19 de febrero de 2023

S.L.B.: DOS MESAS ANTAGÓNICAS: LA DEL HAMBRE Y LA DE LOS QUE PUGNAN POR AFERRARSE AL PODER - PUEDE TOMARSE COMO EXITOSA LA TEMPORADA TURÍSTICA - PAREJA LÉSBICA, UN NIÑO Y SU MARTIRIO: LA CONDENA CON FINAL DE TUMBA O DE CREMATORIO - SIEMPRE HAY NOVEDADES DE LA MEGACAUSA - DESDE EL GOBIERNO SOSTIENEN QUE EL HAMPA EN CÓRDOBA NO ESTÁ ORGANIZADA - NOSTALGIAS POR LOS ANTIGUOS E IRREPETIBLES DÍAS DE CARNAVALES – DESPEDIDA CON MARIO BENEDETTI Y LOS OLVIDOS, ETC.

Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” edición nº 766 del domingo 19/2/23 emitido por la AM580 Radio Universidad Nacional de Córdoba.

¿Hay peligroso desprecio por las prioridades?
EL PUEBLO AGUARDA MÁS RESULTADOS POSITIVOS DE
LA MESA  DEL  HAMBRE QUE DE LAS LUCHAS INTERNAS
 
   No hace mucho tiempo el Sr. Presidente de la Nación comentó el problema del hambre y anunció la conformación de una “mesa del hambre” integrada por personajes notables de la política, el sindicalismo, el espectáculo como el caso de Marcelo Tinelli, etc. y su tarea sería encontrar los caminos que nos llevaran a la superación de esa aguda problemática, en un país tan ubérrimo como el nuestro, porque más que una estadística es una injuria, verdadero baldón inmerecido, que afectaba de manera especial a quienes en los tiempos de Perón eran los únicos privilegiados.
   El programa dependía del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, a cargo de Daniel Arroyo, y del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, presidido por Victoria Tolosa Paz. "Ambos estamos encargados de coordinar la mesa, que nació con grandes personalidades, explicó la funcionaria, aclarando que la iniciativa concretada "no tiene un presupuesto" porque "no es una cartera ministerial, sino una consigna que busca y refleja los sectores que no acceden por sus propios medios a tener un plato de comida en su casa". Así, los fondos para llevar adelante las políticas provienen del Ministerio de Desarrollo Social y uno de los integrantes de aquel patriótico emprendimiento, era el docente Roberto Baradel, quien a través de las redes sociales reveló que, textualmente, “Después de 4 años, los docentes y todos los trabajadores volvimos a entrar a la Casa Rosada y por su parte el Lic. Daniel Arroyo comentó que “Con el plan Argentina Contra El Hambre, este año invertimos más de 121 mil millones de pesos para la seguridad y la soberanía alimentaria.
   La realidad nos ha mostrado ahora que desde aquel reciente pasado, poco se hizo para mitigar aquella penosa situación porque hoy, de acuerdo con cifras oficiales, más de la mitad de los niños argentinos padecen hambre, una injuria que ninguno de quienes debían mitigarlo había sufrido jamás, porque fácilmente se advierte que asimismo ninguno de esos notables hubiera perdido algo de peso.
   Dejemos un poquito de lado esta parte de la historia y viajemos a la realidad actual, cuando vemos ya sin sorpresa pero con indignación creciente, que en la generalidad de los funcionarios la preocupación mayor, más allá de sus obligaciones con la sociedad, es esa descarada manera que exhiben en la lucha por permanecer en posiciones dominantes o en alcanzarlas, munidos de la acostumbrada demagogia y las actitudes hipócritas que cada día engañan a menos argentinos.
   Nadie tuvo en cuenta sabidurías ajenas como por ejemplo recordar que “La guerra contra el hambre es verdaderamente la guerra de la humanidad para obtener su liberación. No hay batalla más importante, en la Tierra ni en el espacio, pues la paz y el progreso no pueden ser mantenidos en un mundo alimentado a medias”, fueron brillantes conceptos de un tipo que mucho sabía de carencias y de opulencias; de paz endeble y de guerras. Se llamaba John Fitzgerald Kennedy…
   La encarnizada lucha por el poder ha posibilitado que todos los otros graves problemas que nos aquejan, para la clase dirigente han quedado marginados, salvo a la hora de formar parte de la consabida y ya percudida batería de promesas: “A uno que tenga hambre, dale primero de comer y después háblale de lo que sea; si empiezas por hablarle, sea de lo que sea, no lo dudes que fracasarás”, conceptos de Jean Anouilh, porque “El hambriento no razona, no le importa la justicia ni escucha las oraciones” sostenía un dilatado tiempo atrás la sabiduría de Séneca.
   Mientras la inflación indomable nos castiga sin misericordia, los esfuerzos del poder se centran en quedarse y de la oposición en ascender, ante un atónito escenario de carencias, padecimientos, inseguridad, justicia tambaleante, narcotráfico creciente y malestar social pisando el peligroso borde de una tolerancia en su histórico límite. Se enfrentan programas políticos cargados de dudoso exitismo a futuro, como si partieran de bases sólidas inexistentes, porque son parte de la crisis que vivimos.
    Larreta por su parte piensa en la alternancia, con Macri recuperando poder y Gerardo Morales a quien quieren ver de candidato a vice; el Dr. Alberto Fernández convencido que si se presenta aunque muchos de sus conmilitones se opongan, repite mandato, mientras ex ella sigue deshojando la margarita de su permanente teatralización, aguardando un clamor que no le llega o es de menguada relevancia, más allá de los camporistas, el sector más desgastado del kirchnerismo auténtico. Aníbal Fernández busca diferenciarse de los K: “Cristina no está proscripta, puede ser candidata si quiere”, declaró.
   Milei cuyo permanente y ya junado encule mediático parece ser el sello de su campaña libertaria, seduce a la juventud dejando de lado la memoria real y absoluta, que es el lápiz de la historia.
   La soñadora izquierda con su costado comunista-cristiano alguna vez bendecida papalmente que quiere ver con la banda a Grabois o Gravuá, como prefieran, quien seguramente ungiría a D’Elía como ministro der Asuntos Ridículos y cedería espacio para que Máximo , el heredero, ocupara la apetecida cartera de Trabajo
   Y debo ahora confesar que con ánimo reduccionista, porque hay que reconocer que muchas situaciones no merecen ser tomadas con amplitud ni seriedad, que el resto del arco ideológico, por su magro peso, cuantitativamente considerado, poco puede hacer para definir alguna ajustada contienda electoral.
   Y cuando uno desapasionadamente evalúa comportamientos ajenos con algo de indulgencia, entiende ante ciertas actitudes que es la desesperación por no perder el poder, el sentimiento que anima a muchos de los que al menos quieren quedarse.
   Duele y mucho, comprobar que las prioridades del poder y por desesperación están en quedarse, porque la pobreza siguió en aumento y es alarmante e inhumano advertir que más de la mitad de los niños argentinos padece eso que los gordos del gobierno no sufrieron jamás: el hambre y por eso debe ser, por impotencia, que a la mesa del hambre alguien le serruchó las patas.
   Resumiendo, la realidad nos ha demostrado aunque no hiciera falta, que en la clase política argentina prevalece esa vocación por ascender y seguramente tomando en cuenta aquel dicho de Napoleón, que “es fácil detenerse cuando uno va en subida, y difícil hacerlo cuando baja”.
   Al respecto, positivo sería que se tomara en cuenta la finura del humor de Chésterton, convencido que “No hay cosas por las cuales los hombres hagan tan hercúleos esfuerzos, como las cosas de las cuales ellos saben que no son merecedores”, lo que refuerza esa atrapante convicción, que honestamente hago propia. “El mayor pecado de los hombres es el de la desesperación, por ser pecado de demonio”, sostenía Cervantes.
   Por eso prefiero cerrar este comentario, en la convicción por experiencia. que los puestos eminentes son como las cimas de los peñascos; sólo pueden llegar a ellos las águilas y los reptiles.
   Los hambrientos, para el gobierno, pueden seguir esperando, creyendo que las promesas y la demagogia son nutritivas…
 
La temporada turística adentro y en el exterior.
PESE A LOS CAPRICHOS DE NUESTRA  DÈBIL  MONEDA Y
OTROS CONTRATIEMPOS FUE MEJOR DE LO CALCULADO
 
   Algunos derrotistas de esos que nunca faltan, se aventuró a sostener que a la temporada turística, generalizando a Córdoba con el resto del país e incluyendo en algunos casos al exterior, la habían salvado los feriados largos, en los que al menos localmente se dieron casos de plena ocupación tanto en la capital como en los clásicos puntos veraniegos del interior.
   Como todo en la vida tiene explicaciones e interpretaciones, procuraré que a través de mi evaluación encuentre a oyentes que piensen de la misma manera y si eso ocurre, será que no estoy tan equivocado.
   No es como algunos fanáticamente aseguran que el turismo se movió masivamente porque la economía del país esté creciendo más o menos como en China, lo que es un delirio, sino que durante los eternos dos años y medio de encierro no hubo en qué gastar las sumas que los argentinos teníamos dispuestas para pasear en vacaciones, comer afuera, asistir a espectáculos artísticos o deportivos, cambiar el auto, hacer arreglos en la casa, renovar el guardarropas, ponerse al día con los impuestos, guardando el dinero plástico porque los recargos de las tarjetas eran salvajes u otros gastos, porque no valía la pena desembolsar lo atesorado frente a un futuro tan incierto, porque a lo mejor -o para peor- ese dinero lo podíamos necesitar en medicamentos.
   Se advertía en la gente, al menos a través de los informes mediáticos en los clásicos lugares serranos, una especie de alegría por desahogo, como si hubieran superado una instancia en la que el futuro de ninguna manera estaba asegurado para bienestar.
   Las lamentaciones de siempre para los casos de abusos en los precios, porque para muchos comerciantes era la oportunidad de salvar parte de sus pérdidas, deudas y quebrantos y ponerse al día después de dos temporadas de malaria, que ni siquiera los parientes iban a ocupar los espacios hoteleros.
   En buena hora que la voluntad de la gente por la disipación permaneció vigente, lo que al menos sirvió, sirve y estimo que seguirá sirviendo en muchos casos, para superar los terribles momentos que nos tocaran vivir, en aquellas instancias de dolor, sufrimientos, adioses sin despedidas y otras situaciones penosas que tuviéramos que padecer.
   De ahora en adelante, roguemos que la normalidad, en cada verano, vacaciones de invierno o feriados largos, sean motivos de felicidad, esparcimiento y reencuentro con el placer de viajar.
   Sobre todo, porque lo merecemos…
 
¿Irreparable consecuencia de las burocracia?
DURA CONDENA A LA PAREJA  LÉSBICA POR  UN CRIMEN
QUE SE HUBIERA EVITADO SI LA JUSTICIA NO SE DORMÍA
 
   Realmente, considero que ya está dicha la última palabra que no necesita agregados, acerca del juicio y la condena contra las dos bestias que torturaron, violaron y mataron a la indefensa criatura de 5 años que era fruto del parto de una de ellas, aunque por lo realizado y revelado, jamás le resultaría justo ser considerada como “madre”, que ni siquiera merecería el perdón divino ante la atrocidad cometida.
   Nunca más, jamás de los jamases, podrán quedar en libertad, salvo cuando sus cuerpos tengan destino de tumba o de llamaradas, y ni por casualidad podrán demandar a cualquiera de los dioses ningún tipo de perdón, porque hay cosas que ni siquiera la fe -y me hago cargo de este concepto- debiera descender a tan bajos instintos como los demostrados por las dos asesinas de La Pampa con esas indulgencias de catecismo, clemencias inmerecidas ni absoluciones basadas en ningún argumento porque a los demonios, por su propia naturaleza y criminalidad es mejor saberlos muertos o tenerlos como tales.
   Y si la Justicia humana es tal, hasta el punto de nombrarla con mayúsculas, porque nadie ha regresado para contar de qué se trata la justicia divina si es que existe, que llegue también para quienes por ignorancia, comodidad, vagancia o enfermas de insensibilidad y enemigas de eso que se llama compromiso con la sociedad, formaron la cadena humana cuyo último eslabón fue la barbaridad de entregar el niño, o mejor dicho la vida y el alma de esa criatura, a sabiendas que era frecuentemente maltratada.
   Para todos ellos, si no fue tan sólo una persona, que el peso y el escarmiento de la ley no se ensañe como lo hicieron las bestias con el indefenso Lucio Dupuy, pero que de alguna manera las condenen por haber sido quienes carentes de la más mínima sensibilidad humana y respeto por la indefensión, lo entregaron a quienes lo ultimaran.
   Es tan enorme la falta cometida, que no me vengan con que por algún resquicio de los códigos le encuentran atenuantes a tales exponentes de la justicia indiferente y pachorrienta que no queremos..
   La verdad y desde la sinceridad más absoluta y descarnada, la pira sería no una venganza, sino el justo y merecido castigo.
   No soy un bárbaro. Bárbaras fueron ellas, o elles.
   Y si no tienen un encendedor a mano, aunque dejé de fumar hace tiempo, todavía conservo algunos…
 
Las afrentas humanas causadas, irreparables.
LA MEGACAUSA DEL REGISTRO AÚN NOS SORPRENDE
PESE AL LARGO TIEMPO DE  SU SOSTENIDA  VIGENCIA
 
   Años atrás la Corte Suprema de Justicia de la Nación se expidió sobre diversos recursos de queja presentados en contra de la prisión preventiva en la causa del Registro de la Propiedad de Córdoba, manifestando desacuerdo con las sentencias dictadas en nuestra provincia. 
   El Fallo del órgano supremo estableció entonces que la prisión preventiva poseía fundamentación sólo aparente y no ajustada a requerimientos constitucionales, no respetando el principio que establece que nadie puede ser sometido a detención o encarcelamiento arbitrarios, implicando esto, incorrección e injusticia.
   Agregó el Alto Cuerpo, que los funcionarios actuantes rechazaban de manera dogmática los argumentos de defensa sin dar explicaciones ni exponer el razonamiento realizado, considerando finalmente que el tiempo de prisión preventiva era excesivo. Pese a que en la misma línea se pronunciaron distintas Organizaciones No Gubernamentales idóneas en la materia y la propia Organización de las Naciones Unidas, nada de lo dicho parece haber generado en nuestra justicia provincial autocrítica ni reflexión alguna sobre el tema.  
   La Real Academia Española, junto a los códigos una de nuestras inseparables compañías, define a la autocrítica como el juicio crítico sobre las obras o comportamientos propios, analizándolos pormenorizadamente según los criterios de la materia de que se trate. Esta práctica, obligatoria en cualquier profesión, no parece existir en la causa, incluso con un "quasi" desdén hacia los dictámenes recibidos.
   Por el contrario, suele destacarse, casi a nivel de marketing, la cantidad de personas condenadas y encarceladas, obviando el nada trivial detalle de que la inversión del orden de los factores juicio/cárcel, de tan abusivo, tiende un irrefutable manto de cuestionamiento sobre la legitimidad de lo actuado. 
   Sabiamente sentenció Montesquieu que “No existe tiranía peor que la ejercida a la sombra de las leyes y con apariencias de justicia”, por lo cual, urge encontrar mecanismos de control que preserven a los ciudadanos de tales situaciones.
 
Innegable y está permanentemente a la vista.
SI DESDE EL PODER DESCONOCEN LA EXISTENCIA DEL
HAMPA, ES TOMAR  CON  DESPRECIO  A  LA SOCIEDAD
 
   Días atrás y por casualidad, estuve escuchando declaraciones de un funcionario provincial integrante del equipo que tiene que ver con la seguridad, la policía u organismos provinciales de esos quehaceres.
   Me sorprendió y hasta llegué a pensar que estaba refiriéndose a otra provincia, a Suiza o al Vaticano, cuando sostuvo que en Córdoba no existen organizaciones delictivas, en tiempos que vemos que nuestra cercanía con el drama rosarino cada día se hace más estrecha.
   ¿De qué planeta viniste? le supo preguntar un relator de fútbol a Maradona después de su memorable gol a los ingleses, y eso mismo cabía y todavía cabe requerir respuesta de ese funcionario que lamentablemente no retuve su identidad.
   Porque si esa persona afectada a una tarea tan delicada tiene menos calle que Venecia y pretende que lo tomemos con seriedad, es porque aún cree que existen los Reyes Magos, que en Córdoba se acabaron los asaltos en patota, que no es cierto que la policía conoce todos y cada uno de los enclaves donde se comercian sustancias prohibidas, y otros que supieron ser escondidos detalles que ahora conocen hasta los pibes de 12 años, y que el tema de los motochorros es una cuestión superada.
   Desde la cúpula policial creen que haciendo de inspectores municipales en los puentes van a controlar la ciudad, que mostrándose de día en calles y plazas la gente creerá estar protegida y que cuando se requiere la urgencia de un patrullero, está descontado que en tres minutos llegan a cualquier punto de la ciudad.  
   Todo eso es parte de la fantasía que nos ha llevado a la desprotección cercana al abandono, por la falta de una auténtica y genuina política integral de seguridad, que demanda esencialmente la profesionalización de la fuerza azul, y no su utilización como bolsa de trabajo sujeta a recomendaciones políticas.
   Estamos abandonados a nuestra suerte y en cuanto a eso, es la delincuencia que en muchos aspectos está organizada, tienen códigos que respetan entre ellos y una inteligencia mayor, todo lo que les permite gozar de un elemento esencial con el que tienen en jaque a la sociedad y a la misma policía: la impunidad.
   Que ese funcionario salga alguna noche por la zona roja que es casi toda la ciudad, desarmado, sin custodia y de civil, y que después demuestre que volvió invicto.
    Es allí cuando tendrá la certeza de la realidad antes de hablar.
 
Atesoramos imágenes de una fiesta popular.
NOS  INVADE LA NOSTALGIA AL EVOCAR TIEMPOS QUE
PASARON Y MURIÓ DE VIEJA LA MAGIA DEL CARNAVAL
 
   Con la simple evocación de las siestas allá en el que era Barrio Firpo que después rebautizaron General Bustos, en el Pasaje Italia de sólo una cuadra, se armaban unas carnavaleadas memorables entre los vecinos, y estaba prohibido encularse frente al baldazo o la incómoda explosión de una bombucha con bumbulas de paraíso que impactaban por lo general en malas partes.
   Mucho ha cambiado de aquellos carnavales con corsos en San Vicente que convocaban a multitudes, con desfiles de disfrazados de indios plumudos que si sus modelos extranjeros hubieran tenido tantos espejitos encima, los hubieran
prohibido por encandilar.
   Tiempos en que había bailes en todos los clubes, concursos de máscaras, romances que se iniciaban con un inocente chorrito de pomo perfumado y terminaban cuando ambos personajes, él y ella, se sacaban las máscaras y asumían realidades muchas veces dignas de ser escondidas.
   Era otro el espíritu de la gente y cada barrio tenía su lugar destinado a eso de tirarse agua para terminar ellos hechos una ruina y ellas con los pelos empapados, lo que ahora no mostrarían ni en la más recóndita intimidad.
   Había disfraces producto de una enorme creatividad, todos artesanalmente elaborados y sobresalían los diablos, payasos, bailarinas, equipos médicos que llevaban una camilla con el paciente que entre sus ropas escondía chorizos y morcillas que salían al aire cuando se detenían en alguna esquina, esperaban que se juntara gente y allí “intervenían quirúrgicamente” a uno de la pandilla.
   Todo era con buena onda, los incidentes a veces se originaban de madrugada cuando los alcoholes habían hecho lo suyo, la tolerancia disminuía y se daban con todo, pero raramente utilizando armas de fuego.
   Pasaba cada carnaval y juro que es cierto que las comparsas, al día siguiente, ya estaban trabajando en la elaboración de lo que lucirían un año después.
   Los tiempos han cambiado tanto, que ahora todo eso es recuerdo, que algunos disfraces sobreviven y que a la hora de evocarlos de cuando éramos parte de cada carnaval, se nos escapa de los ojos una bombucha, nos sacamos la serpentina que nos rodea el cuello y la boca se nos llena de papel picado…
 
Nuestra despedida con Mario Benedetti
MARAVILLA  POÉTICA QUE NOS ILUSTRA CON
LOS VALORES Y EL SIGNIFICADO DEL OLVIDO
 
   No es necesario y ni siquiera rozaría la intención de evaluar poéticamente a un genio como Mario Benedetti, por lo que al momento de establecer la pausa de SLB hasta el próximo domingo, me parece apropiado evaluar unos pocos versos del poeta, cuando se refiere al olvido, así crudamente planteado:
 
El olvido no es victoria
sobre el mal ni sobre nada
y si es la forma velada
de burlarse de la historia
para eso está la memoria
que se abre de par en par
en busca de algún lugar
que devuelva lo perdido
no olvida el que finge olvido
sino el que puede olvidar.
  
   Mil gracias de corazón por habernos acompañado…

 

2 comentarios:

  1. excelente Gonio

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  2. Agradezco el concepto, pero a veces debo pedir disculpas por exceso de vehemencia, frente a situaciones que son realmente indignantes. No todos lo entienden así, opero respeto salvajamente que puedan expresarse. Mis saludos.

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