla a la normalidad, aunque hasta ahora constituye un desafío a la más avezada imaginación, descubrir cómo administrar a la Justicia esta mágica pildorita.
Tiempos de asombrosas sorpresas
ACTITUD DE HUMANA SOBERBIA ES PENSAR
QUE SOMOS ÚNICOS SERES EN EL UNIVERSO
Pascal comentó tiempo atrás que lo espantaba el silencio eterno de esos espacios infinitos, aludiendo al universo del que formamos una milmillonésima parte, a lo que el mismo Pascal definía como una esfera infinita cuyo centro está en todas partes y la circunferencia en ninguna.
Naturalmente y aunque el genio íntimamente lo sospechara, no había llegado al tiempo actual en que de acuerdo con una promesa formal que viene desde los Estados Unidos, adelantó que en pocos días las Humanidad en su conjunto podrá tener la certeza que no somos los únicos del universo, sino que hay otras civilizaciones en remotísimas latitudes de esta maravilla de la creación que es el Universo.
Es entonces que nos asaltan las dudas y las incógnitas; las imaginaciones vuelan y se engrandecen en la mente de cada terrícola, incluyendo a los eternos soberbios que a lo mejor siguen sosteniendo que somos los únicos que habitan esas inconmensurables distancias y lugares.
Ya se los imaginan cabezones, de brazos extensos, de cerebro más grande que el corazón, el estómago y otros órganos vitales, de lenguaje silente pero de transmisión mental, que no saben llorar, lo que es reir, hablar, sufrir, amar, algo asi como, una vida mecanizada sin eternidades ni sufrimientos, pero el detalle que más preocupa a quienes sueltan su potencia cerebral en todas direcciones, es de qué manera se reproducen, como crecen, de qué se alimentan y tantas otras dudas.
Sepamos esperar, porque la Humanidad está en los umbrales de todas las fantasías que se unen para alocarnos en cuanto a creencias y otras nimiedades, que incluso abarcan a los enfoques religiosos.
La mística de la espera, de las incertidumbres, de lo que llegaremos a saber que existe desde el fondo de todas las historias, es lo que moviliza a la población mundial a perder la paciencia frente a las demoras que pudieran existir hasta el día de la gran revelación.
Algunos que minimizan el acontecimiento, se limitan a preguntar cómo se divierten, si toman alcohol, si existe el fútbol, si viven vestidos o en cueros o si las familias son numerosas.
Estamos en tiempos de tantas dudas, pero en el acceso a una maravilla que desde chiquitos nos vienen quitando el sueño…
Cuando se devele el misterio, habrá muerto la humana soberbia.
Jovatos: “hay que enfundar la mandolina”
LA DESPEDIDA TANGUERA CON EL FINAL DE UN
TEMAZO DE HORACIO ZUVIRÍA DEDICADO A LOS
VETERANOS ADICTOS A LAS MUJERES JÓVENES
Un tema tanguero sin tiempo, porque nunca desaparecerán los veteranos, más cerca del crematorio que de la vida nocturna, que se empeñan en deslumbrar a mujeres demasiado jóvenes, a las que doblan en edad y más en algunos otros casos. La creatividad de los poetas, como el caso de Horacio Zuviría, permitió esta última estrofa antológica, que en la radio se difundiera en la voz del eterno Carlos Gardel:
“Qué querés, Cipriano, ya no dan más jugo
tus 50 abriles que encima llevás
junto con el pelo, que fugó del mate
se te fue la pinta, que no vuelve más.
Dejá las pebetas para los muchachos,
esos platos fuertes no son para vos;
piantá del sereno, andate a la cama
que después mañana, andás con la tos.”
Y llegamos al final de la edición nº 789 de SLB y no
lo olvide: pase lo que pase y cueste lo que cueste,
Mariela Kusik, a Conrado Vicens, a Sabri Bustos, a la
polifuncional Cele Pereyra y a Oji en la posproducción.
Gestión, modestamente: Gonio Ferrari… ¡y equipazo!
Hasta el próximo domingo, y mil gracias
SIN DESPERDICIO UN CAPO GONIO
ResponderBorrarAunque no lo firme, agradezco el concepto. Siempre es bueno un mimo para el alma...
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