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7 de abril de 2024

S.L.B.: UNA SEMANA PLAGADA DE VERSIONES – CINE Y “CULTURA” FUERON PRETEXTOS PARA CONSAGRAR LA RAPIÑA – ¿SOMOS AMIGOS CON LOS CHINOS O JUGAMOS A QUE LO SOMOS?– MEGACAUSA DEL REGISTRO, LA HISTORIA DE NUNCA ACABAR – FUE PELIGROSAMENTE TARDÍA LA REACCIÓN DEL PODER FRENTE AL DENGUE – EL “BONUS TRACK”: UN EXITOSO COMO SECRETO OPERATIVO POLICIAL, EUGENIO CEMINO DEFENSOR DE LA 3ra EDADETC.

Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” edición nº 825 del 7 de abril de 2024, difundida por la AM580 Radio Universidad Nacional de Córdoba:

 
Con la mira hacia el 25 de Mayo
LA SEMANA PLAGADA DE VERSIONES, SIGNO
QUE  TODO  ESTÁ  EN  VIAS DE NEGOCIACIÓN
 

   Viajes relámpago, reuniones previas, inquietud en las provincias al menos en las enroladas con el oficialismo nacional y preocupación en aquellas donde mandan los opositores, resabios del kirchnerismo muchos de ellos, marcaron la tendencia de las expectativas en esta última semana que para muchos fue eterna por el feriado y para otros, como si sólo hubieran transcurrido unas pocas horas, al menos esa era la sensación  en alguna medida generalizada y asumida.
   Cuando son más las dudas que las certezas y no son pocos los adherentes al pensamiento de Montaigne en el sentido que “solamente los necios son ciertos y resueltos”·, también están firmes en sus convicciones aquellos respetuosos de los pensamientos darwinianos, entre los que sobresale ese que asegura que “sin duda no hay progreso”.
   Los argentinos, con los tiempos que corren y con todo lo padecido y lo que seguramente seguiremos sufriendo por un tiempo, estamos ansiosos más que por los postulados que se hagan bandera, sino por las soluciones que se aporten en el corto plazo, porque tanto como la miseria, la desocupación o la quiebra financiera no son de esperar en tiempos de crisis.
   Cuando están de por medio en cualquier tratativa las cuestiones ideológicas más que los enfoques parcializados de las corrientes de pensamiento, los choques son inevitables, aunque muchas veces es de donde surgen las soluciones siempre y cuando prevalezcan y se respeten las posturas ajenas, que no siempre son potables para aquellos que no las sostienen.
   En verdad es para pensar con mucho de soñar, la idealización de las situaciones, cuando mirando hacia adentro de la patria desde todos los sectores coincidan en que ella, esa Patria con mayúsculas, necesita con urgencia una terapia intensiva que la vuelva a colocar en el sitial de privilegio que décadas atrás supiera alcanzar, cuando despertábamos la envidia del mundo y esas ansias por imitarnos que fueron penosamente  claudicando con el correr de los años y los efectos de los gobiernos, que abiertamente privilegiaron bienestares elitistas por encima de una vida digna para el pueblo dejando de lado la percudida demagogia.
   Que sigan los encuentros, que continúen reinando las divergencias que es de donde tienen que asomar las soluciones que tanto necesitamos, en homenaje a nuestra propia historia y sin dejar de lado las enormes riquezas que en todo sentido poseemos, y que estamos a la espera de quien sepa administrarlas con justicia, decoro y equidad.
   El 25 de mayo está cada día más cerCa o mejor dicho menos lejano, como para que podamos demostrar madurez que no exhibieron muchos gobernantes en su momento, para darle a la gente la dignidad que tanto merece.
   Cuando lo logremos, porque estoy seguro de alcanzar a ver ese cuasi milagro, podremos dar rienda suelta a nuestro orgullo, ahora reprimido y limitado por situaciones a las que nos empujaron los malos políticos, con sus ansias de poder, de riqueza y en muchos casos, de impunidad.
 
Un grosero festival de subsidios
CINE Y “CULTURA” FUERON LOS PRETEXTOS
QUE  AYUDARON A CONSAGRAR  LA  RAPIÑA
 

   Ya era sabido pero la confirmación acentuó con bronca engordada por la impotencia y la indignación popular frente a tamaño descaro, angurria e insensibilidad frente al drama de la pobreza que padece más del 50 por ciento de nuestro pueblo, que el Incaa había asignado 34 mil 700 millones de pesos nuestros al cineasta Jorge Marrale para su película “La burbuja” que fue estrenada en todo el país, y asistieron a las salas de la premiére, en total nacional, 679 personas y la recaudación no llegó ni a los 400 mil pesos, lo que en buen romance matemático e indignante es para asegurar sin ningún riesgo de equivocación que nosotros, el Estado, perdimos la pavada de 34 millones 300 mil pesos, cuando llorábamos por el deterioro de nuestra castigada economía, mientras los funcionarios seguían con su dispendioso festival de subsidios y becas a la vagancia -ahora parcialmente neutralizado- con una modalidad posteriormente demostrada que fue una sucesión de actos de rapiña inéditos para la mayoría de los memoriosos y de nuestra historia.
   Y el de Marrale no fue un caso aislado, porque el régimen nacional & popular se dio el lujo de financiar otros 653 proyectos hace de eso 7 años, los que nunca se presentaron y es difícil pensar que lo harán, porque seguramente a todo ese paquete de dinero ya se lo deglutieron, lo encanutaron en el exterior, se lo gastaron o invirtieron sin ponerse colorados, en un país rico pese a lo cual el 50 por ciento de la población fue empujada hasta el estado de pobreza, pese a que uno de los argumentos de aquellos mangueros tan desvergonzados como amnésicos, se escudaban en la cultura, mintiendo que eran generadores de fuentes de trabajo…
   Es más que seguro que todos aquellos productos cinematográficos o de otras reales expresiones de la cultura que quedaron estacionados en la burocracia de los tiempos, serán devueltos al tesoro nacional porque de allí provenían, cuando estamos en emergencias sanitarias, laborables, morales, éticas y en otros órdenes.
   El caradurismo de aquellos que se escudan en la cultura o en la absurda creación de demanda laboral, para fomentar su malsana costumbre del mangueo, alguna vez se tiene que terminar, cuando sea el Estado con capacidad y profesionalidad, quien pueda juzgar cada proyecto y los beneficios que podría tener para la población.
   Una actriz de medio pelo dentro del fulgurante estrellato porteño, supo cobrar una atractiva como absurda paga por dictar, tengo entendido, algunas charlas de un tema que ni siquiera le conocía el título, en el salón mayor de FADEA copado por una corriente que se llamaba “La Cámpora”.
  Queda esa situación para que la memoria la incorpore a la antología del absurdo…
  
¿Émulos de Ginés Gonzalez García?
UNA TARDÍA REACCIÓN ANTE AL DENGUE NO
NECESITA CULPABLES PERO SÍ EJECUTORES
    Es para recordar con mucho de pena sumada a la resignación de entonces, cuando parece mentira que hayan pasado pocos años, no más de dos, cuando el bueno y siempre risueño G.G.G. sostenía que la peste no era posible que se afincara entre nosotros, porque China estaba demasiado lejos, como si no hubiera aprobado geografía, materia del primer año de la secundaria.
   Y así nos agarró casi desprevenidos el maldito Covid que dejó el tendal de seres aniquilados por un mal del que al principio solo se salvaron los altos funcionarios, sus amigos y más cercanos seguidores; los que tuvieron incluso el privilegio de vacunarse eludiendo otras prioridades, festejar acontecimientos sociales en plena prohibición de salir a la calle y otras ventajas que les otorgaba ese mal entendido ejercicio del poder.
   Miles de casos que ni siquiera fue permitido despedir a nuestros muertos.
   Dicen los entendidos que hubiera sido sensiblemente menor el número de víctimas en Argentina, si no hubieran demorado tanto sus autoridades en franelear y dejarse franelear por los laboratorios extranjeros e intereses de la izquierda y de la derecha, para definir el tema de las vacunas que masivamente había que aplicar a la población, respetándose la escala etaria.
   Descubiertas algunas agachadas de Ginés Gonzáles García en tal sentido y en ciertas operaciones de algunos de sus conmilitones, el escándalo se desató sin misericordia pero inútilmente, por aquello que las resurrecciones son conocidas en el campo religioso pero que en tal sentido y humanamente, tales milagros no existen.
   Antes se había concretado el absurdo de transformar en secretaría lo que era un ministerio tan esencial como el de salud, lo que sIrvió para la creación de otras dependencias estatales menores que fueron bien aprovechadas para ubicar a la militancia más que para tecnificarlas en sus cometidos.
   Ahora el factor determinante de lo que padecemos en nuestro alrededor es la demora en reaccionar, a nivel nacional por la falta de previsión en momentos acuciantes y en el orden provincial y aunque se empeñen en negarlo, los enormes compromisos dinerarios tomados con los créditos en moneda extranjera, fueron el escollo para seguir pidiendo ayuda porque el bienestar ciudadano, frente a la inminencia de elecciones, se creyó que era gratificar a la población con colores en las calles, plantas y flores en las plazas, nuevos caminos y puentes, descuidando ese factor primordial e irreemplazable que es la atención de la salud.
   Y así estamos, padeciendo una ola imparable del mal que inoculan los mosquitos, insignificantes ganadores de una batalla que no debió existir, pero la angurria de poder es un elemento irrefrenable para las ansiedades políticas.
   Aunque en verdad, lo peor de todo es que se advierte que las más encumbradas autoridades no han dado la cara para explicar una situación como la que se vive en Córdoba, de angustias y padecimientos, que creen haber superado por el hecho de dejar liberada la importación de medicamentos que la enfrenten o sustancias que la eviten.
   Después de todo, del oprobioso silencio, que solamente suelen quebrar con dignidad sensibles funcionarios de tercer nivel, se ocuparán sin dudas las generaciones venideras de cordobeses, en nuestro caso, cuando les hagan recordar que se privilegiaron pavadas, con relación al respeto por la vida humana.
   Porque tal actitud, antes que alocada y repudiable, no deja de ser un abierto atentado a la salud pública.
 
Hora de puntuales definiciones
CON LOS CHINOS ESTÁBAMOS A UN PASO DE
ASUMIR EL DRAMA QUE MATA  A VENEZUELA
 
   La jefa del Comando Sur de la armada de los EE.UU. estuvo de visita en nuestro país y conversó con miembros de la cúpula gobernativa, mostrándose simpática pero enérgica en sus conceptos y sugirió casi como al descuido que nuestra conducción nacional, suponemos que en términos perentorios, deberá definirse si con relación a China somos aliados o están jugando a serlo y eso de aliados significa, claramente, que no es jugar con los chinos como lo hizo Cristina durante el gobierno kirchnerista, que venía jugando con ellos y pretendía desorientar a medio mundo.
   El ajetreado y algo confuso tema de la base china no es de ninguna manera un tema menor o pequeño, sino demasiado importante y estratégico, aunque si evaluamos la situación desde el punto vista de la diplomacia, tendríamos que poner en la balanza motivos, consecuencias y derivaciones de la elección que nos toque hacer porque una cosa es ser amigos del león y otra del conejo.
   Los temas de comercio bilateral también son demasiado sensibles como para marginarlos no tanto de las conversaciones, sino de las inevitables y urgentes negociaciones que son imperiosas para nuestra actualidad de crisis, cuando vemos la desorientación no tan sólo del gobierno, sino de aquellos sectores que se consideran de la oposición y muchos no tienen ni siquiera una idea de lo que se trata.
   Nuestras amistades internacionales, de diversas maneras, han mostrado su extrañeza y la enorme sorpresa que para ellos significa el virtual quebranto argentino, al considerarnos uno de los países más ricos del mundo, y especialmente cuando nuestro acercamiento casi fraternal con Venezuela vía Cuba nos colocó en una incómoda situación ante los otros amigos que tenemos diseminados en el planeta.
   Las cosas casi llegaron a hermanarse con Venezuela y así quedamos, inmersos en una alocada inflación de la que no es tan sólo responsable el kirchnerismo sino que en otra medida lo fuera el macrismo, en ambos casos escudándose en el percudido pretexto de la herencia recibida, siempre reacios a reconocer la incapacidad propia para gobernar, o la importancia de cultivar relaciones internacionales positivas y no los modelos signados por el fracaso.
   Es la hora de elegir a conciencia a cada uno de los que podemos considerar amigos, porque una cosa es que el Tio Sam nos preste dólares a tasa conveniente y otra que la usura de Chávez y de quienes lo sucedieron en su momento, nos vacíen los depósitos de reservas y tengamos que andar penando por otras geografías incluyendo al mundo árabe y rogando que no se enteren -misión imposible- del desgastado concepto que tenemos ante el mundo, en el manejo de todas esas riquezas que ese mundo sabe que poseemos.
   En el campo internacional, para los casos extremos de nuestra comprometida situación, nada mejor que saber esperar, especialmente si respetamos las elecciones que hace la gente en las urnas, sobre todo cuando le dejaron la simple alternativa de permitir que nos gobernara un ávido de riquezas, o un principiante al borde del delirio.
   Los argentinos conocemos a los hambrientos de poder y de riquezas, razón por la cual la mayoría adhirió a un desconocido.
   Es una simple conclusión basada en la realidad y más que nada, en las matemáticas…
 
¿Nuestra ciudadanía está en peligro?
LA MEGACAUSA  DEL  REGISTRO YA ES CASO
TÍPICO  DE  LA  HISTORIA DE NUNCA  ACABAR
 
   Un interesante y meduloso dictamen elaborado por la Organización de las Naciones Unidas en la causa del Registro de la Propiedad de Córdoba, que marcha camino a un record Guinness, considera como arbitrario el accionar judicial, recomendando para el caso de la persona reclamante, no sólo la inmediata libertad, sino también la reparación del daño causado. 
   La palabra arbitrario ha sido utilizada infinidad de veces en esta causa: imputados, defensores, Organismos intervinientes y la propia Corte Suprema de Justicia de la Nación usaron este término para calificar la sistemática prisión preventiva característica de la causa a la que aludimos y de la que nos ocupamos periodísticamente desde hace cerca de una década y media.
   Es bueno conocer que el diccionario dice que “arbitrario” es algo sujeto a la libre voluntad o al capricho, antes que a la ley o a la razón, pudiéndose encontrar como sinónimos las palabras ilegal, injusto, abusivo, autoritario, despótico, tiránico, improcedente, injustificado, inmotivado, parcial y muchas otras. Todos estos calificativos podrían aplicarse entonces a los tres años de prisión preventiva sin juicio, los interminables plazos de investigación, los testigos anónimos, los encierros  reconociendo que no existen pruebas, la contradictoria rotulación de la causa como una sola y como muchas independientes al mismo tiempo, a fin de que una comisión especial juzgue todos los casos, la exigencia del pago de multas no firmes a cambio de libertad, la indiferencia ante fallos internacionales, y tantos otros reclamos. 
   Reemplazando términos estaríamos ante un accionar de libre voluntad, caprichoso, sin ley y sin razón.  Y es cuando cabe preguntarnos ¿Pueden aceptarse semejantes connotaciones para una actuación judicial? 
   Retomando el comentario realizado el domingo pasado, ¿Quién debe controlar regularmente la idoneidad en el Poder Judicial?  
   Porque la verdad sea dicha y sin intenciones de alarmar a nadie, es posible advertir que en un sistema tildado de arbitrario, todos los ciudadanos estamos en peligro.

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“BONUS TRACK”:
   Frente a la falta de tiempo y espacio dentro del horario habitual de “Síganme los buenos”, fue imposible incluir un tema de candente actualidad como lo fue un interesante procedimiento policial en una fiesta convocada por redes, donde molestaban hasta las madrugadas a los vecinos y circulaban sustancias prohibidas. La cuestión se agrega como comentario, al mismo espacio en este caso en las redes sociales:
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Exitoso como secreto operativo
UN PUNTO A FAVOR, EN UN TEMA  ABORDADO
POR LA AUTORIDAD QUE NUNCA LO DIFUNDIÓ
 
   El domingo pasado nos tocó ocuparnos de una casa particular, cerca del Arco de Córdoba, donde desde hace tiempo se realizaban encuentros clandestinos con pileta de natación para que bailen los asistentes que se animen, porque los vecinos estaban cansados de pedir protección contra los ruidos hasta el amanecer, robos, daños, arrebatos, venta de sustancias prohibidas y otros delitos que se perpetraban.
   Se llegaron a hacer -nos consta- cerca de 20 llamados al numero 911 y las reacciones, después de la promesa de acudir, se concretaban a un silencioso paso por las inmediaciones pero sin intervenir en resguardo del vecindario, sobre todo por la asidua y numerosa concurrencia de menores, donde gozaban de facilidades para variados consumos, no todos basados en el alcohol.
   Es para pensar, con cierto orgullo quiero destacarlo, que la prédica para algo sirvió y pocos días atrás en este semana, hubo una numerosa intervención policial nocturna que se supone clausuró la casona, después de sorprender la comisión de numerosas infracciones a las leyes y ordenanzas.
   Dos cuestiones que desorientan: que no se hayan dado a conocer los resultados de ese importante operativo policial, y que tampoco se conozcan las responsabilidades e identidades de quienes organizan esos encuentros al que asisten simpatizantes y usuarios de los autos de alta gama, motocicletas de elite, de esas que se utilizan para ciertos repartos, y gente de encumbrado poder adquisitivo.
   Sería un placer, en verdad, conocer algunos pormenores de ese operativo, para que la gente mejore su pobre imagen que tienen de una policía que se desvive por mostrar urbi et orbe cuando lanza a la calle unos pocos patrulleros o la compra de moderno armamento.
   Es hora que nada se esconda, porque hacerlo, lleva a pensamientos pecaminosos a lo mejor sin fundamento, o que posiblemente no estén ajustados a la realidad.
   De esas fiestas siempre se conoce a sus responsables: ¿los encontraron, o “se profugaron”?

EUGENIO SEMINO EN S.L.B.

   El conocido Defensor de la Tercera Edad, quien se desempeña en la Capital Federal, mantuvo una interesante conversación con el abogado previsionalista Héctor “Maco” Silvestro y el periodista Gonio Ferrari, dentro del programa “Síganme los buenos” edición nº 825 del domingo 7 de abril. En el transcurso de la charla tocaron interesantes temas como los recientes aumentos, el chasco de algunos porcentajes y otras cuestiones que interesan y afectan a quienes perciben jubilaciones desde el nivel nacional. El audio de ese capítulo del espacio que difunde la AM580 Radio Universidad Nacional de Córdoba puede ser consultado en la columna respectiva, ubicada en la parte superior en el costado derecho de este blog.

16 de enero de 2022

S.L.B.: NI CON MULETAS EPEC CUMPLE SU COMPROMISO CON LOS CORDOBESES – EL DÓLAR MARGINAL Y LA INFLACIÓN CORREN UNA CARRERITA – LAS ESTADISTICAS SOBRE COVID PRESAGIAN NUEVAS RESTRICCIONES – LA MEGACAUSA DEL REGISTRO TRAS OTRO RÉCORD – FUNCIONARIOS VACACIONAN EN EL EXTERIOR – RIDÍCULA OFENSIVA CONTRA LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA NACIÓN, ETC.

Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” edición nº 708 del 16/1/22 emitida en dúplex por AM580 y la FM88.5 ambas dependientes de Radio Universidad Nacional de Córdoba.

Escandalosa e inédita sucesión de cortes
EPEC NI CON MULETAS CUMPLE EL COMPROMISO
QUE  BIEN LE PAGA  LA  POBLACIÓN CORDOBESA
 
   Cuando se cierran todos los caminos hacia el entendimiento como es el caso del blindaje ante la gente que luce en estos últimos tiempos la Empresa Provincial de Energía de Córdoba, es que se da por perdida la causa que por un tiempo uniera a ese organismo con la sociedad cordobesa, y es como si el contrato social que creíamos consolidado hubiera volado por los aires, llevado por esta curiosa y prolongada explosión de ineficiencia, insensibilidad y mucho de soberbia que tanto nos afecta.
   Los usuarios venimos sosteniendo como si fuéramos la muleta, a una estructura que creció hacia adentro alimentada -hay que reconocerlo- por la fuerza y la potencia no de su equipamiento siempre en los umbrales de la obsolescencia a la luz del servicio que ofrece, sino de una organización sindical que anida en su seno como proyección del esfuerzo, el liderazgo, la sabiduría y el compromiso de aquel viejo y combativo dirigente que fuera el Gringo Tosco.
   EPEC, si hoy por hoy se hiciera una limpia consulta popular, aparecería como el más odiado de los organismos estatales de esta Córdoba siempre sorprendente, porque con el tiempo, los desaciertos y las conducciones ciclotímicas llegó a generar el menos deseado de los cambios, al transformar a estos usuarios sostenedores de un sistema perverso, en rehenes para caprichos, exigencias y otros mecanismos de presión ante el poder político.
   La cierta y permanente amenaza de la privatización revolotea en el docto firmamento, cuando advertimos que es como si quisieran menoscabarla a la EPEC para entregarla a las fauces de algún grupo empresario ávido de utilidades, como las que puede generar esta verdadera fábrica y transportadora de energía eléctrica, que al tener a una población atada a sus designios, puede darse el lujo de cobrar la tarifa más elevada del país para una prestación que hace agua por los cuatro costados.
   Al ser botín político de quienes se suceden en la cúpula provincial, la EPEC cuenta con un curioso sistema para la designación de su personal con algo parecido a la imposición de la descendencia como si todos los cargos fueran obligadamente hereditarios, detalle que por lo que se advierte cuenta con el beneplácito y el apoyo del mismo gremio que a veces le hace la vida imposible a cualquier conducción.
   Como mecanismo demagógico, la EPEC muestra a la población que depende de ella por eso del monopolio, un falso rostro solidario que se diluye cada vez que queda en evidencia su retraso tecnológico, hasta el colmo de renegar de lo previsible, porque la costumbre de antes era culpar a los enganchados y ahora al usuario que consume por el calor del verano o por el frío invernal, sin que la EPEC adopte previsiones que debieran basar en la simpleza de respetar el calendario y sus estaciones.
   Se habla de inversiones, de equipamiento, de actualización tecnológica pero los cordobeses vivimos padeciendo la injuria de los cortes en verano porque hace calor, y en invierno porque está frío y baste con el ejemplo de ayer, con diez o más cortes en pocas horas, con la consecuente derivación de problemas por la interrupción de las cadenas de frío y por el regreso, luego de cada corte, de un voltaje que provoca daños en los electrodomésticos que la empresa, por lo general, luego desconoce.
   Pero la EPEC con su sola enunciación, sirve, sirvió y seguirá siendo funcional para el lucimiento de las autoridades provinciales a la hora de activar el promesómetro y mire, la verdad, ya me cansé de quejarme siempre por lo mismo, por aquello de proclamar mejoras en una actitud proselitista, y después sepultar esos anuncios en el más incalificable y ofensivo de los olvidos y para no aburrir, he optado por refrescar memorias apelando a las sabias palabras que pronunciara el 3 de abril de 2017 el Sr. Gobernador de la Provincia, Cont. Juan Schiaretti en el almuerzo que convocara la Fundación Mediterránea, servido en el que fuera coqueto comedor del Hotel Sheraton.
    Y escuche bien porque se lo voy a leer textualmente: “EPEC tiene prevista una inversión de 353 millones de dólares que es lo que nos está permitiendo que hayamos batido record de consumo de energía en este verano y no haya habido cortes en Córdoba y Gran Córdoba. Porque en esto no hay misterio: si hay inversión no se corta la luz; si no hay inversión la luz se corta, es así de simple. No es casualidad que después de que EPEC empieza un fuerte proceso de inversión hace ya dos o tres años, hayamos conseguido mejorar la distribución. Fundamentalmente, la inversión de EPEC está en redes de alta tensión y en seguir mejorando la distribución para que haya la alta tensión necesaria”.
   ¿Consideran necesario, queridos y respetables oyentes, que siga machacando después de este recordatorio?
   Hemos sido obligados testigos de situaciones dramáticas y le cito solo algunas: gente que dependía de la electricidad para sostener equipos médicos, negocios barriales que vieron podrirse su mercadería en estos tiempos tan difíciles; los vecinos y comerciantes de la Avenida Colón creo que al 1200 que estuvieron más de 48 horas sin servicio eléctrico, la gente mayor enclaustrada en sus departamentos de edificios porque no podían usar los ascensores…
   Que después no me vengan con el percudido verso de la actualización tecnológica y menos con eso del compromiso con la sociedad.
   Mi agradecimiento, y el del cordobesismo, a la lozana e incuestionable vigencia de los archivos.
 
Ninguno tiene freno
EL DÓLAR MARGINAL Y LA INFLACIÓN PELEAN
POR ERIGIRSE EN LIDERES  DEL CRECIMIENTO
 
   Años atrás hasta los jubilados se daban el lujo de jugarse con la compra de dólares para hacer unos pocos pesos de diferencia, en aquellos tiempos en que las cotizaciones eran más o menos previsibles, no existían los arbolitos urbanos que ahora son una institución y los verdes se conseguían y circulaban casi con la misma fluidez que el decadente peso nacional al que vivían adelgazando quitándole ceros como para que creyéramos que valía más y no había que dividirlo tanto.
   El dólar cuando ingresó a la clandestinidad nos odió a todos, bahhh, al menos a los que por eso de tener que viajar por cuestiones profesionales dependíamos de esa moneda, porque la nuestra no era bien recibida ni siquiera en Uruguay, aunque tuviera años de esplendor en Brasil cuando miles y miles de argentinos vacacionábamos en las playas de Capao da Canoa, de Florianópolis, de Camboriú o nos aventurábamos a Copacabana o Ipanema en Rio de Janeiro.
   Eran los tiempos del famoso y mentado “deme dos” porque así comprábamos favorecidos por el cambio y pasarse un mes en Punta del Este era accesible para cualquier asalariado argentino hasta que pasó lo que pasó, nos vinimos abajo, los bancos a través del gobierno nos despojaban de los dólares, el que depositaba en billetes verdes recibía un adelgazado equivalente de nuestro peso y así fuimos aprendiendo que lo mejor era amarrocar los dólares aunque fuera de a uno y atesorarlos sin pisar ni el umbral de un banco.
   La moneda norteamericana se hizo así más fuerte que nunca y casi nos dolarizamos porque a todo lo pensamos en dólares, aunque como supo decir Perón, para que se preocupan por el dólar si nunca han visto ni uno.
   Ahora es el que manda, me refiero al dólar y es el causante de nuestros dolores de cabeza, de corazón y de bolsillo y nos abruman con lo que debemos en dólares al FMI a nivel nacional, y los cordobeses endeudados hasta la coronilla con moneda extranjera incluyendo dinares kuwaitíes, aunque supe escuchar que algunas obras se harán con dinero nuestro olvidando la mano que nos dieron los árabes para el tema acueductos y otros emprendimientos.
   Y dejando al margen el dólar la gran aflicción nacional & popular aunque lo disimulen, es la inflación inmanejable que dibujan mensualmente en el Indec pero no convencen a nadie, porque la realidad nos muestra otro rostro, más desencajado y de brutal gravedad que cada vez más nos empuja a la desazón y al desamparo, y nos quisieron anestesiar otra vez con un reiterado sapo como lo fue aquello de los precios inamovibles por un tiempo que cambiaban cada semana y en nada aportaron a nuestra perdida tranquilidad.
   Alguien por allí sostuvo, y fue uno de los que dicen que las saben a todas, que la emisión monetaria no es la que genera inflación. Mire… La verdad, en lo personal me importa medio rábano si la maquinita con la que soñó Boudú genera o no depreciación monetaria, pero la verdad es que a eso lo sentimos a cada paso que damos, a cada compra que hacemos cuando la comparamos con lo mismo que compramos dos días atrás, a precio más barato y esa es la verdadera sensación de sabernos empobrecidos con el correr de las horas, porque cobramos una sola vez al mes pero debemos comprar todos los días y allí es que perdemos.
   Pido disculpas por lo primario del análisis, pero lo discutiría con cualquier máster en economía, para que me dijera con fundamentos lógicos, si estoy tan equivocado como a veces me parece…
 
¿Relajamiento de la prevención?
EL CRECIMIENTO DE CONTAGIOS, MUERTES E
INTERNACIONES PRESAGIAN RESTRICCIONES
 
   A veces, debo confesarlo, suena tenebroso prestar atención a los informes que detallan la cantidad de contagiados, el número de muertos, el porcentaje de camas ocupadas en terapia intensiva, que es como si estuviéramos condenados a seguir puntillosamente algo así como una carrera de números hacia el espanto de saber que inexorablemente, algún día nos tocará estar en esas nóminas del dolor y de la desgracia.
   Pero es bueno estar enterado porque cada informe actúa como generador de dos sentimientos inequívocos: el miedo por una parte que es en definitiva y por experiencia lo sostengo, el padre de la prudencia y por la otra, un llamado a que asumamos la responsabilidad de cuidarnos nosotros y por ende cuidar a nuestro prójimo, porque en esta batalla estamos todos sin ninguna distinción y marginarse es una actitud aparte de enfermizamente egoísta, casi suicida.
   En la medida que fueron creciendo las cifras merced a la irrupción de Ómicron se desató en la sociedad una especie de explosión por el testeo, y miles de personas se pasaron horas y horas esperando ser hisopadas, o desde un día para otro agitando fuerzas y alimentando expectativas que no siempre eran optimistas porque cada vez nos veníamos enterando de algún vecino, conocido, compañero de trabajo, pariente o cercano que había, como muchos dicen, entregado la ropa…
   Ese atávico temor a morir lleva por lo general su consecuencia que es sacar de su modorra al instinto de conservación, como manera de pelearla con la ayuda de la ciencia, pero no entregarse porque sí, en una actitud más cercana a la cobardía que al miedo que anula iniciativas.
   Por eso debe ser que en cierta medida cuando las estadísticas nos hicieron ver que la desgracia declinaba, fue como un campanazo para terminar drásticamente con los encierros, los cuidados, tirar al carajo la colección de barbijos que ya existe en cada casa y retomar una normalidad mentirosa frente a un enemigo que en lugar de descansar, se disfraza de otro para sorprendernos y matarnos.
   De por si alarmantes, las últimas informaciones nos llaman a la realidad que no es la que apresuradamente festejamos creyendo que todo, estos dos últimos y penosos años, fueron algo así como una olvidable pesadilla y podíamos retomar las costumbres del asado entre muchos amigos, la tribuna deportiva, el bailongo en cualquier salón, el rito de los festivales y otras actividades sociales que estaban en pausa y sin posibilidades de retomar la normalidad de tiempo atrás.
   Si la situación nos impulsa volver a las restricciones que creemos superadas, habrá que hacerlo en legítima defensa.
   No hay que bajar la guardia, por el contrario hay que fortalecer los mecanismos defensivos que para eso están las vacunas y los otros cuidados paralelos por la simple razón que vida hay una sola y tenemos la obligación de vivirla y respetarla como tal, tomando en cuenta aquella impactante definición de Flaubert: “La imbecilidad es una roca inexpugnable: todo lo que choca con ella se despedaza”.
   Tomar conciencia que aún vivimos con el peligro de la soga al cuello, es lo que mejor nos impulsará a cuidarnos y no resignarnos a esa posibilidad que el tiempo nos llevará a tener como parte de nuestras vidas, la permanente y ominosa espada de Damocles balanceándose sobre nuestras cabezas
 
Más de una década y media
LA MEGACAUSA  DEL  REGISTRO  SIGUE 
EN CAMINO A ESTABLECER UN RECORD
 
   Releyendo las modificaciones propuestas en Buenos Aires al Código Procesal Penal parece oportuno compararlas con la realidad de la causa Registro de la Propiedad de Córdoba. El nuevo Código reduce a tres años los plazos para las causas penales, sanciona a los jueces que demoren los casos, establece medidas alternativas a la prisión preventiva y consigna que los procesos serán orales y el juez deberá resolver en el momento. Además el fiscal se encargará sólo de investigar mientras que el juez, como tercero imparcial, evaluará la legalidad de las pruebas y tendrá autoridad para allanar, detener e intervenir teléfonos a pedido del fiscal.
   Veamos cada punto en la causa del Registro: las investigaciones comenzaron antes del 2005, por lo que ya cumplieron bodas de cristal, y el proceso se perpetúa alrededor de los mismos imputados, sin considerar los altos funcionarios denunciados y sin pedir explicaciones a ningún juez.
   No se intenta alternativa alguna a la prisión preventiva y por el contrario, cada instancia judicial ha buscado justificarla, pese a haber sido reconocida ilegítima e inconstitucional en distintos dictámenes tanto locales como nacionales e internacionales. Hay que resignarse a esperas de 3 a 6 meses para una respuesta judicial, pese a que los defensores tienen escasos días para presentar sus reclamos y por último la falta de tercero imparcial, permitió al fiscal ingresar al Guinness con récord de detenciones, prisiones preventivas, condenas anticipadas y pruebas que han sido cuestionadas, lo que no es para enorgullecerse. Más allá de las diferencias, la celeridad, eficiencia, legalidad, imparcialidad y honestidad, son condiciones esenciales para el buen funcionamiento judicial, en esta causa o en cualquier otra, porque de lo contrario, no es Justicia ni nada que se le asemeje.  
 
Una injuria a la sociedad argentina
FUNCIONARIOS VACACIONAN EN EL EXTERIOR CON
“PASAPORTE  PARA  COMETER TRANSGRESIONES”
 
   Por ser apasionado lector de conceptos y definiciones de los grandes pensadores, a veces ubico esas definiciones en personajes que realmente merecen ser parte porque se ajustan en un todo a cada precepto. Si de obediencia hablamos como en este caso al que me quiero referir, recuerdo al Mahatma Gandhi quien sostuvo “podrán golpearme, romperme los huesos, matarme, tendrán mi cadáver pero no mi obediencia” y eso si que se llama empecinamiento en la transgresión y no es para tomarlo de manera tan fanatizada por el cumplimiento de las leyes, aunque es digno de un necesario respeto y acatamiento.
   Pero está visto que no todo el mundo lo entiende así y vamos a un ejemplo cercano, más que próximo, que pasará a ser parte del anecdotario nacional & popular: el Sr. Presidente de la Nación aconsejó o mejor dicho impuso a sus funcionarios, que si empleaban su tiempo en vacacionar, lo hicieran dentro del país, para no despertar el indio opositor que está buscando el más leve desliz para salir a vociferar no siempre con prudencia y respeto.
   Seguramente algunos tomaron el mal ejemplo del inefable Ginés Gonzalez García, quien derrapara siendo ministro nacional de Salud organizando y poniendo en marcha un vacunatorio marginal para notables de la política y de otros ámbitos, dejando de lado las lógicas prioridades de respeto por quienes esperaban en la fila de la esperanza.
   Pasó lo que pasó, Ginés quien pontificó en su momento que el virus chino no llegaría a nuestras tierras por una cuestión de distancias y cuando entregó las llaves de su recuperado ministerio, allí nomas y aprovechando su chapa se mandó a mudar a España y se lo vio de tapas en la rambla de Barcelona birra en mano festejando algo, seguramente su alejamiento del foco de incendio.
   No creo, en lo personal, que otros casos que se dieron hayan querido emular a Ginés de quien se comenta que debió volverse de España por problemas con el idioma, porque la titular del Pami, la atractiva joven Luana Volnovich, quien tiene a buena parte de su familia en el mismo conchabo como empleados del organismo que atiende a jubilados, se mandó a mudar de vacaciones a las playas de blancas arenas volcánicas de la isla Holbox, ubicada al norte de Cancún, en México y oh casualidad o puro azar, allí se encontró con su pareja Martín Rodriguez, subdirector ejecutivo del mismo Pami.
   Entre las críticas que recibió la funcionaria (una de las renunciantes luego de las PASO 2021) en las redes sociales, varios usuarios remarcaron que el lunes, cuando ya se encontraba en el Caribe, desde su cuenta oficial en Twitter, Volnovich elogió a dos jubiladas que disfrutaban de sus vacaciones en la Argentina. "Qué lindo ver a Yolanda y sus amigas encontrarse y disfrutar en las Termas de Colón y Mardel con #PreViajePAMI", decía el mensaje publicado el 10 de enero.
   Imaginen la bronca de don Alberto, obligado a quedarse en el país, salvo sus incursiones al exterior para llorar ante el Fondo Monetario o para visitar a sus amigos del eje Argentina, El Salvador, Venezuela y Cuba sin dejar de lado a nuestra Rusia benefactora, que después de bastante tiempo aflojó con mandarnos su vacuna.
   Pero allí no termina todo este culebrón porque el Ministro de Desarrollo Territorial y encargado de atender la crisis de la vivienda, el camporista Jorge Ferraresi, admirador de la trayectoria de Fidel Castro y sin pedir permiso se piantó al Gran Lagarto Verde también para vacacionar.
   Se habló que se pedirían renuncias y otras cosas parecidas pero me parece que fueron meras exageraciones porque nada de eso ocurrió y a lo sumo habrá ocurrido algún tibio tirón de orejas a ella y a los muchachos otros tirones, pero supongo que de pudendas partes.
   De todas maneras la vocera oficial, Gabriela Cerruti, asumió con holgura su papel de disculpadora oficial, de todo aquello que despierta comentarios adversos.
 
¿En qué rincón quedó la independencia de los poderes?
LA  CORTE SUPREMA  DE  JUSTICIA  ES  EL  BLANCO
QUE ELIGIÓ EL PRESIDENTE PARA “HACER CENTRO”
 
   Eso de la independencia de los poderes es un tema tan pero tan franeleado, trillado y controvertido, que hasta se le ha perdido el respeto que merece nuestra sacra Constitución Nacional, de lo que por lo general se toman aquellos desesperados por fundamentar posturas propias en los claros conceptos allí contenidos.
   Fue todo tan confuso y entreverado, que no se sabe a ciencia cierta si la convocatoria partió desde el ocupante del sillón mayor de la Pinck House, de uno de los tantos sectores cegetistas o fue una de las tantas ocurrencias de ese aparato de hacer daño que se llama Luis D’Elía, piquetero rentado, “ocupador” de comisarías, apretador inveterado aunque para muchos sea un luchador contra las injusticias, más allá de un incitador a las más crueles de las violencias urbanas.
   El tema es que la intención es motorizar algo que tendrá que ser histórico, como lo sería una marcha multitudinaria para pedir algo así como que la Corte Suprema de Justicia de la Nación se mande a mudar, intención avalada y entusiastamente fogoneada por el ala dura del kirchnerismo remanente.
   La convocatoria sería para el primer día del venidero febrero en Capital Federal, territorio del calvo Rodriguez Larreta y se comenta que habrá una movilización general desde todos los sectores porteños y Gran Buenos Aires para asegurarse la contundencia del curioso reclamo y realmente los organizadores cuentan con fondos suficientes como para solventarla.
   La verdad, apelar a ese tipo de acción por encima del respeto y la autonomía consagrada por la Constitución Nacional, tales golpes de efecto suelen ser, con perdón de la mesa, tiros por la culata porque entre líneas está en forma paralela una demanda para la inmediata liberación de doña Milagro Sala, condenada y con sentencia firme por la autoría de varios delitos en su condición de agitadora en versión femenina, pretendiendo ser considerada presa política cuando la ley dictaminó su ingreso a la condición de política presa purgando condena tras juicio con todas las garantías de ley.
   Es para rogar que prevalezca el respeto por la ciudad porque cada vez que el guerrero D’Elía comandó un kilombo parecido, todos los argentinos debimos pagar a través de nuestros impuestos, los daños que se perpetraron contra la ciudad, sus monumentos y negocios del sector.
   Por allí uno se pregunta para qué apelar a esa violenta metodología, cuando votar es más saludable, menos riesgoso y enormemente democrático…
  Porque aunque haya que esperar, bien vale esa espera.
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UN BELLO ESCRITO DE MARIO BENEDETTI
QUE  CONVOCA A NO DEJAR  DE  LUCHAR 

   Para el cierre, un hermoso escrito de Mario Benedetti interpretado por varias voces, que es un canto a la lucha con esperanzas. Puede ser consultado en la columna de audios, ubicada en la parte  superior, en el costado  derecho de este blog.

11 de julio de 2021

S.L.B.: VIA LIBRE PARA LOS VACUNATORIOS "VIP" - EL HAMPA CRECE PORQUE NO HAY QUIEN LA FRENE - ALGÚN DÍA GOZAREMOS LA INDEPENDENCIA QUE FESTEJAMOS CADA 9 DE JULIO - LA MEGACAUSA, ESCENARIO PARECIDO A GUANTÁNAMO - EL INADI, LA SRA. DONDA Y ALGUNOS CONTRASENTIDOS - EL SUPERMINISTRO CAFIERO, QUEJOSO - LA CIUDAD, CAOS CALLEJERO Y EL BOLETO URBANO QUE NO SUFRIRÍA AUMENTO, ETC.

Desgrabación de los comentarios del periodista Gonio Ferrari en su programa “Síganme los buenos” nº 681 del domingo 11/7/21 emitido por la AM580 Radio Universidad Nacional de Córdoba.

Un disfraz de impunidad
VACUNATORIOS VIP NO SON SIQUIERA UNA
INTRASCENDENTE  VIOLACIÓN  DE  LA  LEY
 
   Tiempo atrás, por aquello que las situaciones críticas parecieran modificar los ritmos de vida cotidiana y la marcha de los relojes y los almanaques, quedó el inicio de aquel escándalo de los vacunatorios elitistas y los vacunados que por exhibir alguna notoriedad superior a la de la gente del llano, mostraron uno de los costados más misérrimos de nuestra variopinta sociedad ventilando la angurria de los muchos que se consideran superiores al resto por su cargo político, su trascendencia sindical y otros atributos de cartón, cuando debieron ser parte del rebaño que necesita inmunización sin acomodos.
   Es claro que desde el comienzo, desde el más alto nivel del poder nacional se sostuvo que “saltarse en la fila” de quienes aguardaban ser inoculados no configuraba delito, dicho por un catedrático en materia de derecho, que más que un cachetazo a eso que le llaman igualdad ante la ley tuvo más el carácter de burla, de “avivada”, de “picardía criolla” que algunos imbéciles le llaman.
   Pasó el tiempo, el ministro GGG debió enfundar sus intenciones de seguir trepando políticamente y no le quedó otra que mandarse a mudar sin tener la hidalguía de reconocer que se había equivocado, que la intrascendencia que le asignó al brote pandémico fue producto de su ignorancia o desinformación o buscó transformar sus conceptos en una esperanza para que la gente se lo creyera y no cayéramos al pánico que naturalmente sobrevino frente a la magnitud del drama.
   Casi olvido que el fracasado ministro a quien le quedaba grande hasta una simple secretaría ni siquiera reconoció haber ordenado la vacunación privilegiada de Eduardo Duhalde y familia, procedimiento que casi con certeza es para suponer que reiteró con algunos otros carteludos nacionales y populares.
   Dirigentes de toda laya desfilaron por esos lugares reservados a personajes de cierto nivel y en la mayoría de los casos y como burlona demostración de su poder, no tuvieron mejor idea que divulgar el momento del pinchazo por las redes sociales mientras la desesperación de la gente crecía por imperio de las demoras, los contrasentidos, las peripecias de los vuelos, las improvisaciones y los remiendos que eran peores que el daño que pretendìan reparar.
   Llegamos a ocupar penosos lugares mundiales en cuanto a las estadísticas de contagios, cantidad de personas inmunizadas, número de muertos con relación a los habitantes y ahora, con 100.000 cadáveres que rebaten cualquier disculpa, pretexto o salida medianamente decorosa, debemos resignarnos en miles de casos a la espera que la ciencia determine, sin medias tintas ni ocultamientos, que las mezclas de dosis entre vacunas de distintas marcas, ideologías y precios, pueden servir para asegurar no tan sólo la tranquilidad, sino la vida de todos los argentinos que siguen aguardando.
  Para colmo la Justicia, esa justicia que a veces exageramos su valía escribiéndola con mayúsculas, determinó que no es delito la existencia ni el funcionamiento de los vacunatorios VIP, cubriendo con su manto de generosa impunidad el caradurismo y la insensibilidad de todos los elegidos que primerearon, cagándose en los derechos comunitarios que eran para ser respetados.
   Ya sé que debemos esperar el juicio de la historia para los sátrapas que se aprovecharon de su notoriedad para disfrazar su miedo y postergaron a miles de personas que tenían los mismos derechos.
   Pero alguna vez y es un ferviente deseo que compartimos miles de argentinos, que se respete aquello de la igualdad ante la ley y que la ética, muchas veces, debe ser tomada con mayor seriedad que los códigos.
   Porque a la ética se la maneja con el corazón y desde el alma, por convicciones y compromisos, mientras que a los códigos los escriben, los promulgan los aplican o los niegan, seres humanos perfectibles, sujetos a errores y equivocaciones.
 
Hasta ahora, fracaso en la lucha
EL HAMPA EN  CÓRDOBA  CRECE  PORQUE
NO HAY QUIEN LE PONGA UN PUNTO FINAL
 
   No son momentos de andar gastando los mismos argumentos ya vetustos, pero que mantienen una deplorable vigencia entre los cordobeses que advertimos de qué manera el hampa avanzó hasta apoderarse de la tranquilidad de miles de habitantes de esta ciudad -y podemos incluir también a la provincia- donde el delito ha pasado a ser una penosa costumbre por su crecimiento y la impunidad que gozan los que se enriquecen, destrozan y matan con su práctica.
   Y vemos también con angustia indisimulable ya, de qué manera fracasan todas las medidas que dicen que se toman, porque los resultados son cada vez más míseros y se fortalece esa certeza de saber que los cordobeses vivimos entre rejas, alarmas, etcétera y los delincuentes andan sueltos burlándose de todo aquello que se proclama como realidad pero que, vale reiterarlo, no se advierte como  resultado, porque los asaltos, crímenes, y toda la gama de violaciones de la ley, crecen sin freno.
   Para colmo de males el paso de los días viene demostrando otra alarmante situación, que es la aparición de efectivos de la fuerza que debiera protegernos, involucrados en hechos resonantes, lo que se agrega a la numerosa cantidad de delitos perpetrados dentro de asentamientos policiales, como el robo de armas en la mismísima Jefatura, muchas de las cuales aparecieron después en asaltos y otras violaciones de la ley.
   Tampoco se pueden explicar los casos en que se perpetran delitos en las narices de la policía, a escasos metros de precintos y que no exista la manera de terminar con eso que es también un maltrato sicológico para los vecinos, que ven crecer el miedo y la impotencia.
   En el frente de la Jefatura, en un alarde de aplicación del márketing con el anhelo de mejorar su decrépita imagen ante la sociedad, se han colocado carteles con enunciación de consignas, pero en ninguna se advierte la aplicación de la prevención, que es la mejor manera de luchar contra la delincuencia que de paso sea dicho, cada día aumenta la violencia de su accionar y eso en gran medida se debe a la cantidad de armas que están en manos de la delincuencia.
   Es hora de tomar las cosas en serio y dejando de lado los compromisos políticos a la hora de aumentar el número de efectivos, porque si no se encara ese cometido basándose en la profesionalización y en la rigurosa selección, nada cambiará y la gente se ha cansado de tal manera, que cientos de delitos no se denuncian porque los afectados lo consideran una pérdida de tiempo.
   La situación de la inseguridad no debe emparentarse con la pobreza, pero si eso que se llama “la fabricación de pobres” continúa sin pausa, habrá que ver si el concepto se mantiene cuando sea el hambre, pero no ese hambre de no tener zapatillas a la moda o el último modelo de celular, sino ese hambre de no comer.
   Será entonces cuando tomaremos real dimensión de un drama que se avecina pero con dolor llegaremos a no dudar que no existieron la inteligencia ni la operatividad para prevenirlo.
 
A 205 años de Tucumán
LLEGARÁ EL DÍA DE CELEBRAR LA INDEPENDENCIA
QUE  LARGAMENTE  MERECEMOS LOS ARGENTINOS
 
   Anteayer celebramos -de alguna manera hay que calificarlo- un nuevo aniversario de nuestra independencia, nada menos que dos siglos más un lustro, que no acaba de concretarse pese al paso de los años.
   Y como no es tanto lo que ha cambiado en los últimos tiempos, me permito refrescar algunos conceptos emitidos en aniversarios anteriores porque de alguna manera o de varias, seguimos dependiendo y no poco.
   En lo económico, por ejemplo, de los caprichos de la banca internacional que nos tiene agarrados de allí donde te dije. En lo productivo, de lo que decidan el campo, la industria y otros sectores en nombre de todos, como si todos tuviéramos soja, sembráramos trigo, cosecháramos maíz o fabricáramos aviones, autos o motos.
   En lo político, el interior depende del basculante humor porteño, de las trenzas que se arman, de acuerdos que se concretan, de fidelidades que se exijan, de broncas que se generen o de las mentiras a las que estaríamos obligados a tomar como verdades bíblicas.
   En lo deportivo, dependemos de cómo se estructuren los campeonatos, de cómo se comporten los árbitros y de qué apoyo económico estatal reciban nuestras instituciones. En lo cultural, de qué música nos impongan como moda, qué ropa nos insten a usar, qué comidas y bebidas nos sugieran casi como enfermiza obligación de consumo.
   Y de nuestro pasado inmediato y del presente abrumador, la inmisericorde irrupción de la pandemia pese a que inicialmente se le restara su aterradora importancia por eso de la distancia, y después de una vacilante reacción entráramos a una vorágine de intereses económicos, ideológicos y geopolíticos de cuya trama también seguimos siendo dependientes.
   La memoria colectiva jamás dejará de lado la existencia de ventajas y miles de privilegiados “bendecidos” por la franquicia de adelantarse en la fila de las inoculaciones, al amparo presidencial que declamó -aunque fuera jurídicamente cierto- que tal maniobra antiética y en ciertos aspectos inhumana no era delictiva y se instauró como práctica reservada al padrinazgo de los poderosos, transformando al argentino medio en ansioso dependiente de caprichos y apetencias internas.
   Seguiremos siendo dependientes de otros, de afuera como de adentro, mientras no asentemos nuestra propia identidad y aprendamos de nuestra rica historia que el camino al procerato es arduo, sacrificado y patriótico más allá de las ambiciones materiales y la vocación por las inclinaciones dinásticas. Esto se resolverá cuando entendamos y obremos con coherencia de Nación, respeto a la paciencia y sentido de argentinidad. Aquel 9 de julio de 1816 en Tucumán conquistamos en parte lo que todavía es uno de los principales motivos de la lucha diaria de los actuales 44 millones de argentinos.
   Anteayer en Tucumán, el Sr. Presidente de la Nación, quien cuenta con un ejército de asesores, escribas y amanuenses para referirse a los asuntos de Estado, pronunció un discurso por el 9 de julio y entre otros conceptos dijo: “Güemes armó una suerte de guerra de guerrillas por orden de San Martín. Lo hizo acompañado por una mujer, por varias mujeres”, aseguró el Presidente y agregó: “Macacha Güemes, su esposa, pero también por una mujer emblemática para la libertad de América Latina: Juana Azurduy”.
   El abogado penalista y profesor universitario Alberto Fernández, cometió el error de confundir a Magdalena Dámasa Güemes de Tejada como la esposa del militar, cuando en verdad ella era su hermana. Macacha también es reconocida como una de las mujeres más destacadas de la Independencia argentina y de la provincia de Salta y allí diversas plazas y calles le rinden merecido homenaje.      
   No es necesario inventar prohombres ni heroínas ni fabricar más bronce del que nos señalan el tiempo, la memoria y el respeto por nuestra castigada historia.
 
Guantánamo y la Megacausa del Registro
¿EN QUE FUTURO LA JUSTICIA PODRÁ ASEGURAR
HABER TRIUNFADO  CON  RESPETO A LAS LEYES?
 
   Guantánamo es un campo de concentración que EEUU posee en la isla de Cuba, donde prisioneros extranjeros, muchos de ellos ciudadanos comunes, son encerrados de manera arbitraria e indefinida sin gozar de los derechos de presunción de inocencia y juicio justo. Sufren coerción física y psicológica equivalente a la tortura para forzar declaraciones de culpabilidad o acusaciones a otras personas y son juzgados por comisiones especiales, lo que ha ocasionado muerte y enfermedades de numerosas personas. 
   No es difícil encontrar un paralelo de esta situación con la causa del Registro de la Propiedad de Córdoba si tenemos en cuenta que personas comunes, sin antecedentes, son encarceladas arbitrariamente para investigar, sin gozar de los derechos y garantías que otorga nuestra Constitución y permanecen encerradas hasta tres años sin juicio, situación muy cercana a la tortura física y psicológica.
   Y el juicio, cuando llega, está a cargo de una comisión especial única, que confirma, aunque sea con íntima convicción, condenas ya cumplidas. La causa carga con varios presos muertos sin juzgar y quién sabe cuántos enfermos, entre quienes fueron separados de familia, casa, afectos y trabajo. 
   Organismos de todo el mundo han denunciado a Guantánamo como símbolo de falta de respeto a los derechos humanos y a las normas internacionales.  En esta causa, un fallo de nada menos que de las Naciones Unidas y varios nacionales, han establecido la arbitrariedad de las actuaciones judiciales cordobesas, colocando al Poder Judicial en un camino demasiado cercano al del campo de concentración, y generando inevitable intriga de sus motivos. 
 
Complicada situación
EL INADI, LA SEÑORA  DONDA Y ESE
PARAISO DE LOS CONTRASENTIDOS
 
   Era de esperarse alguna reacción caliente más que cerebral, pero las cosas se fueron dando de a poquito, como para que la comprensión de la situación no tuviera obstáculos.
   Cuando el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi), que dirige Victoria Donda, ampliamente conocida por su fanatismo militante con el oficialismo nacional, asegurara que aquella frase del presidente Alberto Fernández que levantó polvareda acerca del origen de los argentinos, brasileños y mexicanos no corresponden a un acto de discriminación, la oposición le salió al cruce.
   Desde tal sector, concretamente me refiero a Juntos por el Cambio, el diputado nacional Waldo Wolff se refirió a la resolución de la entidad y fue categórico: “Hay que cerrar el Inadi porque es un comisariato político”.
   Rodriguez Larreta por su parte dijo en declaraciones periodísticas que había trabajado en una institución que fue socia fundadora del Inadi, la DAIA, expresando que “ver que a este Inadi no le llama la atención a un Presidente que dice que los brasileños salieron de la selva, a mí me da vergüenza”. Y luego fue más tajante al sostener: “¡Los trató de monos a los brasileños! Dijo que salieron de la selva. ¡Los trató de animales!”.
   En esa línea crítica, el diputado nacional Wolff comentó qué hubiera hecho en lugar de Donda ante una situación similar. “Si yo fuera funcionario diría: ‘Busquemos la manera de no pegarle al Presidente, pero llamémosle la atención’ agregando que el INADI “está al servicio del gobierno y si mañana me sanciona a mí por algo que digo, me río porque no tiene ningún tipo de legitimidad”, sentenció.
   Pocas horas atrás el instituto dirigido por Victoria Donda se expidió sobre este tema a través de un comunicado, sosteniendo que “Los dichos efectuados en el marco de la visita del Primer Ministro español no reflejan las acciones del gobierno de Alberto Fernández, que, lejos de promover la discriminación y la invisibilización de los pueblos originarios, es un gobierno que promovió intensamente la igualdad de los grupos históricamente vulnerabilizados”.
   O sea que ahora cualquiera, tomando en cuenta esos episodios de “espadeo” entre posiciones antagónicas, puede desvalorizar a su antojo la personalidad o los valores humanos de quien se le cante, con la frescura de saber que nadie le podrá tirar de sus orejitas acusándolo de discriminar u ofensas parecidas.
   Si doña Donda hubiera tenido la misma firmeza de convicciones acerca del respeto a su prójimo, jamás hubiera caìdo a la bajeza de tener por más de una década a una empleada doméstica en negro y que cuando le fue recriminada esa acción, le ofreció nombrarla en un puesto dentro del organismo que tiene a su cargo.
   En pocas palabras, un asco de censurable proceder no tanto por la discriminación laboral y sus consecuencias, sino por la insensibilidad demostrada hacia una persona legalmente indefensa.
 
Dimes y diretes…
SUPERMINISTRO CAFIERO Y CIERTAS
ALUSIONES A “UN  PAÍS  DE  MIERDA”
 
   El jefe de Gabinete Nacional, algo así como un super ministro, ante el Consejo Multisectorial de la Juventud en la Casa Rosada, tuvo críticos conceptos hacia  los medios de comunicación, sosteniendo “la Argentina no es ese país de mierda que a veces nos tratan de retratar”, y remarcó que la pobreza no se soluciona con planes sociales, sino con trabajo, y también destacó que “el destino para nuestras juventudes no puede ser Ezeiza; tiene que ser desarrollarse en un país que brinde todas las condiciones económicas, sociales y culturales para hacerlo”.
   El alto funcionario cuestionó asimismo el rol de los medios de comunicación desde que Alberto Fernández asumió su cargo. “Desde que empezó nuestro gobierno hay notas y notas de argentinos exitosos que se fueron del país. Argentinos que se fueron del país a trabajar en cosas que acá no estarían dispuestos a trabajar, como si eso fuera un destino común para el país”, expresó.
   Tenemos un país maravilloso, dijo, y tenemos que defenderlo entre todos, no lo defiende un gobierno, agregando que “Argentina es uno de los 12 países en el mundo que hacen vacunas contra el COVID-19. Tan malos no somos. Somos uno de los 15 países que desarrollan satélites”, agregó con la idea de refutar las críticas opositoras. En tanto, pidió “una juventud activa que debata y no les tenga miedo a las opiniones que se reproducen en los medios dominantes”.
   Otro de los párrafos salientes de su discurso fue “Cuando se pensó que mejor que los dirigentes políticos eran los militares, se fracasó estrepitosamente y con un baño de sangre. Toda la sociedad retrocedió. Cuando se decidió que era tiempo de empresarios, que podían exhibir un compromiso pura y exclusivamente con su empresa, sin tener una mirada de dirigencia gremial o militancia, sino pura y exclusivamente enfocada en la dirección de una empresa, tampoco fue un modelo que funcionó en la Argentina. Tampoco los jueces están capacitados para dirigir nuestro país”, aseguró.
   En verdad, se trató de una radiografía a la comunidad y sus comportamientos, pero enfocada como es de suponer, desde el prisma de un gobierno negacionista de una realidad que no es la que desde allí se nos pinta.
   Ni una palabra de los nichos de corrupción, del brutal endeudamiento, de la pretendida impunidad que con desesperación se busca, de los baches en el manejo de la pandemia, del aislamiento internacional que tanto costó recuperar, para terminar ahora alineados con China, Cuba, Rusia, Venezuela, El Salvador…
   Realmente lo que esperamos es que alguna vez tengamos un gobierno que nos lleve a todos esos fantasiosos paraísos que nos pintan, ahora más cercanos a las utopías que a lo que puede considerarse como un futuro venturoso.
   Será un país de mierda cuando volvamos a reconocer fracasos, cuando nos despojemos de la soberbia que somos los mejores del mundo porque le ganamos a Brasil o que hemos dominado la pandemia con vacunas argentinas.
   Si los planes sociales no son la solución, que dejen de usarlos como mecanismo para comprar votos y en lugar de la dádiva y el asistencialismo, generen trabajo genuino que de paso restituya la perdida dignidad del esfuerzo.
   Hay un solo camino que lleva a la grandeza y es el que transita por el trabajo, el sacrificio, el respeto para que no seamos, en lugar de un país con la eme de mierda, dejemos de tener como característica ante el mundo y hacia adentro de nosotros, la eme de mentira.
 
Dos dramas crecientes
LA CIUDAD, SU CAOS URBANO Y UN ABUSO EN EL
PRECIO  DEL BOLETO “QUE NO IBA A AUMENTAR”
 
   Hay tantos aspectos a tener en cuenta a la hora de analizar la situación de zozobra y desorientación que provoca entre otros males urbanos, el caos en la circulación vehicular, que cuando hablamos de “ciudad vivible” no se nos cruzan en la mente las calles estrechadas, los colores que les encajan a ciertos lugares, la prolijidad de los cordones de las veredas, la presencia de los chalecos celestes y otros detalles que mucho tienen que ver con la vida en comunidad.
   Es para suponer que los urbanistas también lo han pensado, que al estrechar las calles con intensa circulación, las que se establezcan como alternativas estarán aún más congestionadas, si partimos desde la lógica más allá de las ganas de introducir cambios que pudieran tener las autoridades, ansiosas por mostrar cosas nuevas porque no dejan de ser parte de la campaña proselitista en un año electoral, y todo debe ser aprovechado incluyendo el desborde publicitario para anunciarlas, que es para suponer que resulta más costoso que muchas de las obras que promocionan.
   En estos tiempos de pandemias, la escasez de inspectores que regulen el tránsito es uno de los motivos por los cuales se emputece de tal manera, que el circular por el centro a ciertas horas y pese a los encierros, el uso del automóvil pasa a ser una especie de rally ciudadano.
   Otro de los detalles que afecta la normalidad ciudadana es la cantidad de protestas que se realiza, especialmente con cortes de puentes, cuando la ley  impone la liberación de al menos un carril, lo que no se respeta en lo más mínimo, con el agravante que la policía obviamente cumpliendo órdenes, se ubica en las manifestaciones protegiendo a quienes protestan y permitiendo que se perjudiquen aquellos que necesitan ir a trabajar o simplemente desplazarse, con las garantías que consagra la Constitución Nacional pero que muchos se las pasan ya sabemos por qué partes.
   Y en verdad, también desde la Justicia se ignoran estas situaciones porque sería para pensar que en esos casos, la actuación debiera ser instantánea y de oficio por flagrancia.
   Esa falta de respeto al ciudadano, se complementó ahora con el aumento en el precio del boleto y no estoy del todo seguro, pero creo recordar que hace no mucho, el intendente municipal aseguró que no habría nuevos ajustes en el precio del viaje en ómnibus o en troles.
   Ahora a 50 pesos el boleto contra los 18 pesitos que se pagan en la capital federal, es para suponer que cuando un cordobés por obligación o imposición se deja afanar 50 pesos para hacer un viaje en bondi, le está pagando a algunos porteños que reciben con placer nuestra generosidad.
   Entonces cabe pensar si los dirigentes quieren hacer política costosa para evitar conflictos, que lo hagan con su dinero y no con el de la gente, porque a la gente le cuesta mucho más ganarlo, que aquellos dependientes del Estado.
   El caos céntrico es el peor forúnculo en mala parte que sin dudas aqueja y molesta a muchos funcionarios…