4 de noviembre de 2018

S.L.B.: HISTÓRICO Y ABUSIVO "POR LAS DUDAS" EN LOS PRECIOS - EN FADEA AHORA SE TRABAJA EN SERIO Y POR EL PAÍS - UN CURSO DE AGUA ENTRE CÓRDOBA Y EL RIO PARANÁ - LA MEGACAUSA Y LIBERTAD, INOCENCIA Y JUSTICIA - VACA MUERTA, EL FUTURO VENTUROSO - HABRÁ MUSEO DEL CUARTETO Y SEPULTARÁN AL "CORDOBAZO" - BONUS TRACK: BOCA VS. RIVER CON AMBAS HINCHADAS, ETC.

Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa que difunden, plagados de deficiencias técnicas esta vez, la FM88.5 y la AM580 ambas de Radio Universidad Nacional de Córdoba. Versión obtenida en la pésima emisión n° 541  del 4/11/18 de “Síganme los buenos”.

NUESTRO FOLKLÓRICO “POR LAS DUDAS”
QUE  SIGUE  REINANDO  EN  LOS  PRECIOS
   En un marco de absoluta desorientación, los argentinos en mayoría no alcanzamos a comprender ciertos vericuetos de la economía y de la política, por donde transitan entre otros componentes la mentira, la demagogia, la ignorancia y los errores de gestión.
   Por una cuestión meramente lógica, llegamos a pensar con mucho de romanticismo y candidez, que todos los productos y servicios aumentaban empujados por el dólar en constante ascenso y hasta se puede decir que había en nosotros, los argentinos, una especie de irrebatible resignación frente a los ascensos en el mercado cambiario, que en el mejor de los casos a veces mostraban que los valores de un día para otro permanecían estables.
   Y llegamos al colmo de la tontera cuando se nos ocurrió elucubrar que como estaban las cosas, podíamos confiar en que toda la mercadería y los servicios que habían subido su costo a la par del dólar, cuando bajara el billete verde o ascendiera nuestro alicaído peso, los precios en general acompañarían esa movida.
   Tontos y retontos, porque los pícaros empresarios cuando se engolosinaron con las utilidades de siempre a las que sumaban el hijaputesco e ilegal “por las dudas”, la siguieron embolsando mientras lloraban y muchos todavía lloran.
   Tuvimos días de dólar superando los 42 pesos con los que Crónica TV, América 24, C5N y otros voceros de la nostalgia y la impunidad, sentimiento y costumbre ahora en jaque, se engolosinaron con sus apocalípticos pronósticos, suponiendo que en pocos días estaría dejando atrás los 50 mangos por unidad.
   Al no ocurrir tal desastre al menos por ahora, se nos cruzó por la cabeza que existiría un retroceso en los precios, cuando el dólar usó el tobogán y se deprimió hasta un impensado 35 pesitos y algunas monedas menos.
   Pero nada cambió, porque como el pacman, lo que devoran los empresarios difícilmente lo vomiten aunque les laxen el alma.
   Y lo más curioso, es que las naftas siguieron subiendo su precio de venta, con el pretexto que está ajustado al dólar que siguió bajando y al valor del crudo, que está más deprimido que nunca.
   Es probable, más allá de lo respetable y estrictamente técnico encontrarle alguna explicación simplista y primaria a esta situación de los aumentos divorciados de las subas y bajas del dólar, pero emparentados con el casi atávico “por las dudas” de buena parte del empresariado argentino: los que compraron caro pocos días atrás, ahora no quieren vender barato y atesoran la mercadería en la espera de vientos monetariamente favorables.
   Una situación dolorosa porque el poder lo permite, cuando debiera intervenir de alguna manera como expresión de respeto a una mayoría que viene sufriendo los embates de una economía ciclotímica y un Estado ávido de tributos.
   El escritor Oscar Wilde quien seguramente no era experto en manejos presupuestarios, supo arriesgar un adecuado concepto al sostener que “aconsejar economía a los pobres es a la vez grotesco e insultante. Es como pedirle que coma menos, al que se está muriendo de hambre”.

ADIÓS AL OCIO Y A LOS  AVIONES DE
CARTÓN QUE  NO VUELAN. EN FADEA
SE TRABAJA EN SERIO Y POR EL PAÍS
   Si desde aquí buscáramos la más fácil, la menos complicada y la efectista evaluación, nos limitaríamos a comparar desde aquella FADEA de los aviones de cartón, o los esqueletos de aeronaves armados para la foto, o las sesudas conferencias que muy bien pagas, ofrecían actrices del rubro gatuno estrechamente ligadas al poder nacional de años atrás, frente a la realidad actual proyectada en serio, sin exageraciones ni mentiras que nadie en su sano juicio podía creer.
   Ahora ese gran emprendimiento hijo o nieto de un militar peronista como lo fuera el brigadier Juan Ignacio San Martín y su sentido futurista, pionero indiscutible de la Córdoba industrial, quien transformó a la vieja Fábrica de Aviones que databa del año 1928 como Instituto Aerotécnico en Industrias Aeronáuticas y Mecánicas del Estado, IAME, donde se desarrollaron emprendimientos aparte de los vinculados con la aeronavegación, con la naciente industria de la fabricación de automóviles.
   Espectáculo aparte que incluso convocaba a turistas extranjeros, era la salida del turno tarde, cuando más de 5.000 motos se adueñaban de la avenida Fuerza Aérea en el regreso de los trabajadores a sus hogares.
   De allí y como apunté recién surgieron automóviles, tractores, motocicletas, aviones livianos y los legendarios Pulqui I y II, primeras aeronaves construidas en Sudamérica e impulsadas por turbinas, a las que la gente llamaba “aviones a chorro”.
   Ahora nuevamente esa institución cordobesa sigue incorporando historias, porque después de un oscuro período en que fue tomada como bolsa de trabajo para activistas políticos, sin fabricar ni un mísero tornillo, retoma su trascendencia al ocuparse del mantenimiento de grandes aeronaves que sirven a importantes empresas extranjeras.
   Y es entonces que cabe un homenaje de reconocimiento a Ércole Felippa, quien desde el sector lácteo pero con dominio absoluto de todo lo que sea producción, se dio a la tarea de emprolijar una actividad que no eran los quesos, sino un himno al ocio y el pago de favores políticos.
    La demagogia fue abatida por la decencia y el compromiso.
    FADEA ya le es útil al país y a todos los argentinos con su ciclópeo esfuerzo de superar tiempos negativos y mostrar su real potencial y de lo que su gente es capaz de encarar, cuando se la conduce con seriedad y profesionalismo.
   Y pensar que para muchos y por el hecho de haber sido designado por un gobierno peronista para hacerla producir en serio, el Brigadier Mayor Juan Ignacio San Martín fue arrumbado en la indecorosa injusticia del olvido.
   ¿Hay alguna avenida, calle, pasaje o plaza que lleve su nombre?
   Es para saberlo, y saber también en dónde se le puede rendir un homenaje a su esfuerzo, su audacia y su memoria.

MEGACAUSA E IMPARCIALIDAD, LIBERTAD,
INOCENCIA,  SENTIDO  COMÚN  Y  JUSTICIA
   En  el contexto de rescatar y recuperar  valores como la libertad, la inocencia, el sentido común y la justicia, desaparecidos en la causa del Registro de la Propiedad de Córdoba, dejé volar mi imaginación buscando posibles formas de solucionar tales ausencias. 
   Se me ocurrió, por ejemplo, qué pasaría, no sólo en esta causa, sino también en la práctica en general,  si en los expedientes de tribunales los imputados se mencionaran con nombres ficticios y no con los reales.  
   Por supuesto que todo lo demás  se mantendría igual, el relato detallado y cualquier antecedente, contacto, relación o conexión que el imputado pudiese tener.
   Todo igual, excepto el nombre.
   Pensemos como ejemplo  en el  Juez que encarceló a dos imputados  reconociendo  que no había ninguna prueba contra ellos,  ni ningún testigo que los acusara, pero igual, él estaba convencido: ¿hubiese hecho lo mismo si el caso fuese anónimo y el encerrado pudiese ser su pariente, amigo, vecino o algún influyente político?
   Y en sentido inverso,  cuando se ignoran las acusaciones contra poderosos personajes,  ¿Se obraría igual si el caso pudiera manejarse como  un anónimo?  Con absoluta seguridad que no.  
   La objetividad y la imparcialidad  brillan por su ausencia, y aunque me digan, y ya sé, que  existen  recursos  para garantizarlas, lo arriba expuesto prueba que no alcanzan. 
   Entonces,  aunque la idea suene descabellada o poco práctica,  habrá que seguir pensando,  porque sin esos pilares no hay  Justicia posible.  

¿UN RÍO UTÓPICO U OTRAS PRIORIDADES
DIGNAS  DE SER  TOMADAS  EN  CUENTA?

   Es innegable que tiene validez uno de los argumentos esgrimidos para encarar una obra de esta magnitud, que es el actuar con proyección de futuro.
   Pero en un país donde por imperio de circunstancias prevalece el día a día por encima de las utopías a largo plazo, se me ocurre que lo trascendente es no dejar de lado las prioridades más acuciantes en el campo social, en salud, educación, justicia o seguridad, sólo por citar algunas urgencias.
   Y esta postura se fortalece al mencionar la pregunta más temida que es ¿quién se hace cargo de lo que puede costar la iniciativa? Y no es únicamente el costo de los trabajos sino de todo lo concerniente a un gran emprendimiento como lo son los estudios previos acerca de su factibilidad, el obstáculo topográfico y otros aspectos que no figuraban en las advertencias que necesita tomar en cuenta todo aquel que opta por la demagogia por encima del sentido común, de la necesidad real y de lo más trascendente que ya comenté: que sea una prioridad.
   Esa especie de emparentamiento o concubinato con otra provincia en momentos tan críticos como los que estamos viviendo, se viste de oportunismo precomicial y necesidad de trascendencia, una trascendencia que disimule el enorme endeudamiento cordobés.
   Tenemos ríos y lagos propios como para regalarles a otras provincias, pero si esos recursos están mal atendidos y son una carga más que una fuente necesaria de sostener y mejorar, pretenderán vendernos que un canal entre Córdoba y el Paraná es imprescindible aunque no lo sea.
   Pero como los caprichos del poder suelen ser imparables por una oposición laxa y ciclotímica, es probable que lleguemos a tener un hermoso río artificial mientras las escuelas sigan luciendo problemas edilicios, los caminos sean desatendidos, sigan faltando viviendas, los incendios se agraven año tras año, la salud pública se aleje cada vez más de la gente y el narcotráfico continúe creciendo sin que nadie lo detenga, como ahora.
   De última y para simplificar, pocas veces y a esto lo certifica la historia, los argentinos hemos tenido la inteligencia de tomar en cuenta la trascendencia de las prioridades.
   La ministra Stanley reveló que existen en el país unos 4.100 asentamientos precarios y barrios populares, de los cuales 167 están en Córdoba, y 112 en nuestra capital provincial.
   Santa Fe tiene más villas marginales: 303.
   Ahora nos hermanará un rio artificial que costaría nada más que 800 millones de dólares.
   Y así estamos…

VACA  MUERTA, PERO CON UN FUTURO DE
GRANDEZA QUE NO DEBEMOS MALOGRAR
   A la sureña Vaca Muerta no fue necesario velarla para que algunos la consideraran un fracaso terminal, cuando en realidad viene a ser, dentro de un país donde sobran pero se esconden las sorpresas, ejemplo de apuesta a un futuro de prosperidad por la enormidad de la riqueza que representa.
   Hablar de autoabastecimiento petrolero y gasífero que siempre formó parte de las utopías mundiales, pasó a ser una especie de exclusividad destinada a políticos y si eran o son demagogos, mucho mejor, porque Vaca Muerta para hacer una analogía, pinta para ser alimento para un menú de grandeza.
   Ya de por sí es trascendente calcular el crecimiento de lo que ni siquiera era un paraje en las enormes lejanías patagónicas, que viene creciendo con legítimas aspiraciones de pueblo castigado por los vientos, el mismo viento que la empuja a ser ciudad, cuando la explotación del yacimiento sea parte de lo cotidiano en un futuro que está al alcance de los almanaques.
   Para estos casos, es justicia reconocer y valorar los orígenes de la criatura que latía prisionera en las entrañas de la tierra, hasta que allá por el tai tantos unos 80 años atrás, un tal Charles Edwin Weaber, geólogo americano, se encontró con este fenómeno de la naturaleza que no es un yacimiento como muchos lo sostienen, sino una formación geológica y sedimentaria a gran profundidad depositada en un mar de edad jurásica que recorre la mayoría de la Cuenca Neuquina, con una superficie total de unos 30.000 kilómetros cuadrados que se extiende por el suroeste de la provincia de Neuquén, el oeste de la provincia de Mendoza, el sur de la provincia de Río Negro y el centro de la provincia de La Pampa.
   Fue denominada con ese “curioso” nombre hace ya muchos años por Weaver, porque se encontraba aflorando en toda la sierra de Vaca Muerta, según lo necesariamente ilustrado por Analía Essayag en la publicación “Energía y Negocios”.
   Y de acuerdo con informes técnicos de encumbrados científicos, Vaca Muerta nos ubica dentro de los cuatro países con mayores volúmenes de producción comercial de gas y petróleo, junto a Estados Unidos, Canadá y China, consignando que entre 2012 y 2015, las inversiones alcanzaron los 10.000 millones de dólares.
   Ya en 2017, operaban más de 19.200 trabajadores en la extracción, sumándoles  40.000 en servicios asociados, 6.500 en productos industriales y 1.600 en maquinaria estimándose que entre 2018 y 2030, Vaca Muerta generará alrededor de 300.000 nuevos empleos y en todo el 2017, se generaron 1.558 millones de dólares en exportaciones, equivalente al 3 por ciento de las exportaciones totales del país y si tomamos en cuenta que para el próximo lustro se calcula la perforación de entre 900 y 1500 pozos en aquellas lejanías, bien podemos ser optimistas en llegar al autoabastecimiento en petróleo y en gas, con excedente como para exportar.
   Y aquella región albergará nuevas ciudades.
   Como bien se puede advertir, seguimos vivos.
   La única muerta, en este caso, es la vaca.

MEMORIA: EL VALOR DE LOS MUSEOS
PARA  ATESORAR  LA  HISTORIA: SÍ AL
CUARTETO  Y UN NO  AL  CORDOBAZO
   Lo comentamos poco tiempo atrás que hace algunos añitos un empeñoso y reducido grupo de periodistas, fotógrafos y camarógrafos de medios gráficos, de radio y televisión que habíamos cubierto aquello que se llamó “Cordobazo” desde la previa, su concreción y las consecuencias emergentes, formamos una asociación civil sin fines de lucro, para apoyar los andamiajes de la memoria que son los elementos que sostienen a la historia.
   Y hablábamos de variadas actividades, muestras, debates, conferencias y sobre todo, la hermandad profesional para aportar elementos que permitieran consolidar los documentos de aquellos tiempos, despojados de banderías políticas, sindicales o de otro orden, considerando hacerlo como una contribución para que el futuro no archivara hechos de tamaña trascendencia que alcanzaron nivel internacional.
   Obviamente todo el despliegue tiene su costo y no siempre las contribuciones voluntarias de los asociados alcanzan, razón por la cual se planteó al gobierno de la provincia, ese del “cordobesismo”, la posibilidad de un subsidio que permitiera el sostenimiento de la entidad.
   Es claro, en tiempos preelectorales se logró la exorbitante suma de 30.000 pesos que no salieron de las arcas de la provincia, sino que el cheque había sido librado por el Senado de la Nación.
   Eso ocurrió en diciembre de 2014 y aparte llegó la promesa formal de conseguir un lugar para el funcionamiento y de alguna manera sostener la importancia del emprendimiento, todo esto con el promesómetro a full con miras a la elección provincial.
   Y seguíamos diciendo que nos quedamos esperando una audiencia con el Gringo otrora combativo estudiante aunque siempre super ocupado con cuestiones más trascendentes como el desastre de la EPEC, la deuda provincial, los incendios, el despojo a los jubilados, la creciente inseguridad, el avance del narcotráfico o la creación de un museo dedicado al cuarteto.
   La Asociación Civil 29 Testigos de la Historia está a un paso de sucumbir y disolverse, por culpa de los ineptos de siempre que no respetan la memoria y que sólo la aprovechan para su conveniencia.
   Sería imperdonable que se perdieran tanto sacrificio y valiosos testimonios, solo porque se marginó a una entidad cuyos miembros no cobran, sino que pagan, para una tarea como lo es la preservación de la memoria, elemento que al gobierno de la provincia parece no interesarle.
  Pero la realidad indica y demuestra que esa memoria es selectiva, porque se hará un museo del cuarteto y se enterrará la memoria del Cordobazo que para Unión por Córdoba pareciera no entusiasmarlo y a la oposición le resbala.
   Buscando una explicación medianamente potable a esa actitud de indiferencia que es el umbral de los olvidos, recordé en lo personal, una reunión en la Unicameral con un funcionario estrechamente vinculado con el vicegobernador ¿existe? Martín Llaryora, en la preparación de una charla que daríamos algunos periodistas que cubrimos el golpe de estado del ’76.
   Y hablando de ese acontecimiento y de algunos de sus antecedentes, derivaciones y consecuencias, se me ocurrió junto a otro colega, recordar que el terrorismo de estado, en realidad, se inició durante el gobierno democrático del peronismo, con María Estela Martinez de Perón y su protegido “el brujo” José López Rega.
   Allí naufragó todo: ni la charla, ni el testimonio que daríamos de aquellos años de plomo y junto con eso cayó a tierra aquello de los 29 testigos de la historia, aunque en realidad más que eso, fuimos protagonistas.
   No digo que haya que abortar eso del museo del cuarteto, dejando de lado el oportunismo preelectoralista que sin dudas lo acompaña, pero por favor, que no dejen de lado la memoria del Cordobazo, a menos que la historia les obligue a asumir aquello del terrorismo de Estado, nacido de su seno para vergüenza de la historia real.
   Los 29 testigos, de ninguna manera, podemos cometer la torpeza de olvidar porque sería una canallada.
   Y menos aún, de permitir que a la historia la dibujen a su antojo quienes no la vivieron y peor aún, los que quieren que eso si, pase al olvido…


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  “BONUS TRACK” O DICHO EN CORDOBÉS, “LA YAPA”

  Los domingos por la mañana y en mi condición de periodista independiente, he comenzado a comentar algún tema de actualidad en el programa “El Mitre Club” que conduce el colega Pablo Colazo en Radio Mitre 810. La columna ocupa unos pocos minutos entre las 10,30 y las 11 y este día 4 de noviembre abordé el tema de la concurrencia o no de las dos parcialidades, a las finales de la Copa Libertadores de América entre los clásicos rivales Boca Juniors y River Plate. A continuación, la desgrabación de dicho comentario:

UN BOCA-RIVER ANTE LA MITAD MÁS
UNO  Y  LA OTRA MITAD, MENOS UNO
   Dentro del cúmulo de pasiones que alentamos los argentinos, así sanguíneos y calentones como somos, está la que se simboliza en los colores del club de fútbol por el que bromeamos y nos bromean, por esos colores que nos distancian temporariamente de amigos y de parientes con mayor vigor que si se tratara de diferencias políticas o ideológicas…
   Esa misma pasión es la que alimenta apuestas y cargadas, alegrías y desencantos, abrazos con desconocidos y broncas que tratamos inútilmente de disimular en la secreta esperanza de una revancha.
   Es el fútbol, esa maravilla de ballet donde se disputa un globo de cuero y colores que 20 personas intentan anidar allí, en el domicilio del adversario, para lágrimas, patadones a los muebles, evocaciones a las pudendas partes de la lora o alegrías desenfrenadas que el vino, las burbujas y otros hechizos las transforman en placer.
   Así veo al fútbol ritual, aunque se me desdibuja con la violencia, la agresión, la patota, el golpe artero o el balazo sin origen.
   Fueron los violentos los que mataron al fútbol, los que alejaron a la familia de las tribunas, los que descubrieron el negocio de la reventa, de los cuidacoches, de los aprietes al plantel…
   Esos, los autores intelectuales de transformar una fiesta en un drama, son los responsables del grito único, parcial y ominoso de la tribuna monocolor, de donde por igual parten la glorificación para once que se gradúan de héroes y el insulto, el salivazo y la amenaza para los otros once que en lugar de adversarios se recibieron de enemigos.
   No nos extrañemos que en esta como en cualquier guerra deportiva que sacudiera a la humanidad, hubieron probos dirigentes que buscaron rescatar del barro inmundo a esa pelota -la que según el Diego universal, no se mancha aunque la manchó- y apuestan ahora a la restauración de aquella mística tribunera, colorida, humeante y estruendosa que hace vibrar los cementos de los estadios.
   No cometamos la necedad de considerar que es desacertada la idea presidencial de propiciar que la final de la Copa Libertadores, en sus dos versiones en las canchas de Boca y de Ríver, se disputen ante las dos parcialidades.
   Macri aunque sea presidente, recordemos que fue el capo de Boca durante 12 años y se me ocurre que en este caso habló más el futbolero que el primer mandatario de un país que necesita imperiosamente recuperar la trascendencia de un clásico mundial que no es una guerra, sino un simple juego.
   No busquen pretextos para descalificar una iniciativa ansiosa de reconciliaciones con el deporte, que es una vital expresión y espejo de la sociedad.
    A todo esto lo dice un cordobés cómodamente plantado en el umbral de las ocho décadas, que de fútbol lo único que sabe es que se juega con una red al medio.

   Por eso pido mis disculpas si estuviera equivocado.

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